Miércoles 3.7.2024
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Vali Guidalevich, especialista en arte y educación, acaba de lanzar “Movimiento sorpresa”, un libro dedicado a la figura del pintor y escultor argentino Julio Le Parc. Es una obra para niños, que forma parte de una colección de Pequeño Editor sobre artistas plásticos argentinos. No es la primera vez que Guidalevich se embarca en un proyecto así: ya publicó varios libros infantiles sobre artistas como Emilio Pettoruti, Raúl Soldi, Antonio Berni, Marta Minujín y Xul Solar.
Pequeño Editor¿Cómo se hace para encarar la divulgación del arte con la mirada puesta en un público tan particular como el infantil? Sobre eso y sobre otras cuestiones la autora -que se formó en diseño, escultura y escenografía, realizó la carrera docente también y un doctorado en arte y educación- dialogó largamente con este medio.
Yo ahora estoy hace muchos años coordinando el área de Educación del montés de Artes Visuales. Un desafío, entonces, consistía en acercar el arte a los chicos. “Era como uno de los ejes centrales en los guiones para que los integrantes del equipo de Educación pudieran hacer las visitas participativas infantiles. A raíz de esto, surgió la idea de comenzar a escribir libros dedicados a las infancias donde tuvieron la posibilidad de acercarse al arte argentino”, recordó Vali.
Pequeño EditorEl volumen dedicado a Le Parc es el séptimo libro que la autora desarrolló sobre artistas argentinos y el primer libro dentro de la editorial Pequeño Editor. “La premisa es, por un lado, proponer la mirada de las imágenes a partir de preguntas abiertas donde podamos entablar una conversación que les posibilite pensar cuestiones vinculadas a su experiencia, a las relaciones con su vida cotidiana. Para que estas preguntas les abran nuevas posibilidades”, expresó la autora.
La autora. Foto: Pequeño EditorOtro aspecto es propiciar el desarrollo de la observación a través de la lectura, la posibilidad de construir poco a poco miradas críticas y estéticas. “Esperamos que los niños puedan disfrutar de acercarse al arte, en este caso al arte argentino y puedan a partir de ahí tener ganas de visitar exposiciones de arte”, refirió Guidalevich.
La participación y el juego
En relación al caso puntual de Le Parc, Vali admitió que su obra tiene diversas características que lo hacen potencialmente interesante para establecer un vínculo con el público infantil. Desde el momento en que él mismo se menciona a sí mismo como “un experimentador visual” y concibe sus obras para todos, no para un público especializado o con acceso a un museo. “Hizo proyectos inmensos donde sacaba sus producciones a las plazas, llevaba sus proyectos a la calle para que pudieran participar muchísimas personas”, remarcó Vali en este sentido.
Pequeño EditorOtra arista que lo vuelve interesante es el modo en que piensa y propone la participación en sus obras, que son participativas, en implican muchas veces mover palancas o girar cosas, dando una gran importancia al juego, que atraviesa su producción artística. “En el libro, lo que trabajé fue esta articulación entre el arte y el juego que propone Le Parc”, señaló la autora en la parte central de la entrevista. En el libro, además de la biografía y la obra, hay anécdotas del artista relatadas en primera persona y diferentes actividades.
Arte de la ArgentinaLa autora valoró, en otro tramo de la entrevista, la posibilidad de interactuar con los pequeños lectores del libro. Fue a una a una escuela pública de la Ciudad de Buenos Aires, donde participó de un encuentro con dos grupos que ya habían trabajado con el libro. “Les gustó muchísimo ‘La larga marcha’, que está desplegada en el libro y les propuse diferentes actividades vinculadas a esa obra”, indicó.
Arte de la ArgentinaDesde su mirada de especialista, a Gidalevich le resulta fundamental que chicas y chicos tengan la posibilidad de zambullirse en el arte desde la más temprana infancia. Por muchas razones -argumentó- que van desde desde la posibilidad de aprender a observar y desarrollar una mirada crítica, hasta incentivar el despliegue de la imaginación. “Lo interesante es que puedan vincular las obras a cuestiones relacionadas con su vida cotidiana y su presente, para poder hacerse nuevas preguntas”, cerró.