Vecinos del barrio Guadalupe se autoconvocaron este lunes por la mañana en la esquina de calle Azcuénaga y Piedras para reclamar por la intervención de la Justicia ante reiterados ataques de perros en la zona.
Vecinos del barrio Guadalupe se autoconvocaron este lunes por la mañana en la esquina de calle Azcuénaga y Piedras para reclamar por la intervención de la Justicia ante reiterados ataques de perros en la zona.
El último ataque ocurrió el viernes por la tarde cuando Rubén Gómez (de 72 años) caminaba por calle Azcuénaga al 700, frente a la canchas de Macabi, y de repente fue agredido por una perra Pitbull, que le saltó al cuello. Gómez cayó al suelo y la perra se le aferró al brazo y mordió hasta que llegó Alejandro Cerra, yerno de Rubén, y de un puntapié logró separar a la Pitbull.
También la mujer de Alejandro, Carolina (42 años) fue mordida por la perra. La mujer resultó con heridas a la altura de las costillas, pero las heridas no fueron profundas gracias a un abrigo de gran volumen que llevaba puesto.
"Tratamos de darle visibilidad a esto porque fue una tragedia con suerte. Hace más de un año que viene atacando esta perra", lamentó Alejandro en diálogo con El Litoral, y agregó que "el mes pasado una chica de 21 años fue mordida por la misma perra y la salvaron los vecinos".
En este sentido, el vecino indicó que el problema central es el dueño. "El perro es un arma asesina, pero el que la empuña es el dueño", sostuvo Cerra y comentó que sus perros andan sueltos, "hasta se los ve famélicos", cuestionó.
Cerra indicó que hace tiempo vienen con denuncias en la seccional 8va y en el Ministerio Público de la Acusación (MPA). "No pasó nada", aseveró el vecino. En el barrio hay preocupación porque temen que la Justicia devuelva a estos perros a su dueño Francisco Gaziano (65).
Según relató Alejandro el perro Boxer fue restituido a la familia el sábado. "Se lo dieron a una de las hijas y se lo llevó a Rincón. La otra perra sigue al resguardo en Guardia Canina y todavía está latente que este hombre (por Gaziano) lo quiera traer de vuelta al barrio", advirtió el vecino.
El dueño de los perros fue trasladado a la seccional 8va, donde se le notificó de la apertura de una causa en su contra por Lesiones Culposas. La fiscal interviniente dispuso que el proceso se tramite en estado de libertad. Por tal motivo, tras cumplimentar los trámites de rigor en la dependencia policial, al mediodía del sábado los nombrados regresaron a su domicilio. Mientras que la Brigada Ecológica procedió al retiro de los canes, que fueron examinados por el veterinario policial.