Miércoles 1.6.2022
/Última actualización 21:23
Argentina superó hoy a Italia por 3-0 tras una gran exhibición de fútbol y se consagró campeón de la Finalissima en el mítico estadio Wembley de Londres. Lautaro Martínez, tras la asistencia de un gigante Lionel Messi, Ángel Di María, a los 27 y 45 minutos del primer tiempo respectivamente, y Paulo Dybala sobre el final marcaron los goles del campeón de América, que levantó un nuevo trofeo a menos de seis meses del Mundial de Qatar 2022. Más tarde, sobre el cierre del primer tiempo, Ángel Di María "pinchó" una pelota dentro área y marcó el 2 a 0 para la Albiceleste.
Después de un inicio parejo e intenso, Italia tuvo su momento entre los 15 y 25 minutos del primer tiempo, sin grandes ocasiones pero logró arrinconar a la Argentina en su campo. Lo mejor del tetracampeón del mundo en ese lapso, sin embargo, fueron una buena jugada por derecha que terminó en un buen cierre de Romero y un cabezazo de Andrea Belotti bien controlado por "Dibu" Martínez. Argentina logró salir de ese asedio con lo mejor que había mostrado en ese tramo del partido que era la presión y recuperación en campo contrario.
Así fue que Giovani Lo Celso la recibió en campo de Italia y se la pasó rápido a Messi, quien aguantó la marca de Di Lorenzo, giró hacia la izquierda y encaró hacia el arco rival. Al entrar al área grande, el "10" con el marcador todavía pegado, tiró un centro preciso para el ingreso en soledad de Lautaro Martínez. El bahiense llegó a los 20 goles en el ciclo de Scaloni y se afianza cada vez más como el "9" del seleccionado. La ventaja le dio tranquilidad al equipo argentino, que no la había pasado bien, y comenzó a manejar mejor la pelota.
Argentina alzó un nuevo trofeo. Foto: REUTERS/Andrew CouldridgeCon el tiempo cumplido, el "Dibu" Martínez sacó un pelotazo desde el fondo que encontró a Lautaro en la mitad de cancha que con un giro se sacó de encima a Bonucci y después de una breve corrida dejó mano a mano a Di María con Donnarumma. Como en los Juegos Olímpicos de Beijing 2008 y en el Maracaná por la final de la Copa América, Di María definió por encima del arquero y dejó su marca registrada en Wembley sin importar que enfrente estaba su compañero en París Saint Germain.
El segundo tiempo del seleccionado nacional fue completo y pudo haber goleado a Italia. Con inteligencia, esperó las pocas ideas en ataque de Italia y de contraataque tuvo tres o cuatro posibilidades claras de ampliar el marcador. La primera fue un error de Donnarumma tras un pase atrás de Bonucci y después el ex Milan se recompuso con una gran atajada ante un tiro de Di María.
También tuvieron las chances del tercero Lo Celso y Messi después de una corrido que arrancó con una recuperación en campo propio pero una mala definición y luego Donnarumma negaron el 3-0. Para los minutos finales, Scaloni le dio la posibilidad de ingresar a Julián Álvarez, la última joya del fútbol argentino, y en la primera que tocó se animó a patear casi desde la mitad de cancha.
El final fue con el público argentino a puro "olé" y "dale campeón" en un estadio que por primera vez en la historia se vistió de celeste y blanco. Cuando parecía que el 2-0 estaba sellado, Scaloni puso a Paulo Dybala a jugar el tiempo de descuento y en el último de los cuatro minutos de adición, el cordobés puso el 3-0 con un gran zurdazo pegado al palo izquierdo.