Las aplicaciones de viajes que funcionan en la ciudad de Santa Fe ganan cada vez más terreno. Por este motivo, trabajadores de taxis y remises llevan adelante reuniones y prevén este martes movilizarse hacia el Palacio Municipal.
Entienden que hay una “competencia desleal”. También piden mayor seguridad.
Las aplicaciones de viajes que funcionan en la ciudad de Santa Fe ganan cada vez más terreno. Por este motivo, trabajadores de taxis y remises llevan adelante reuniones y prevén este martes movilizarse hacia el Palacio Municipal.
En la previa a la reunión que mantendrán este lunes por la tarde, entre taxistas y remiseros de la ciudad, choferes autoconvacados dialogaron con la prensa. El remisero Rodrigo Mansilla comentó: “Todos hablamos de lo mismo y es la preocupación que tenemos por las aplicaciones ilegales. También el tema de la inseguridad. Necesitamos pedirle al municipio y al Concejo que traten estos temas porque es un rubro que está muy castigado”.
El servicio de las plataformas de viaje fija su precio según la oferta y demanda que hay en diferentes partes del día. En muchas oportunidades ofrecen traslados por un precio mucho menor al que cobra un taxi o remís, por lo que los usuarios se inclinan por esta alternativa de viaje. Sin embargo, estas apps no poseen autorización municipal para operar, ya que no está incluido en las normas en vigencia que establecen que el transporte público de personas en el ámbito de la ciudad de Santa Fe está conformado por taxis, remises, colectivos y transportes escolares.
Al ser consultados sobre cuál es la respuesta que esperan por parte de las autoridades del gobierno y el deliberativo local, Mansilla indicó que “que se frenen las aplicaciones ilegales porque no entran en ningún marco regulatorio y trabajan como nosotros, incluso más. Por eso nuestra recaudación se ha caído entre un 20 y 30%”.
Los choferes entienden que hay una competencia desleal entre el subsistema de taxis y remises y las plataformas de viaje. “Necesitamos que se trate este tema con urgencia por eso vamos a presentarles una nota al intendente (Juan Pablo Poletti) y otra al Concejo Municipal”, reiteró el remisero autoconvocado.
A su vez, los trabajadores del volante entienden que no pueden tener una sana convivencia con las aplicaciones. “Es una ciudad muy chica y no da para que haya una flota tan grande de autos. Primero porque no están regulados, y en nuestro caso tenemos los autos habilitados, somos idóneos para transportar pasajeros”, sostuvo Mansilla. Más allá de que en muchas ciudades argentinas y del mundo, hay plataformas que prestan servicios, el remisero aseveró que “en varios lugares los han regulado y hasta los han prohibido”.
El taxista José Sal Acosta comentó que a los trabajadores del volante de la capital santafesina se les exigen diversos requisitos para prestar su servicio y son controlados diariamente, “pagamos todos nuestros impuestos, estamos regulados por la Municipalidad, nos controlan la ticketera, el importe que tenemos que cobrarle al usuario. Algo que esas plataformas no, ellos manejan una tarifa totalmente desleal, fuera del contexto que nosotros estamos viviendo en la realidad de nuestro trabajo”.
Sobre el tema que afecta a los conductores durante su trabajo, la inseguridad sigue siendo un tema con pendiente solución. En lo que coinciden varios choferes es en la implementación de la mampara antivandálica.
“Sigo sosteniendo lo mismo, creo que hay que separar al pasajero del chofer. Las agresiones siguen estando, hay compañeros que son lastimados, ahorcados, al ser agarrados desde atrás”, mencionó Mansilla.