El problema de las calles rotas está a la vista en la ciudad de Santa Fe. Es uno de los inconvenientes con los que se topó desde el inicio la gestión que encabeza Juan Pablo Poletti.
En una entrevista con El Litoral, el secretario de Gestión Urbana Ambiental contó los detalles de los trabajos de reparación.
El problema de las calles rotas está a la vista en la ciudad de Santa Fe. Es uno de los inconvenientes con los que se topó desde el inicio la gestión que encabeza Juan Pablo Poletti.
En este contexto, El Litoral lanzó semanas atrás el Bachómetro, una plataforma para que la ciudadanía denuncia con foto y geoubicación dónde y cómo son las grietas en el pavimento.
En un escenario macroeconómico difícil, desde principios de este año el municipio puso manos a la obra para redoblar esfuerzos y poder reparar los baches más peligrosos. Así lo contó el secretario de Gestión Urbana Ambiental, Guillermo Ferrero, en diálogo con El Litoral.
En la entrevista, el funcionario del gobierno local reveló cómo fue el panorama con el que se encontraron y qué tareas llevaron adelante para poder comenzar con las reparaciones urbanas.
“La Dirección de Mantenimiento Vial de la ciudad cuenta con una planta que genera el asfalto por cuenta propia y nosotros aportamos los materiales. 4.30 se prende para llegar a la temperatura y empezar a bachear por la mañana, con dos cuadrillas en distintos puntos de la ciudad. Esto se hace todos los días, excepto los lunes que se realiza el mantenimiento de la maquinaria”, explicó Ferrero.
En ese sentido, el secretario municipal reconoció que tuvieron dificultades a principio de año para conseguir hormigón. “Tuvimos dos licitaciones desiertas, lo que pone en evidencia que los problemas macroeconómicos no solamente afecta a los vecinos sino también a las empresas proveedoras que no se presentaron”, contó y sumó: “la apertura de sobres fue en marzo y abril y no tener este material fue un problema. Pusimos a esas cuadrillas a hacer otro tipo de trabajo, como sellado de juntas para evitar que se sigan generando baches”.
Ese panorama cambió en las últimas semanas. “Hace unos 15 días se presentaron empresas, se está adjudicando y a principio de agosto vamos a poder empezar a bachear por administración (N del R: cuando el municipio realiza este tipo de trabajo significa que lo hace con mano de obra y maquinaria propios; lo que significa optimización de recursos)”.
En simultáneo, el funcionario del gobierno local aclaró que se abrieron licitaciones para trabajos en grandes avenidas y sobre todo, baches peligrosos. “Son dos licitaciones de obra para avenidas casi todas del norte y varios puntos del centro, con foco en la parada de colectivos”, adelantó Ferrero.
“Son obras que se ejecutarán en tres meses y que ya arrancaron. Esto va de la mano a lo explicado anteriormente que realizamos desde la Dirección de Mantenimiento Vial”, aclaró el secretario.
En ese sentido, Ferrero confirmó que se licitó la reparación de la calle de la terminal de ómnibus que se encuentra muy deteriorada, tal y como lo mostró El Litoral en varios artículos publicados en los últimos meses. “Son como dos mil metros cuadrados y para nosotros es importante. Se había inaugurado la puesta en valor y precisamente por donde salen los colectivos quedó en muy mal estado”, aseguró.
“Otra de las líneas de trabajo que encaramos es asfalto en frío, que nos permite tener una respuesta inmediata en pequeños baches. Tenemos una cuadrilla exclusiva que se maneja con el 0800 del municipio. Nos da tiempo a hacer un buen trabajo. Esto nos está dando buenos resultados, probablemente multipliquemos esa cuadrilla”, agregó.
En otro tramo de la entrevista realizada en el municipio, el funcionario usó una parábola económica para graficar el presente de las calles rotas en la capital santafesina. “Lo que sucede con los baches es una cuestión de flujos y stock”, señaló.
—¿Qué significa esto?
— Significa que los pozos se hacen diariamente y cada vez que uno no los atiende, la gravedad es peor. Si uno no tiene el ritmo de tapar el flujo y, a su vez, ir ganando al stock de baches, siempre habrá pozos en la ciudad.
Entendemos que este año vamos a poder atacar al stock por la cantidad de bacheo que estamos haciendo y poder decir “en tanto tiempo vamos a poder solucionar el problema”.
Hoy tenemos la foto del stock, que es una imagen estática que lo único que te da es una idea para planificar, sobre todo los más peligrosos.
Tras hablar de pavimento y hormigón, Ferrero aprovechó la entrevista con este medio para reconocer otro problema, que calificó de “grave”: las calles de tierra.
“Lo que estaba sucediendo en el oeste y norte de la ciudad, ni hablar en Colastiné Norte, hubo un abandono muy grande. Sobre todo porque se necesitan motoniveladoras. Y lo dijimos al inicio de la gestión, el parque muy complicado que hoy lo ‘levantamos’ y tenemos cinco motoniveladoras funcionando”, sostuvo.
Y al respecto, agregó: “Son cinco cuadrillas en toda la ciudad que ya hicieron un primer gran ‘repaso’ de las calles de tierra. Por estos días comenzará una segunda etapa, iniciando en Colastiné que tiene suelos de arena”.
El secretario también habló sobre el vínculo y trabajo en conjunto entre la Municipalidad y Aguas Santafesinas SA. “Hemos intimado a ASSA y estamos haciendo (calle) Calchines. Tuvimos conversaciones, si se quiere un poco ‘fuertes’ con la dirección de la empresa y luego se arrancó un plan de bacheo coordinadamente”, manifestó Ferrero.
—¿Cómo es ese trabajo coordinado?, insistió este diario.
— Hemos tenido varias conversaciones, las primeras mejores y las últimas un poquito más álgidas pero nos damos cuenta que hay respuestas; lo que es positivo. El ejemplo de Calchines es emblemático porque hace mucho tiempo que esa calle está sin transitar y los vecinos lo sufren. El trabajo coordinado de por sí es positivo y están tomando varios temas al igual que nosotros.
Ripio
Casi sobre el final de la entrevista, el funcionario reconoció que “hay calles de tierra y ripio que no hace años no tienen mantenimiento”. Y de inmediato adelantó que “en agosto haremos un nuevo mantenimiento y probablemente un plan ambicioso de expansión de ripio en calles de tierra. Lo bueno es que obviamente si llueve se puede transitar bien y lo malo requiere más atención. Creemos que ahora al tener tantas motoniveladoras podremos dar respuesta. Es algo que le mejorará la vida a los vecinos”.