Milagros Rodríguez, alías "Monona", quien fue la cocinera de Diego Armando Maradona en sus últimos meses de vida, declaró ante la Justicia de San Isidro que el astro "tomaba alcohol cuando quería", aunque había dejado de consumir a raíz de su operación por un hematoma subdural, semanas antes de su muerte en noviembre pasado.
"No había alcohol en la casa, pero a veces pasaba que traían y le regalaban y tomaba vino. Otras veces Diego decía ´quiero cerveza, quiero cerveza´ y había que ir a comprar. No se le decía que no", dijo "Monona" en su declaración, según confiaron fuentes judiciales a NA.
"Esta situación se dio desde el principio de la estadía, después al final no tomaba", aclaró la cocinera ante la Justicia.
Según reconstruyó, ella ingresó a trabajar cuando Maradona vivía en la localidad bonaerense de Bella Vista por pedido de Vanesa Morla, y desde entonces siguió al campeón del mundo en México 1986 a su vivienda de Brandsen, y por último, a Tigre, donde falleció el 25 de noviembre.
La cocinera detalló que en las casas de Bella Vista y Brandsen quienes rodeaban a Diego eran su sobrino Jhonatan, un personal de seguridad y "Charly", éste último familiar de Rocío Oliva, expareja de Maradona.
"Diego tenía sus épocas, a veces quería tomar. Tomaba cerveza o vino. No había alcohol en la casa guardado como dije, pero cuando él quería iban a comprar. Si él quería alcohol, se llamaba a la encargaba de las compras", describió "Monona" sobre lo que pasaba en esas dos viviendas.
Pero los fiscales que la interrogaron fueron más allá y le consultaron sobre si Maradona consumía drogas: "Sabía que había rumores que Charly fumaba faso (marihuana) y esas cosas".
Los fiscales insistieron y le preguntaron si lo vieron a Maradona fumar marihuana, y en eso la cocinera fue tajante: "Nunca lo vi, no me consta".
La relación con Charly, según describió, se quebró cuando el entorno se enteró que tenía pedido de captura por la Justicia en relación a un hecho por el cual se lo acusaba.
"A Charly lo echaron, creo que se enteraron que estaba prófugo, tenía problemas con la justicia y se peleó con Verónica (Ojeda). Ese día estaba en la cocina. Charly se estaba por ir y creo que se quiso llevar algo, Verónica lo hizo llamar le revisaron el bolso y se fue. No fue nunca mas".
Por último, describió en detalle cómo fue el día en que Maradona cumplió 60 años, el 30 de octubre, casi un mes antes de su muerte y donde se lo vio desmejorado en un partido de Gimnasia y Esgrima La Plata, el último club que dirigió.
"Sí, estuve, también estuvieron Jana, el de seguridad y creo que nadie más. Diego quiso brindar y tomamos un champagne.
Esperamos que se hagan las 12:00 de la noche, brindé y me fui a dormir", describió. La cocinera agregó que al día siguiente, "Diego estaba bajoneado, en el sillón y no disfrutó el cumpleaños".
En la ampliación de su declaración, "Monona" cerró: "Los remedios se lo daban la enfermera, el enfermero o, en caso de no querer, se lo daban los médicos. Tenía la medicación en un tupper, lejos del alcance de Diego, escondida de él, pero en todo el tiempo que trabajé con Maradona, nunca vi que tuviera intención de robarse la medicación".
El juez de garantías de San Isidro Orlando Díaz autorizó este miércoles la apertura de los dos teléfonos que utilizaba Diego Armando Maradona y que fueron encontrados en su habitación el 25 de noviembre pasado cuando fue hallado sin vida.
Los equipos serán peritados tal cual lo dispusieron los fiscales de San Isidro que investigan la muerte del mejor jugador de fútbol de todos los tiempos.
Por otra parte, se sumó a la causa que investiga la muerte de Maradona el testimonio de Griselda Morel, la psicopedagoga de Dieguito Fernando, quien dijo que Verónica Ojeda le comentó que, en su momento, vio droga en la casa en la que vivía el astro en Brandsen.
Además señaló que en esa vivienda lo visitaba Charly, el marido de la prima de Rocío Oliva, quien le llevaba remeras de fútbol, auriculares y otros objetos, aunque las querellas creen que, en realidad, le llevaba drogas.