Viernes 24.11.2023
/Última actualización 23:20
El Museo de la Constitución se convirtió en el marco de un conversatorio organizado por El Litoral para pensar, dentro de sus 450 años de vida de Santa Fe, los caminos posibles de cara a los 500. Pero pensar el próximo medio siglo también implica volver la mirada hacia las centurias previas. Algo que hace el artista Gustavo Pueyo en la muestra artística que se inauguró, a la par de la mencionada actividad, en el foyer del espacio que rinde tributo a la Carta Magna.
Foto: Flavio RainaLa misma, que lleva como título “1573-2023, 450 colores de Santa Fe”, está compuesta por una serie de obras que aluden a edificios representativos de la ciudad, en términos históricos o arquitectónicos, desplegados en 11 acrílicos que se complementan con 11 acuarelas. Dado que cada acrílico representa una parte del edificio seleccionado, está acompañado por una acuarela que se refiere al entorno, para que el espectador se pueda ubicar en el espacio.
Los acrílicos son todos de la misma medida, 70 cm. por 1 metro y las acuarelas son de 30 cm. por 20 cm. Y los edificios y espacios elegidos son las iglesias de Santo Domingo, San Francisco y Nuestra Señora de los Milagros, la Catedral Metropolitana, Casa de Gobierno, el Teatro Municipal, el paraninfo de la Universidad Nacional del Litoral, el Puente Colgante, la Estación Belgrano y la Casa de la Cultura (reunidos en el mismo acrílico dada su cercanía geográfica), el Puente Palito y los Elevadores del Puerto.
Foto: Flavio RainaEl artista, en diálogo con El Litoral, mencionó que cuando empezó a pensar líneas de acción de cara a los 450 años, se decidió finalmente por una serie de imágenes icónicas de Santa Fe, de su patrimonio arquitectónico. “Empecé con los acrílicos, con detalles de los edificios que son más representativos. Como solo eran detalles, después le sumé a cada uno una acuarela para que la gente tuviera un pantallazo del entorno en el cual están ubicados”, puntualizó.
La elección de los detalles estuvo teñida por la subjetividad, pero con un fundamento. “Elegí aquello que más me llamaba me gustaba de cada edificio. Siempre dirigí la mirada hacia esos puntos. La cúpula de Santo Domingo, por ejemplo, es maravillosa. Lo mismo que la antena del Puente Colgante. Siempre busqué representar aquello que más me llamaba la atención”, señaló el artista. Pero subrayó un aspecto: su intención de que la gente, a partir del estímulo de la muestra, pueda empezar, de a poco, a mirar hacia arriba, a lo alto de esos puntos elegidos.
Foto: Flavio RainaEl color es el protagonista
Un aspecto llamativo de las obras es el juego cromático de los acrílicos. El propio Pueyo eligió un adjetivo para definirlo: “fuerte”. Es que el contraste entre los detalles de los edificios y lugares elegidos y los cielos pintados, es muy particular y condiciona la mirada. “Va un poco en contra de lo que vengo haciendo con las acuarelas, que son más lavadas. Mi objetivo fue llamar la atención con los colores, que la gente dirija la mirada y busque identificar de qué se trata. Que el color sea el protagonista”, destacó Pueyo.
Foto: Flavio RainaConvite
“Espero que el público sepa apreciar la muestra y reconozca los lugares. Este es mi granito de arena para que la gente observe todo lo que tenemos”, afirmó Pueyo temprano, antes que empiecen a circular los invitados. Durante el tiempo en que se desarrolló el conversatorio, Pueyo permaneció junto a su obra, con visible orgullo y atendió las consultas de los presentes, que valoraron especialmente los detalles. Y, como señaló uno de los presentes, el convite a mirar, de ahora en más, la ciudad de otra manera. Valorando de una manera diferente aquello que une a los santafesinos y que alimenta su identidad, que es el patrimonio histórico. Esta vez, abordado desde el arte.