Los datos difundidos por el último Boletín Epidemiológico Nacional Nº 719 (SE 34) de septiembre de 2024, muestra el pico histórico al que la Argentina se enfrenta ante el sífilis, una de las tantas Infecciones de Transmisión Sexual (ITS) que existen. El escenario es cuanto menos preocupante: en el país, en los últimos seis años (período 2018-2023) los casos aumentaron un 42%.
Pero los números reportados que corresponden a la bota santafesina, en ese período histórico, son impactantes: en 2023, Santa Fe quedó como la tercera provincia del país con más casos notificados de esta ITS (4.392), después de Buenos Aires (6.988 infecciones) y Córdoba (6.847 infecciones). Muy por debajo vienen otras jurisdicciones como Entre Ríos, con apenas 300 casos, y CABA, con 552.
No sólo eso: si se toma el número absoluto de casos en 2018 (282) y se lo compara con las infecciones notificadas por las autoridades sanitarias de 2023 (4.392), el incremento porcentual de casos de sífilis en todo el territorio santafesino fue, en sólo seis años, de 1457,4%. En Córdoba, el aumento fue del 363,8%, siempre de 2018 a 2023.
Como contrapartida, en la provincia de Buenos Aires hubo un descenso de infecciones de transmisión sexual: de 12.167 casos en 2018, se descendió a 6.988 el año pasado: es un 42% menos. En CABA, lo mismo y aún mejor: el descenso de infecciones fue del 77%.
Qué es y prevención
¿Qué es la sífilis? Como define la OMS/OPS, se trata de una infección bacteriana causada por Treponema pallidum. Es una infección de transmisión sexual (ITS) que se transmite entre personas por el contacto con úlceras infecciosas presentes en los genitales, el ano, el recto, los labios o la boca. También se puede transmitir de la madre al bebé durante el embarazo (sífilis congénita).
Los síntomas varían en las diferentes etapas. Generalmente empiezan 21 días después de la infección, pero pueden aparecer en un plazo de entre 9 y 90 días. La sífilis primaria se manifiesta generalmente por una única úlcera (chancro) en el lugar de la inoculación. Si no se la trata, la enfermedad progresa a la etapa secundaria que puede causar erupciones cutáneas, fiebre y ganglios linfáticos hinchados.
En la etapa latente, que puede durar años, las bacterias continúan estando presentes en el organismo, pero no hay ningún signo ni síntoma. La mayoría de los pacientes continúan en la etapa latente si no reciben tratamiento, pero alrededor de un 25% presentan una sífilis terciaria.
En laboratorio. Un caso positivo de sífilis, cuya bacteria infecciosa esTreponema pallidum. Crédito: Archivo El Litoral
En esta fase, la neurosífilis puede aparecer en cualquier etapa de la infección sifilítica. Las manifestaciones neurológicas consisten en alteraciones agudas del estado mental, meningitis, ACV, disfunción de pares craneales, y anomalías auditivas u oftálmicas y oculares.
Cómo se previene en la pregunta clave. Simple: con el uso correcto y uniforme de preservativos se reduce significativamente el riesgo de infección. Si las úlceras se encuentran en una zona no cubierta por el preservativo puede producirse la transmisión.
Pandemia
En la provincia de Santa Fe, siempre según el Boletín Epidemiológico, la tasa de infecciones de sífilis cada 100 mil habitantes se incrementó de 8 en 2018 hasta 121 en 2023: un 1.412,5% de incremento.
Otro dato significativo es la comparación de lo que pasaba en la pre pandemia, año 2019, con lo que ocurrió con la llegada del Covid-19 y la declaración en el país del Aislamiento Social, Preventivo y Obligatorio (Aspo).
El Boletín apunta que durante los años 2020-2021 (plena pandemia por coronavirus), “se registró un descenso significativo de las notificaciones. Sin embargo, a partir del 2022 (...), se retomó la tendencia ascendente de casos y tasas, llegando a una tasa de notificación que supera los 69 casos cada 100.000 habitantes (a nivel país)”, indica el exhaustivo informe.
En el caso santafesino, esto es cierto: en 2020, con toda la población “encerrada”, se notificaron sólo 141 casos de sífilis, y una tasa cada 100 mil habitantes de 5; en 2021, apenas 74 infecciones en territorio santafesino, con una tasa de sólo 2.
Ahora bien, en 2022, con la liberalización de las actividades y la “euforia social” por salir y volver a relacionarse, hubo una “explosión” de infecciones de sífilis: se notificaron 3.603 ese año, con una tasa cada 100 mil habitantes que trepó a 100. De 2021 a 2022, el porcentaje de infecciones se incrementó un 4.768,9%. Y de 2022 a 2023, la suba de casos de sífilis notificados creció casi 22%.
Prácticas sexuales y cambios
Todos estos datos llevan a inferir que semejante incremento en apenas dos años (y, si se sigue la línea histórica, en seis) que proliferan las relaciones sexuales ocasionales sin el uso de la barrera de protección (preservativo), y que se han “liberado” las prácticas y las formas de la sexualidad moderno. El problema puede aparecer cuando no se usa de forma adecuada un profiláctico.
Si se toma además a la franja etaria más afectada, también se puede deducir que hay poca conciencia sobre los riesgos de contraer una ITS. Y, por último, queda al desnudo la imperiosa necesidad de avanzar en la Educación Sexual Integral (ESI) en las escuelas de los niveles primario y secundario.
A nivel nacional
Todos estos datos van a caballo de lo que pasa a nivel país con esta ITS. Durante el periodo 2018-2023, en Argentina se notificaron al sistema nacional de vigilancia un total de 129.620 casos de sífilis en la población general.
“Los casos y tasas muestran una tendencia en aumento entre 2018 y 2019 y un descenso (…) en 2020 y 2021. Pero luego, “a nivel país y en todas las regiones se verifica un aumento de tasas entre el año inicial y final del período analizado”, advierte el informe.
Se manifiestan cambios en las prácticas sexuales modernas. La prevención y el cuidado, las claves. Crédito: Archivo El Litoral
El informe es lapidario: “Las notificaciones de sífilis a nivel país y por regiones presenta una tendencia al ascenso en los últimos años. Las poblaciones más afectadas son las personas entre 15 y 34 años y las tasas más elevadas se presentan en población de 20 a 29 años”.
Por último, el Boletín Epidemiológico hace un llamado de atención: “La sífilis continúa siendo un importante y creciente problema de salud pública. La mejora en la calidad y cobertura de la información constituye una herramienta estratégica para guiar y potenciar acciones para la prevención y control de la sífilis por parte de los diferentes actores involucrados”, concluye.