Quedar en la mitad de un sándwich de dos personas que luchan por tener espacio para sus codos es la pesadilla de la mayoría de los pasajeros. Ahora, un nuevo diseño puede hacer que la gente quiera el asiento del medio, o al menos hacer que la experiencia de volar sea menos miserable.
Sentarse directamente junto a dos personas significa que los pasajeros solo tienen determinado espacio para los hombros. Pero mover el respaldo del asiento central unos pocos centímetros permite más espacio, así que la compañía hizo que el asiento del medio fuera de 7,6 cm a 12,7 cm más ancho que el asiento estándar de 45,7 cm.
Tenés que leerLos vuelos de Reconquista a Buenos Aires arrancan en agosto“Ese pequeño espacio significa que cada persona puede extenderse un poco más”, dijo a CNN Hank Scott, el fundador y presidente ejecutivo de Molon Labe Seating.
Los pasajeros tampoco tendrán que pelear por el espacio del codo. Los reposabrazos también se construyen de modo que no tengan una altura uniforme de adelante hacia atrás. Permitirán que los pasajeros del pasillo y la ventana descansen sus codos en la parte delantera del apoyabrazos mientras dejan espacio en la parte posterior, que es más baja, para el pasajero medio.
“Ningún asiento es más pequeño, un asiento termina siendo más ancho y hemos resuelto las guerras del codo”, dijo Scott.
Los asientos están diseñados para vuelos nacionales más cortos, aunque la compañía está desarrollando una versión para vuelos más largos que incluye más acolchado y pantallas de TV más grandes.
Entonces, ¿cuándo pueden los pasajeros probar estos asientos?
Los asientos fueron certificados por la Administración Federal de Aviación el mes pasado y están siendo fabricados por Primus Aerospace en Colorado. Scott dijo que esperaba que estuvieran disponibles en dos aerolíneas para abril o mayo de 2020. Aunque no pudo revelar qué aerolíneas contarán con los asientos, dijo que una de ellas tiene su sede en América del Norte.
No solo los pasajeros estarán más contentos con el nuevo diseño, dijo Scott. Los asientos son más livianos que los asientos de avión estándar, lo que podría ayudar a reducir los costos de combustible.
“Para una aerolínea, es una especie de obviedad”, dijo.
Los asientos S1 no solucionarán todo sobre volar, los asientos no se reclinan ni ofrecen más espacio para las piernas. Y eso sin mencionar la comida, los pasajeros conversadores, los procesos ineficientes de embarque y desembarque… y la lista continúa.
“Todavía va a apestar”, dijo Scott. “Pero ahora va a apestar menos”.