Miércoles 29.11.2023
/Última actualización 14:34
Finalmente, la Cooperativa SanCor dio a conocer la información que nadie quería escuchar: el cierre definitivo de la planta de San Guillermo. La misma que semanas atrás fue noticia nacional por tirar más de 100 mil litros de leche que no pudieron ingresar por el bloqueo sindical.
La planta se había reactivado en junio pasado, luego de un cierre que duró tres años. Es una usina especializada en quesos blandos, que ocupaba a 26 trabajadores y procesaba entre 60.000 y 70.000 litros diarios.
Si bien es cierto que las responsabilidades de este aciago momento son compartidas, es la intransigencia de Atilra la que desencadena una crisis definitiva para el destino de SanCor. Los históricos desmanejos, el derroche de recursos y el haber abierto las puertas a un Fideicomiso que fracasó, fueron los sucesivos errores de parte de la conducción. La tradicional metodología violenta del sindicato le aportó el broche, como señal de impotencia por parte de Ponce y sus muchachos al haberse quedado afuera de todo.
Avance sindical y libertad de empresa
Esta semana la empresa emitió un nuevo comunicado, en el que admiten que viene enfrentando una situación muy particular y difícil. "Desde hace más de 40 días, una medida gremial está paralizando la actividad productiva y comercial", afirman. "La excusa esgrimida por el sindicato es la regularización de cuestiones salariales cuando, en realidad, es la no concreción del proyecto del Fideicomiso de Administración que el gremio impulsaba de la mano de empresarios, que no tenía ni la capacidad económica, ni de gestión, para un negocio de esta importancia, y en el cual el gremio aspiraba a participar en su dirección", agregan.
De manera sistemática, durante todo el proceso de aprobación del Fideicomiso, "el sindicato ejerció presión desmedida sobre SanCor, para forzar decisiones y acciones. Así lo hizo en diciembre de 2021, en enero de 2022, de octubre de 2022 a enero de 2023 y en marzo y abril de 2023. En cada una de esas oportunidades, realizó medidas de fuerza bajo la excusa salarial para avanzar sobre las legítimas decisiones de los cooperativistas".
Según la empresa, lo que el sindicato no puede explicar es por qué avalaba el plan de los empresarios interesados, que dejaba de lado a cerca de 1.000 empleados del total de la plantilla laboral de SanCor.
Propuestas ignoradas
En este sentido, remarcan que la empresa hizo público y oficializó ante el Ministerio de Trabajo un plan para la regularización salarial. "El sindicato no sólo no consideró la propuesta, que recupera rápidamente las diferencias existentes, sino que comunicó al personal que no había ninguna propuesta. Así y todo, la Cooperativa realizó las acciones de comunicación interna necesarias, reconociendo además, el compromiso de cada uno de los empleados para el sostenimiento y continuidad de la Cooperativa".
También explicaron que la propuesta sigue abierta y a disposición de los empleados; sólo es necesario retomar la actividad para que haya producción, distribución y comercialización de productos. Aunque admitieron que hoy la capacidad de pago de salarios por parte de la empresa se ve limitada, de manera creciente, como consecuencia de las medidas de fuerza gremiales.
Las cartas están echadas. Hoy será un día clave. Atilra amenazó con "traer gente de afuera" para hacer valer sus argumentos. La empresa reconoce que con este bloqueo, el cierre será inexorable.