El municipio envió 1.800 notificaciones a los dueños de inmuebles con valor patrimonial
La Municipalidad distribuyó las misivas y ahora está recibiendo consultas de dos o tres vecinos por día. Son propiedades incluidas en el catálogo de inmuebles patrimoniales. "Muchos ya conocían que sus viviendas eran bienes protegidos", dijeron desde el municipio. En la ciudad hay 1.322 inmuebles en el Catálogo.
El municipio envió 1.800 notificaciones a los dueños de inmuebles con valor patrimonial
Un total de 1.876 vecinos están recibiendo notificaciones enviadas por la Municipalidad de Santa Fe, donde se les informa que sus propiedades están comprendidas en el Catálogo de Bienes del Patrimonio Urbano Arquitectónico de la ciudad de Santa Fe. En el aviso también se les informa qué grado de protección tiene ese inmueble y que, por este motivo, previo a toda intervención sobre el mismo, ya sea de magnitud o menor, deberá contar con un "visado patrimonial", para luego autorizar o no el otorgamiento del permiso de obra.
De esta manera, el municipio está dando cumplimiento a la Ordenanza N° 12.784 del nuevo Código de Inmuebles Patrimoniales -aprobada por unanimidad en el Concejo en septiembre de 2021-, que en su artículo 16 dispone que se deberá notificar a las personas con derechos reales sobre el inmueble incluido en el catálogo.
A raíz de estas notificaciones -que les llegó a los particulares no a los bienes del Estado-, a la Municipalidad se están acercando a razón de dos o tres vecinos por día a realizar consultas, pedir más información o conocer cómo seguir. "Sorprendidos no están, porque muchos ya conocían que sus viviendas eran bienes que estaban protegidos", respondió ante la consulta de El Litoral, Germán Müller, coordinador Ejecutivo de Patrimonio Urbano del municipio.
Según dijo, "los vecinos vienen a recabar más datos, algunos de ellos no habían bajado la información adicional que le enviamos en los QR donde figura la ordenanza completa y el listado de las propiedades. Algunos no la leen y vienen a preguntar qué implica esto, qué consecuencias tiene".
"Todos entienden cuando se les explica. Algunos dijeron que van a buscar un arquitecto para presentar el pedido de evaluación del inmueble que está en amarillo (bajo cautela), y otros no. No es objetivo de la norma impedir las ampliaciones de los inmuebles ni nada parecido, pero hay que hacer las intervenciones con respeto y criterio", sostuvo Müller cuando se le consultó si algunos particulares plantearon quejas.
1.322 inmuebles fueron catalogados como Patrimonio Urbano. Crédito: Fernando Nicola (drone)
Catálogo con 1.322 inmuebles
En el Catálogo de Bienes del Patrimonio Urbano Arquitectónico de la ciudad de Santa Fe figuran 1.322 inmuebles. Hay cuatro categorías, identificadas con colores, según el tipo de protección:
Integral: se protege la totalidad del bien identificada como original o valorada porque se los reconoce como hitos o piezas excepcionales dentro del ejido urbano (color rojo). Son 107 inmuebles en esta clasificación.
Parcial: en gran medida estos bienes contienen intervenciones posteriores las cuales carecen de valor, por ello se protege sólo la parte del bien original (color naranja). Hay 375 inmuebles en esta clasificación.
Cautelar (color amarillo). Hay 812 propiedades abarcadas, muchas son PH. A pedido del interesado, se podrá revisar su valor patrimonial y la Secretaría de Desarrollo Urbano, con asesoramiento de la Comisión de Patrimonio, hará una evaluación integral del inmueble y analizará su protección parcial o bien su descatalogación, es decir, se desestima que tenga un valor patrimonial.
Müller agregó que "antes de esta norma, un propietario no sabía muy bien qué podía o qué no hacer en su vivienda protegida. Ahora, con este nuevo Código y catálogo, ya sabe que si son las categorías más altas, en su mayoría edificios públicos, son los intocables: monumentos o los clasificados con protección integral. Después, en las categorías parcial y cautelar, donde hay más casas de particulares, siempre hay posibilidades de intervención".
El secretario de Desarrollo Urbano municipal, Javier Mendiondo, señaló que "este catálogo nuevo es abierto, flexible y público; permite modificaciones, incorporaciones y exclusiones. Desde que empezó a regir el nuevo Código de Patrimonio hay reglas concretas y claras que identifican los cuatro grados de preservación, permiten establecer una previsibilidad y trazabilidad para que los propietarios sepan qué pueden y qué no pueden hacer con sus inmuebles".
Uno de los principales problemas que tenía la anterior ordenanza de Patrimonio, es que generaba una protección preventiva y genérica sobre las propiedades de más de 80 años de antigüedad. "Cuando fue redactada en el año 1996 incluía las obras de 1916 para atrás, con lo cual no existía realmente un problema; pero en el 2021, se incorpora a esa preservación a las construcciones del año 1941 para atrás. Con lo cual todos los inmuebles que tuvieran más de 80 años -unos 40.000 padrones de la ciudad de Santa Fe-, muchos de los cuales son viviendas particulares sin ningún valor patrimonial, tenían que ser revisados por la Comisión de Patrimonio", explicó.
El funcionario agregó que "la ordenanza anterior era de aplicación confusa y generaba demoras". Y agregó que "ahora se sabe que hay que evaluar solamente las catalogadas como cautelares o amarillas".
"El nuevo Código fue producto de un trabajo colectivo de mucho tiempo entre la municipalidad con la Comisión de Patrimonio de la cual participan universidades locales, colegios profesionales y otras organizaciones de la ciudad".