Investigadores locales lograron determinar que en al menos los últimos cinco años, muchos santafesinos abandonaron el uso del colectivo urbano y, en su reemplazo, optan hoy por circular en vehículos particulares, como el auto, la moto o la bicicleta.
Los datos obtenidos hasta el momento forman parte de un Proyecto de Investigación y Desarrollo realizado por el Grupo Científico de Estudios de Transporte, Accidentología y Movilidad (CETRAM) de la UTN Facultad Regional Santa Fe. El mismo arrancó en enero de 2021 y se denomina Diseño de estrategias para la Promoción de la Movilidad Sostenible en Aglomerados Urbanos, Caso de Estudio Gran Santa Fe.
Tras completar la segunda etapa de la investigación que comenzó en 2021 establecieron que "hay un cambio en el uso de los modos de transporte tendiendo hacia la unitarización de la movilidad, migrando pasajeros del transporte público por colectivos (TPP) hacia medios de transporte individuales (autos, motos y bicicletas)".
"Los patrones de movilidad son los mismos (de 2017 y 2021), con volúmenes más bajos en el transporte público. Parte de los pasajeros que iban en TPP se fueron en 2021 a medios más individuales, como autos motos y bicicletas. Eso atentaría contra la movilidad sustentable, salvo el aumento del uso de las bicicletas".
"Estamos comparando los resultados de 2017 con los de octubre de 2021 saliendo de la pandemia y encontramos que hay 40% menos de pasajeros en el trasporte público en octubre 2021. En el acceso Este a la ciudad, por Ruta 168, se relevó un descenso del 13% en la cantidad de vehículos que ingresan a Santa Fe, mientras que, en el flujo interno urbano, estudiadas 6 esquinas testigo, se percibe un incremento de la circulación en todos sus modos (automóvil – moto – bicicleta)", remarcó el ingeniero mecánico Fernando Imaz, director del proyecto.
El estudio de la circulación dentro de la ciudad muestra un incremento en 2021 del uso del vehículo particular. El transporte en auto aumentó un 9%, las motos 14% y las bicicletas un 32%.
"Analizada la distribución horaria de los viajes, tanto en los accesos a la ciudad como en el transporte público de pasajeros, las mismas se mantienen con perfiles idénticos, aunque con las disminuciones en los volúmenes. La distribución horaria es característica de una ciudad con horarios de comercio partidos (mañana y tarde) y escuelas sin ciclo extendido, dónde los picos se manifiestan a primera hora de la mañana, al mediodía y al finalizar la tarde", concluye el informe.
Para realizar el trabajo los investigadores de la UTN Santa Fe analizaron datos correspondientes a los años 2017 y 2021 tomados del Órgano de Control del Transporte Público de Pasajeros de la Ciudad de Santa Fe (pasajeros transportados, horarios, orígenes y destinos); de volúmenes de tránsito, clasificación de vehículos y otros, del Acceso Este a la Ciudad de Santa Fe (Ruta Nacional 168) e información de seis intersecciones de la ciudad donde se estudia durante las horas pico la circulación y clasificación de vehículos (livianos, pesados, motos, bicicletas). Las seis esquinas seleccionadas, tanto en 2017 como en 2021, fueron: Mendoza y San Jerónimo; Av. Freyre y Salvador Caputto; Av. Gral. Paz y Alberti; bulevar Pellegrini y San Martín; Av. Aristóbulo del Valle y French y Av. J.J. Paso y Urquiza.
Según Imaz, "la pregunta que motoriza el estudio es desentrañar cómo nos movilizamos los santafesinos. Cómo caracterizar a la ciudad según sus patrones de movilidad. Determinar los patrones de movilidad de Santa Fe sirve como herramienta para plantear las propuestas de movilidad sostenible. Si no conocemos "cómo se mueve la ciudad" y sólo se aplican "políticas de forma", los resultados a obtener van a ser escasos".
El estudio fue planteado en 3 etapas: el Análisis de la Normativa Internacional, Sudamérica, Argentina y Santa Fe; el Análisis Comparativo de los Patrones de Movilidad en la Ciudad 2017-2021 y la elaboración de Propuestas para una Movilidad Sustentable. Hoy se encuentra en su tercera etapa y tienen como fecha de finalización diciembre de 2023.
"Estamos diseñando una encuesta para determinar las "preferencias manifiestas" de los ciudadanos intentando identificar cuáles podrían ser las opciones para hacer la movilidad más sostenible en la ciudad", explicó Imaz.
-¿El Municipio podrá utilizarlo para implementar políticas de movilidad sostenible?
-Es un proyecto de investigación, pero a través de publicaciones y con la comunicación que tenemos con la Municipalidad, debería haber una natural transferencia. Lo que ocurre es que muchas veces los tiempos de la política son distintos a los académicos.
-Por último, ¿cree usted que la pandemia sirvió para replantearnos la movilidad en la ciudad? O la sociedad santafesina dejó pasar una oportunidad?
-Esa pregunta nos la hicimos todos durante el período de aislamiento. Atendiendo a la coyuntura, creo que se dejó pasar ese tiempo para planificar algo superador. Estuvimos dos años tratando de ver cómo rescatar un sistema de transporte público que tenía sus falencias y al que la pandemia le pegó durísimo. En definitiva, creo que se dejó pasar una oportunidad de replantear todo el sistema de movilidad en beneficio de los usuarios, los ciudadanos, los empresarios y demás actores involucrados. Pero siempre es más fácil decirlo con el diario del lunes.
El concepto de Movilidad Sostenible surge como preocupación en 1990 en Europa a causa de la contaminación ambiental que genera el transporte. Y según los especialistas de la UTN se puede abordar desde dos líneas de acción. Trabajar sobre los vehículos, para que contaminen menos y que la gente utilice medios menos contaminantes. Y, por otro lado, impulsar cambios culturales y urbanísticos. Por ejemplo, que los ciudadanos no tengan la necesidad de movilizarse tanto con vehículos particulares o contaminantes para realizar sus tareas en la ciudad.
El estudio de la circulación dentro de la ciudad muestra un incremento en 2021 del uso del vehículo particular. El transporte en auto aumentó un 9%, las motos 14% y las bicicletas un 32%.