Filtraron la reacción de la empleada que denunció a Horner tras ser separada de su cargo. Aseguran que la denunciante está decepcionada con la decisión de absolver al jefe del equipo.
El escándalo que desató una explosiva interna en el equipo de Fórmula 1 de Red Bull con una denuncia por "conducta inapropiada" del jefe de la escudería, Christian Horner, con una empleada de la empresa sigue sumando nuevos capítulos que generaron otro sismo en el conjunto top de la máxima competencia del automovilismo.
En las últimas horas se filtró cuál fue la reacción de la denunciante acerca de la investigación interna que terminó absolviendo a Horner y con una suspensión para la mujer, a quien el pope de Red Bull le habría estado mandando mensajes fuera de lugar y que también vieron la luz semanas atrás.
"Está muy decepcionada por cómo ha ido todo, especialmente porque hizo todo según las reglas. Ella expresó sus preocupaciones en privado e hizo todo bien, pero se siente muy desencantada con la empresa", le confió un amigo de la denunciante al diario británico Daily Mail.
Incluso, cuenta la fuente, que el enojo más grande es porque la mujer considera que se cometió un acto de injusticia, ya que ella no puede seguir trabajando y la persona a la que denunció continúa en el cargo (estuvo presente en los GP de Bahréin y Arabia Saudita). "La han suspendido cuando siguió el debido proceso de forma diligente y correcta. Pero a pesar de todo eso, fue suspendida del trabajo que ama y de un deporte en el que es muy apreciada. Se nota la falta de apoyo y ella está muy decepcionada con el trato de su empleador", insistió.
El amigo de la denunciante siguió aportando información sobre el estado de la mujer y advirtió que no puede superar el hecho y que ya ha recibido ofertas de medios de comunicación para que cuente públicamente su versión aunque por el momento las rechazó.
"Es necesario hacer preguntas sobre la investigación de Red Bull, la transparencia traería confianza en lo que le está sucediendo. ¿A quién en Red Bull se le encomendó la tarea de establecer los hechos? ¿Quién en Red Bull tuvo acceso a todo el material confidencial que se utilizó? ¿Quién en Red Bull toma todas estas decisiones y ¿quién en Red Bull se esfuerza por establecer el origen de estas filtraciones?", se preguntó. Y concluyó: "Simplemente no puede superar el hecho de que presentó una denuncia y fue suspendida; lo único que quiere es transparencia en el proceso".
Por otro lado, el medio inglés publicó una declaración de una fuente que conoce las entrañas de la Fórmula 1 acerca del escándalo con Horner. "Todo el mundo sabe que el automovilismo es un deporte dominado por los hombres. Creo que los fanáticos se preguntarán qué ha ido mal en Red Bull para que una mujer sea suspendida por plantear sus preocupaciones. Todo esto hará disuadir a otras mujeres, que pueden haber tenido problemas similares en la F1, de seguir adelante", indicaron.
"Ella no buscó nada de esto y ahora ha sido suspendida y el mensaje es bastante claro, implica que las mujeres se queden calladas y no hablen o perderán su trabajo", completó el informante de la F1.
Puertas adentro, la familia Horner permanece unida. La esposa del director de RB, Geri Halliwell, ha viajado a Bahréin y Arabia Saudita para acompañar a su marido y se mantiene a su lado, en clara muestra de apoyo.
Lo cierto es que el estallido por el conflicto generó grietas internas. Según afirmó el diario alemán Auto Motor und Sport, tanto Adrian Newey como Max Verstappen mostraron su desacuerdo con el resultado de la investigación interna antes de la largada en Bahréin. El piloto neerlandés se encargó de plantar dudas sobre su continuidad en Red Bull mientras que ahora se sumó al escenario de conflicto el apellido de un pilar clave en la estructura: afirman que el director técnico del equipo tendría en mente pegar el portazo de manera repentina. La principal diferencia entre el piloto y este jerárquico integrante del staff, es que Horner estaría dispuesto a darle el empujón final al ingeniero.
Faltan 10 días para la próxima carrera en Oceanía y, según The Telegraph, en ese tiempo es probable que se aclare si la acusadora de Horner, que fue suspendida por Red Bull a raíz de la investigación, tiene la intención de apelar el veredicto e inicia acciones legales. Mientras tanto, la escudería está llevando a cabo otra investigación interna sobre las filtraciones que tuvieron lugar en las últimas semanas.