El plantel de River será este lunes testeado para descartar que, luego del caso positivo del entrenador de arqueros Adrián Olivieri, haya otros jugadores o miembros del staff técnico afectados con coronavirus y así poder retomar los entrenamientos, a dos semanas del reinicio de la Copa Libertadores.
Luego que el jueves a última hora se conociera el caso de Olivieri, quien fue apartado de la concentración, todos los implicados permanecieron dentro de la "burbuja" sanitaria montada en un hotel de la localidad bonaerense de Ezeiza durante el fin de semana.
Si bien los futbolistas pudieron hacer movimientos físicos al aire libre en uno de los espacios del hotel, a modo corredor sanitario seguro, este lunes están previstas las pruebas PRC (hisopados), que determinarán si hay más infectados de COVID-19 o solamente fue un caso aislado.
Por lo pronto, el médico del plantel Pedro Hansing anticipó que ninguno de los jugadores -tras el positivo de Olivieri- presentó síntomas de coronavirus.
Tanto sábado como domingo, los futbolistas permanecieron aislados en sus habitaciones -hasta comieron dentro de ellas- y solamente salieron escalonadamente para una activación en una cancha que está en el mismo predio, sin tener contacto con nadie más.
El deseo del entrenador Marcelo Gallardo es poder contar con todo el plantel a disposición y así poder continuar la puesta a punto para el reinicio de la Copa Libertadores, previsto para el jueves 17 de septiembre.
Ese día viajará para visitar a San Pablo para reiniciar el parejo Grupo D de la Libertadores, que tiene a todos sus equipos igualados en puntos pero con el "Millonario" con mejor diferencia de gol como líder.
Luego, River, quien logró dos Libertadores en los cinco años de gestión de Gallardo, irá a Perú una semana más adelante para su duelo ante Binacional (22/9) en Lima y no en la altura, y después cerrará como local de San Pablo (30/9) y Liga de Quito (20/10).