Lunes 28.6.2021
/Última actualización 14:21
El abogado querellante Mario Baudry pidió este lunes las detenciones del médico Leopoldo Luque, de la psiquiatra Agustina Cosachov, del psicólogo Carlos Díaz y de la médica de la obra social, Nancy Forlini, por el delito de homicidio simple de Diego Armando Maradona y señaló que "les servía más muerto que vivo".
"Hubo abandono intencional", dijo el abogado querellante en representación de Dieguito Fernando, a pocos minutos de dar comienzo a la indagatoria del médico Luque.
"Es de resaltar que a esta situación del desenlace fatal de Maradona, no se llegó sin estar previamente planificada, pero inexplicablemente la fiscalía investiga solo desde el día 11 de Noviembre del 2020, y esta situación comenzó a gestarse mucho tiempo antes, habiéndose comenzando por desapoderar de sus bienes al señor Diego Armando Maradona, ocultándole en vida sus verdaderos ingresos, disponiendo de sus bienes inmuebles por medio de donaciones, de sus bienes muebles y de sus obsequios realizados por personalidades importantes del mundo artístico, deportivo y político, sin el conocimiento cabal y adecuado de Maradona, ya que estaba en una situación de vulnerabilidad", sostuvo en el escrito presentado este lunes.
En ese sentido, Baudry expuso que el "desapoderamiento" de Maradona fue al ceder sus marcas y su propio nombre "el día 17 de Septiembre de 2020 a la empresa Sattvica S.A", hoy en poder del abogado Matías Morla.
"Resulta obvio para todos aquellos que tienen acceso a la presente causa que al Sr. Maradona, primero lo desapoderaron de todos sus bienes, sus marcas y hasta de su propio nombre, y luego de ello lo abandonaron a su suerte, poniendo profesionales que no contaban con la experiencia y el conocimiento suficiente para tratarlo, realizando maniobras que impidió que su familia tuviera acceso a él y que otros profesionales pudieran tratarlo, le proveyeron drogas licitas e ilícitas para agravar su cuadro de salud, tratando de generar una muerte que pareciera natural", sostuvo el querellante.
"Maradona les servía más muerto que vivo. Muerto, todos sus derechos de imagen y marcas ingresaban a las arcas de una sola empresa. Maradona vivo hubiera sido un gran problema, ya que hubiera reclamado a viva voz como siempre lo hizo que le devolvieran sus bienes", agregó.