Las Eliminatorias para el Mundial de básquet Filipinas, Japón e Indonesia 2023 están presentando dificultades para la mayoría de los seleccionados y Argentina no es la excepción.
Los caribeños se impusieron por 80 a 69 haciendo valer la localía con intensidad y una buena efectividad desde el perímetro. A los de Prigioni les dolieron las ausencias y les falta orden. El domingo ante Bahamas.
Las Eliminatorias para el Mundial de básquet Filipinas, Japón e Indonesia 2023 están presentando dificultades para la mayoría de los seleccionados y Argentina no es la excepción.
El cambio de formato a Ventanas FIBA ha sido un mal trago desde la clasificación pasada para el seleccionado albiceleste. La derrota por 80 a 69 ante República Dominicana este jueves pone presión también en esta edición.
Los dominicanos lograron sacar chapa de locales en Santo Domingo con un juego intenso desde el primer minuto y con un importante apoyo del público desde las tribunas.
Si bien, Dominicana marcó diferencias físicas de entrada, los dirigidos por Pablo Prigioni lograron suplirla con sacrificio en el poste y el goleo de Nicolás Brussino, una de las claves para la alineación actual.
La rotación en el segundo cuarto (8 de diferencia para el local) reflejó en Argentina las falencias de un equipo nuevo y sin mucho rodaje que no encontró solidez en la base, hecho que quedó en evidencia con el número final de pérdidas: 19.
Nicolás “Penka” Aguirre le aportó experiencia en dicho rol y José Vildoza un poco de desparpajo, pero no fueron contundentes ni en los puntos ni en el juego. El santafesino Fernando Zurbriggen tuvo escasos minutos en los que logró colaborar principalmente en el costado defensivo.
Tayavek Gallizi y Tomás Chapero, los otros santafesinos no vieron minutos. Juan Fernández por su parte se sumará al equipo para el domingo en lugar de Francisco Caffaro, el de Piamonte, que regresará a Estados Unidos.
Los lanzamientos de tres puntos de Suero, Mendoza y Pena fueron un salvavidas para los de Néstor “Che” García cada vez que la albiceleste lograba achicar las diferencias.
En el tercer cuarto el juego de alto-bajo entre Marcos Delía y Juan Pablo Vaulet le dio a Argentina algo de peso en la ofensiva, lo que llegó a acortar diferencias en 3.
A pesar de que a falta de 3 minutos para el cierre del tercer pasaje Dominicana obtuvo un ventaja de 9 puntos, la mayor colaboración llegó cuando el juego debió detenerse por una gotera que caía en medio de la cancha.
Luego de 30 minutos aproximados de parate, y con amagues a suspenderlo y darle por ganado el encuentro a los argentinos, el juego se reanudó y fue dominio local en todo momento.
La acumulación de faltas en los de Prigioni y el retorno a las malas decisiones en el ataque, acompañado por la gran efectividad caribeña fue el cóctel para que cerraran el partido con cierta holgura.
Ahora deberá enfrentar a Bahamas el domingo en Nassau, con la obligación de ganar ya que quedó por debajo de República Dominicana en la tabla de posiciones y quedó en colocación de desempate con el cuarto del otro grupo.
En febrero se disputará la última ventana recibiendo a Canadá y con otro duelo clave ante República Dominicana. La clasificación al Mundial no será una utopía con las ausencias de NBA y Euroliga, pero sí tendrá que sufrirse y sudarse.