Jueves 26.10.2023
/Última actualización 21:17
El robo de las cuentas de WhatsApp con el fin de cometer estafas se ha convertido en uno de los ciberataques más frecuentes durante este último tiempo. Cada vez son más las víctimas que tienen que padecer situaciones de estas características, entre ellas vecinos, comercios, empresas y hasta funcionarios, como el caso del ministro de la Producción de Santa Fe, Daniel Costamagna quien denunció días atrás el hackeo de su teléfono celular.
En Venado Tuerto estas estafas están a la orden y a diario se van conociendo nuevos hechos con modalidades similares: hacerse pasar por algún organismo, institución o empresa para solicitarle a la víctima un código con el cual logran apropiarse de las cuentas de WhatsApp. Lo mismo sucede en todo el territorio provincial, quedando demostrado a través de las denuncias que ingresan a diario a Fiscalía.
“Los delincuentes encontraron un medio de comunicación masivo, como es esta aplicación WhatsApp, que hoy prácticamente la usa toda la población, aunque se desconocen las medidas de seguridad para estar protegidos”, comentó en diálogo con el programa “A pesar de todo” (LT29) Rodrigo Álvarez, especialista en ciberseguridad y jefe de cibercrimen de la Agencia de Investigación Criminal (AIC) de la provincia.
“Vemos que los usuarios no le dan demasiada importancia a la seguridad que tiene cada aplicación, incluso no observamos una bajada de línea por parte de las empresas de tecnologías sobre la conciencia que se debe tener al momento de la utilización de estas herramientas y de los riesgos que se corren. Entonces, el delincuente o cibercriminal terminan aprovechando esta realidad para cometer algún hecho”, indicó.
Haciendo referencia puntualmente al robo de las cuentas de WhatsApp, precisó: “Habitualmente la técnica más utilizada es a partir de un llamado telefónico suplantando la identidad de algo o de alguien, como ha sucedido con el Ministerio de Salud a partir de la pandemia por Covid-19 con la excusa de turnos de vacunación contra el coronavirus (también con otros organismos y empresas como Anses, Litoral Gas, PAMI y demás) y les dicen que les va a llegar un código o número, que en realidad es la forma que utiliza WhatsApp como medio de contacto para poder hacer una migración de cuenta de un dispositivo a otro; es decir que el delincuente carga nuestro número de línea a la aplicación y una vez que se apodera del código de verificación, automáticamente roba la cuenta”.
Intervención de la AIC
Álvarez contó que desde la AIC están trabajando en dos aspectos, por un lado en la prevención, tarea que está a cargo del Ministerio de Seguridad de la provincia de Santa Fe con comunicados diarios, para “advertir a los ciudadanos y usuarios de esta aplicación sobre la importancia de las medidas de seguridad, sobre todo en la incorporación del doble factor de identificación”, y por otro en la investigación que se inicia cuando el usuario ya es víctima de un hecho estas características, siempre y cuando suceda algo más que la pérdida del ingreso a su WhatsApp, que en sí no es un delito concreto.
De todo modos, el especialista en ciberdelito resaltó que “una vez que el delincuente logra hacerse de la cuenta del usuario, suplanta su identidad y empieza a solicitar dinero a todos sus contactos. Aquí es cuando se puede llegar a concretar la estafa, siendo, junto a la denuncia, el punto de partida para las investigaciones de la Agencia de Investigación Criminal”.
“Las líneas de acción son siempre las mismas, pedir información a las entidades bancarias, las billeteras virtuales y a las empresas cripto, donde empiezan a solicitar que se transfiera el dinero. En la mayoría de los casos, la plata va a cuentas mulas, que son utilizadas para mover dinero, con titulares que muchas veces si saben que existió ese movimiento o se uso la cuenta para ese fin. A partir de ahí, cada caso puntual nos va llevando por diferentes caminos”, completó.
Cabe señalar que en años anteriores y a principios de este 2023 se han logrado identificar a autores de ciberdelitos que incluso derivaron en allanamiento y detenciones en distintas ciudades del país. “Son delitos que atraviesan fronteras provinciales y nacionales, lo cual hace que las investigaciones sean mas complejas”, enfatizó.
Rodrigo Álvarez resaltó que muchos de estos delitos tienen como medios operativos billeteras virtuales o cuentas de otros países, aunque en su mayoría se cometen dentro del mismo país. También se ha logrado detectar hechos que han tenido como autores a personas que están privada de su libertad en cárceles o penales.
Denuncias
“Todos los días estamos recibiendo, al menos, una denuncia en la provincia de Santa Fe, y estoy siendo generoso”, afirmó el especialista, considerando que la gente denuncia porque sientes vulnerada su confianza, al creer que es alguien conocido, un familiar o amigo, el que le está solicitando el dinero.
En este sentido, desde la AIC recomendaron a la población que sufrió ataques de estas características, hacer la denuncia, que es fundamental para la investigación. Se pueden acercar a Fiscalía, a los centros territoriales de denuncia, a las dependencias policiales o a través de la página web www.mpa.santafe.gov.ar