Lucía Dozo
Leónidas Gambartes vivió y desarrolló su intensa carrera artística en Rosario. En la década del 30 fue miembro fundador del grupo Refugio y también formó parte de la Mutualidad Popular de Estudiantes y Artistas Plásticos, junto con Antonio Berni. En los 50 cofundó el Grupo Litoral junto con Juan Grela y Oscar Herrero Miranda. Muchas de sus obras se exhiben en Rosario en el museo Castagnino.
Lucía Dozo
Hasta fines de los años 30, el reconocido artista rosarino Leónidas Gambartes (1909-1963) pintó acuarelas naturalistas, tomando el entorno de Rosario como referente. En 1927 había comenzado a trabajar en el Ministerio de Obras Públicas, actividad que realizó durante toda su vida. El trabajo como dibujante cartógrafo constituyó un oficio que afianzó sus recursos expresivos. Tuvo además un temprano interés por la fotografía, a través de la que abordó temáticas como los barrios suburbanos de la ciudad y también los paisajes del Litoral y sus habitantes, motivos que retomaría en su obra pictórica posterior.
En 1932, Gambartes participó como miembro fundador del grupo Refugio, para el cual diseñó su emblema. Dos años más tarde, formó parte de la fundación de la Mutualidad Popular de Estudiantes y Artistas Plásticos, junto con Antonio Berni, Domingo Garrone y Arturo Roger Pla, entre otros plásticos rosarinos. En esos años, descubrió a grandes artistas como Paul Cézanne, Vincent Van Gogh, Paul Gauguin y Pablo Picasso.
Dos décadas más adelante, ya en los 50, cofundó el Grupo Litoral (punto de partida del movimiento moderno en Rosario) junto con Juan Grela, Carlos Uriarte, Oscar Herrero Miranda, Francisco García Carrera y Hugo Ottmann, entre otros. La agrupación -que alcanzó reconocimiento nacional- planteó un compromiso con el hombre actual y sus nuevas realidades, a partir de las experiencias del lugar. Según se señala desde el museo Castagnino, que expone varias de sus obras, los integrantes del Grupo Litoral “se opusieron a las fórmulas académicas coartadoras de la libertad creadora, abogando por el uso de nuevos lenguajes. Si bien cada uno adoptó un estilo propio, el compromiso con los orígenes se plasmó en las imágenes de los paisajes del Litoral y la vida de sus habitantes”.
A lo largo de su carrera, el artista expuso individual y grupalmente en Rosario, Santa Fe y Buenos Aires. Con el paso del tiempo, su producción también se mostró en distintas ciudades de Europa y Estados Unidos. Participó en las bienales de Venecia y de San Pablo. Entre sus distinciones figuran: Medalla de Plata, Bienal de Venecia 1956; Primer Premio, Salón del Litoral 1957 y Medalla de Plata, Exposición Internacional de Bruselas 1958. Sus obras forman parte de importantes colecciones tanto oficiales como privadas. La Municipalidad de Rosario declaró al año 2003 "Año Gambartes". Es reconocido como uno de los pintores y grabadores más importantes de la Argentina.
Trayectoria
Entre 1937 y 1941 creó témperas que llamó Cartones humorísticos. Esta serie de cartones humorísticos de corte surrealista-expresionista incorporaba a veces el collage de diarios de la época de sarcásticas connotaciones socio-políticas. En 1941 realizó su primera exposición en Buenos Aires: Cartones de Humorismo, en Galería Müller. En 1942 realizó su primera muestra individual en AAR - Asociación de Artistas de Rosario.
Durante el período 1942-1945 realizó Dibujos oníricos. Más tarde exploró distintas técnicas y temáticas, se alejó del plano descriptivo para organizar las figuras en el plano ortogonal y geométrico. De ese período son las barriadas y los personajes mágicos.
En la década del 50, en la etapa de su pertenencia al Grupo Litoral, Gambartes revivió mitos y leyendas de los pueblos originarios de la zona litoraleña. Tanto los temas como la implementación de una nueva y personal técnica (el cromo al yeso) definieron su estética y perfilaron el sentido americanista de su producción. Desde el Castagnino se señala que “para realizar sus obras, el autor preparó cartones con cola y yeso, cuyas superficies lijó una vez secas. De ese modo, obtuvo una plano mate y absorbente, donde las pinceladas superpuestas de óleos o acuarelas permitieron sutiles veladuras. En ocasiones, sobre la pintura fresca superpuso papeles para lograr texturas. Además, el rayado y el punteado de la superficie posibilitaron que el fondo emerja sobre el color ya colocado. Esa técnica se convirtió en el lenguaje definitivo de Gambartes que, gracias a su calidad mineral, expresó el color de la tierra con cierta evocación arcaica. La predominancia de pigmentos ocres y azules otorgó un matiz característico a su producción”.
Maternidad en gris
En el Castagnino (Av. Pellegrini 2202) se exponen varias de su obras, entre ellas Lunes, 1934; El callejón, circa 1943; Suburbio, circa 1944; Retorno, 1942; El regalo, 1943 y El cuadro, 1942. La obra Personajes (1960) corresponde a la etapa del Grupo Litoral: “Con una paleta de tintes quebrados y terrosos, el artista supo captar el contexto en el que se hallan inscriptas las figuras de la representación, aludiendo a determinadas poblaciones lugareñas”.
Maternidad en gris (1954) también responde a los lineamientos propuestos por el Grupo Litoral. Se trata de una obra de factura despojada en donde se aprecia el interés del artista por un determinado tipo social. Constituye además un ejemplo contundente del ámbito que el autor decidió explorar en los años de su creación: el mundo femenino pero cotidiano, en el cual habitan desde lavanderas a “conjurantes”. En este caso, Gambartes apeló a la mujer en su rol de madre, según se señala desde el espacio.
En relación con su propia obra, el artista expresó: “Yo creo que pinto el sentimiento de lo mágico… La vida cotidiana de cierto tipo de gente de nuestro país, la que de alguna manera ya es América."
Publicaciones sobre su obra
Ediciones Castagnino+macro publicó en 2013 el libro Gambartes, que incluye estudios críticos, semblanzas y reproducciones de sus obras. Entre los textos que realizan un acercamiento a su vida y su producción artística se encuentran: Gambartes nace, de María de los Ángeles González; Conjuros, de Fernando Farina;
Intuiciones de lo (in)visible, de Diana Wechsler; Introducción a la obra de Leónidas Gambartes, de Elsa Flores Ballesteros; Misterio y luz de Gambartes, de Manuel Mujica Láinez; Gambartes o una visión de América, de Jorge Taverna Irigoyen; Entrevistas, de Rubén Sevlever; Memoria, de Emilio Ellena; Caminos hacia Gambartes, de Guillermo Fantoni; Voces múltiples para una cronología, de Andrea Giuntay, y Lo indígena y la tierra en la pintura de Gambartes, de Roger Pla. Se accede al material completo en https://www.castagninomacro.org/archivos/editorial/23._gambartes.pdf y a más información sobre el artista en https://gambartes.com/. El coleccionista de arte y editor Emilio Ellena afirma en su Memoria (Santiago de Chile, 1998): “Gambartes nació y vivió en Rosario. Fue un ser desproporcionado a su lugar geográfico, a su tiempo, a quienes lo rodeamos”.