Juan Manuel Fernández
El flamante presidente de la Bolsa de Comercio de Santa Fe anticipó que su gestión se orientará hacia “la defensa constante de quienes producen”. Propuso un “seguro integral agropecuario”, mientras avanzan las obras del nuevo laboratorio de la entidad, que ampliará su gama de servicios.
Juan Manuel Fernández
@jotafernan
“En una provincia como Santa Fe, cuya fortaleza está dada por las producciones agrícola-ganadera-lechera, que día a día deben enfrentar condiciones adversas de inundaciones, sequías e incendios, es necesario que los gobiernos tanto Nacional como Provincial generen las condiciones para que sea posible instrumentar un seguro agropecuario integral, dentro de una ley marco”, aseveró Ulises Mendoza, el nuevo presidente de la Bolsa de Comercio de Santa Fe en sus primeras palabras en el cargo. También anticipó que su hoja de ruta será “la defensa constante y permanente de quienes producen”.
En diálogo con Campolitoral, el consejero del Grupo Sancor Seguros refirió el caso de Brasil, donde el Estado colabora en la toma de seguros por parte de los productores. “El gobierno le otorga a ellos (los productores que contratan el seguro) un porcentaje de ese seguro para que se puedan atender en caso de necesidad o catástrofe”.
“Aspiramos a que en nuestro país se trabaje en ese sentido”, dijo, y anticipó que desde el sector de seguros están trabajando para “demostrar a las autoridades que es un momento en el que se necesita dejar de lado aquellas emergencias que nunca llegan al productor”. Y abogó por soluciones inmediatas para que el productor “pueda tener la seguridad de tener una producción que lo lleve a seguir apostando por el trabajo y la riqueza que nos da el campo”.
Por otra parte, en la ceremonia de asunción se proyectó un video con los avances en la construcción de los nuevos laboratorios de análisis de la Cámara Arbitral de Cereales (CAC) en los que ya se han invertido casi $ 22 millones y se estima un final de millones, incluida la tecnología de punta.
Se trata de otra herramienta de gran utilidad para los productores y las cadenas agroalimentarias, ya que a los tradicionales análisis de granos, agua y suelos sumarán herramientas como cromatógrafos líquidos y gaseosos para la detección de micotoxinas (residuos tóxicos de hongos) según normas de la Unión Europea; un equipo de absorción atómica, que servirá para identificar trazas de metales pesados como cromo o plomo; instrumentos de electroforesis y PCR en tiempo real para realizar análisis genéticos en semillas; y también dispositivos para determinar calidad de harinas a partir de la medición de amilasa, una encima útil para la panificación.
Además, el traslado representará una ampliación de la capacidad de trabajo, que multiplicará 2.5 veces el volumen de muestras a analizar, además de una sustancial mejora logística, ya que el laboratorio abandonará el microcentro santafesino para operar desde una ubicación óptima en materia de accesibilidad. Además, las instalaciones ha sido especialmente diseñadas para ampliar y mejorar la oferta de servicios.