Viernes 11.3.2022
/Última actualización 13:29
El arquero de la Selección nacional, Emiliano Martínez, habló como nunca de Lionel Messi y lo que significa el capitán para el grupo. Reveló que cuando la Pulga habla "todos se callan" porque "es como si hablara el Presidente", mientras que también confirmó que Brasil fue "la última Copa América" del crack rosarino.
En diálogo con Ben Foster, el arquero del Watford que lo entrevistó para una plataforma de Streaming, el guardameta argentino comentó: "Me toca ser titular en la Copa América. Argentina tenía mucha presión, Messi nunca había ganado un torneo así de grande en su vida, entonces él habló diciendo que iba a ser su última Copa y que por eso iba a darlo todo, yo tenía la piel de gallina, con Messi diciendo eso".
"Él es un compañero que te habla, que sabe todo de vos. Cuando Messi habla, todos se callan y lo escuchan como si fuese el Presidente de la Argentina, porque cualquiera que está ahí, se calla", detalló Dibu.
Y agregó: "Una vez estábamos jugando un partido con Uruguay, que tenía a (Edinson) Cavani, a (Luis) Suárez y él después de media hora vino y me dijo cuál era la única forma en la que me podían hacer un gol, entonces yo dije: 'hermano, voy por todo'. Él me dijo: 'Emi, por favor, ayudáme con un par de cosas, solo esto y esto, y relajate'. Entonces hice exactamente lo que Messi me pidió".
"La Selección argentina tiene mucha presión cuando juega. Un solo partido con Argentina son como 54 en el Aston Villa, no puedo explicar la presión que se siente", señaló, mientras que luego manifestó: "Hoy, cuando voy a la Argentina, no puedo caminar por la calle".
Martínez también aseguró que "cada vez que voy a una convocatoria de la Selección digo 'por favor, denme una remera de Messi', ¡Y todos la quieren. Se hacen 200 o 300 camiseta de Messi por partido por los pedidos de los sponsors, de los rivales, de la gente de los clubes, dirigentes".
"Me explotaron las redes después de los penales en la semifinal, pero yo después del partido lo primero que hice fue llamar a mi psicóloga solo para calmarme. Pasé de 700 mil seguidores a 2.4 millones en un día después de los penales. Miles de comentarios, entrevistas y yo tan solo no quería hacer nada, solamente era una semifinal, así que pasé horas hablando con mi psicóloga y entonces en la final con Brasil comencé el partido muy relajado, como si no estuviera jugando una final", relató.
El arquero indicó además: "Amo jugar de visitante, me encanta que me insulten. Me puse a bailar contra la hinchada del United porque me habían insultado durante todo el partido. En el último minuto erraron un penal y me acordé de todo lo que me habían dicho".