Por los "roba ruedas", aumentaron las ventas de kits antivandálicos en la ciudad de Santa Fe
También crecieron las consultas. Estos sistemas de seguridad antirrobo cuestan entre 6 mil y 9 mil pesos. La escalada de robos de rodados en la capital y otras ciudades de la provincia es un "efecto colateral" de un conflicto nacional que, tras largas semanas, se resolvió.
Por los "roba ruedas", aumentaron las ventas de kits antivandálicos en la ciudad de Santa Fe
Los "roba ruedas" fueron noticia en los últimos días y ocuparon el protagonismo en diarios digitales. Este tipo de insólito hurto no es otra cosa que el efecto colateral de un problema de escala nacional: la producción de neumáticos estaba prácticamente paralizada por un conflicto entre las empresas productoras de neumáticos y el Sindicato Único del Neumático (SUTNA), el cual había bloqueado las principales terminales.
Este viernes se llegó a un acuerdo paritario entre empresarios del rubro y el gremio. Con ello, se destrabó el conflicto y se levantó el paro que había provocado un freno total de la producción en el sector automotriz. Los trabajadores retomaban las tareas desde este viernes; pero hasta que las fábricas productoras de neumáticos generen un volumen significativo como para abastecer los escasos -y en algunos casos nulos- stocks de los comercios de venta de cubiertas en todo el país, pueden pasar varios días. Y los "roba ruedas" lo saben.
En la ciudad y durante la semana que pasó, casi una decena de propietarios de autos sufrieron en la ciudad el vandalismo de estos "amigos de cubiertas ajenas". Y como contrapartida, aumentaron en esta capital las ventas de los kits antirrobo para ruedas, a la par de que también crecieron las consultas sobre estos insumos de seguridad.
"Nos sorprendió. Aumentaron muchísimo las ventas de kits antirrobo para ruedas en tan sólo pocos días. Y los llamados de clientes consultando sobre la disponibilidad de este producto y los precios, también. Es que genera preocupación la cuestión de los ladrones de ruedas", le dijo a El Litoral Gerardo Moras, de Ruedalito Llantas y Neumáticos. Desde otros dos locales de insumos para el automotor coincidieron en la aseveración.
Cómo son, cuánto salen
Algunos kits de seguridad antirrobo traen tuercas y otros, bulones reforzados. "El bulón antirrobo, por ejemplo, tiene una forma especial donde se encastra un tubo (adaptador), y a su vez ese tubo se manipula con la llave de rueda original. Sin ese adaptador, se hace casi imposible querer sacar (robar) una rueda", asegura el comerciante. También, dependiendo del tipo y marca del auto, hay otros sistemas de seguridad antirrobo originales.
Los kits antirrobo de ruedas de cuatro unidades (uno por cada rueda) vienen con una llave adaptadora y otros con dos llaves (como repuesto), y sus precios van de los 6 mil a los 9 mil pesos. Eso es, en términos estimativos, lo que cuesta asegurar el auto de los ladrones de cubiertas.
"Lo que nos decían los clientes es que si bien el seguro muchas veces responde por el robo de una rueda, en este contexto -y pese a que el conflicto nacional está en vías de superación- es muy difícil y complicado conseguir otra", cuenta Moras.
Y aunque la gente paga por lo general una cochera, apela a adquirir estos kits para evitar situaciones no deseadas. "Por ejemplo, una pareja sale a cenar un sábado a la noche. Al salir del restaurante, se encuentra con que el coche tiene una rueda menos. Es sábado y de madrugada. ¿Qué hacés con el auto en un caso así? Hay que llamar a la grúa, esperar varias horas hasta que te vengan a buscar, o bien conseguir que un amigo te preste una rueda… Es un tremendo trastorno", grafica el vendedor.
Faltantes y precios
Una aclaración: en los días previos a la resolución del conflicto, El Litoral hizo un sondeo de consultas telefónicas -para saber si había faltante de cubiertas- en al menos ocho locales de venta de llantas y neumáticos de la ciudad capital. La respuesta fue repetida: "No vamos a hacer declaraciones públicas, por decisión de la empresa". Fue llamativo este hermetismo.
A pesar de que el parate en la producción de neumáticos a nivel nacional ahora se destrabó, "hoy por hoy tenemos faltante de neumáticos, sí: pero tratamos de cubrir las necesidades de los clientes con mercadería importada que ingresó de Asia, Tailandia, Taiwán, Corea del Sur, entre otros lugares del mundo", le dice a El Litoral Ricardo, de Tenerello Llantas y Neumáticos.
"Queda algo en stock para la línea baja y media gama, con algo de productos locales, pero más que nada de esos productos importados, pues los importadores pudieron ingresar algo de esta mercadería la cual no quedó 'atada' al conflicto nacional", agrega este comerciante.
"Nosotros no entramos en faltante -aporta Moras-, pero lo que vemos es un aumento muy importante en los precios. A medida que se agotan los stocks, la cubierta sube en sus costos: es la relación entre poca oferta y mucha demanda, a lo que se suma el impacto inflacionario. Pero además, el neumático entendido como producto atraviesa una crisis post pandemia que dificulta las entregas en todo el mundo".
Algunos precios, como para dimensionar costos: un neumático rodado 14 (de procedencia importada) oscila entre 29 ó 30 mil pesos y hasta los 38 mil pesos, para autos medianos y de gama intermedia. Y para aquellos de alta gama, los valores van desde 45 hasta 90 mil pesos, cada cubierta. Pero incluso hay valores más altos (todo depende del coche), que pueden llegar hasta los 130 mil pesos por cada unidad.
Problemas de vieja data
El conflicto empezó desde hace unos tres años: "Con los distintos cepos y la restricción a las importaciones, las tres fábricas del país (Fate, Pirelli y Bridgestone) empezaron a tener problemas. Porque entre los insumos importados que necesitan éstas para producir, la mayor parte vienen de Brasil. Ahí comenzaron los perjuicios para los productores, que no podrían sacar la producción (en los camiones). La escasez de ofertas produjo un encarecimiento de los precios", pone en contexto Ricardo.
Y puntualmente la escasez de cubiertas para autos comenzó hace unos cuatro o cinco meses, con el freno a la producción (medida que ahora se levantó). "Este conflicto gremial terminó agudizando los problemas que ya venía acarreando sobre sus espaldas el rubro; la peor consecuencia sería que alguna de las tres fábricas del país muden sus operaciones a Brasil", añade el comerciante.
¿Y el recapado, es decir, el proceso para renovar una cubierta ya usada? "Hoy, por cuestiones de seguridad y técnicas, no se hacen recapados para cubiertas de autos; sólo para camiones y maquinaria agrícola", concluye.