Jueves 2.6.2022
/Última actualización 21:58
En la sesión del Concejo santafesino de este jueves, figura en los asuntos con preferencias de tratamiento un proyecto de ordenanza modificatoria de las normas vigentes que regulan la actividad de taxis y remises en la ciudad de Santa Fe. La norma saldría aprobada aunque con algunos cambios, adelantaron a El Litoral fuentes deliberativas: habrá que esperar cómo se aprueba el despacho definitivo.
La nueva norma en ciernes plantea varios puntos, entre los que sobresalen la unificación de los criterios para las tarifas, la posibilidad de incorporar al parque automotor de taxis y remises unidades de mayor antigüedad, el estricto cumplimiento de las revisiones técnicas vehiculares y la novedad: contar con un sistema de geolocalización (GPS) para tener certezas sobre el "correcto funcionamiento del servicio".
La actualización de este subsistema de transporte público se da, en parte, por la emergencia en la que se encuentra inmerso. Cabe recordar que no hay la suficiente oferta de unidades de taxis y remises en la ciudad, sobre todo los fines de semana (trascendió que con estas modificaciones, el municipio podría otorgar más licencias); pero también la presión que significa la competencia de las apps de viajes privados que están operando en esta capital.
Uno de los cambios más significativos es, en primer lugar, una modificación en el parámetro del valor de la bajada de bandera. Así, ésta será no podrá ser mayor al precio de un litro y medio de nafta premium (o súper, esto es lo que estaba por definirse). En la ordenanza actual, la bajada de bandera no será mayor al precio de un litro de nafta especial, y el Ejecutivo deberá fijar un valor del 10 % sobre la tarifa nocturna.
Ahora, con el proyecto que se está por discutir, el Ejecutivo deberá fijar un valor del 20% para los servicios que se presten en horario nocturno (de 22 a 6) y, por cada 130 metros de recorrido, se podrá incrementar un valor no mayor al 10% del monto de bajada de bandera. En principio, un esquema similar regiría para el sistema de remises.
Otra de las modificaciones es que se faculta al Ejecutivo Municipal a autorizar la incorporación de modelos de automóviles para el servicio de taxis con una antigüedad no mayor a siete años (modelos 2015) contados desde el 1° de enero de 2022. Hoy la antigüedad tope son de coches modelo 2017.
Por otro lado, tanto taxis como remises de la ciudad deberán contar con dispositivos que contengan Sistemas de Posicionamiento Global (GPS) u otro similar, "de forma tal que permita visualizar en tiempo real, a través de mapas digitales, la posición del vehículo del titular". Esto se dispone para tener certezas sobre el cumplimiento efectivo respecto de la prestación del servicio de transporte privado, indicaron fuentes legislativas.
Por último, los taxis tendrán la obligación de contar con la certificación de Revisión Técnica Obligatoria (RTO) vigente, emitida por un Centro de Inspección Técnica Vehicular autorizado por la Provincia de Santa Fe o certificación emitida por institución de carácter técnico reconocida en la materia, autorizada por el Departamento Ejecutivo Municipal. Dicha certificación deberá ser exhibida anualmente", dice el despacho, que se debatirá en la sesión de este jueves.
Y también, en cuanto a titulares de remises, "para todo trámite de habilitación o transferencia de licencias otorgadas para la prestación del servicio público de transporte de pasajeros, sea por taxis o por remises, será requerido el Certificado de Buena Conducta expedido por la Policía de la Provincia de Santa Fe".