Viernes 7.1.2022
/Última actualización 14:27
El número 1 del tenis mundial, Novak Djokovic, retenido en un hotel de la ciudad de Melbourne, agradeció hoy "a toda la gente a lo largo del mundo por su constante apoyo" en medio del conflicto con las autoridades de Australia por su ingreso al país, situación que se resolverá el lunes próximo.
"Puedo sentirlo y es gradiosamente apreciado", aseguró el serbio en una de las historias publicadas en su cuenta de Instagram.
El tenista también aprovechó para dejar un mensaje por la Navidad ortodoxa que se celebra este viernes: "Paz de Dios. Cristo nace. Feliz Navidad. Que el amor de Dios te fortalezca y te llene".
Instagram D.R
Djokovic permanecerá hasta el lunes retenido en un hotel de Melbourne, a la espera de una resolución judicial para poder ingresar a Australia, luego de apelar la cancelación de su visa por no estar inoculado contra el Covid-19.
De conocida posición contraria a la vacuna, el tenista viajó a Melbourne para disputar el Abierto de Australia a partir del 17 de enero tras conseguir una "exención médica" por parte de las autoridades oceánicas.
Sin embargo, al aterrizar el miércoles en la ciudad del estado de Victoria, quedó retenido por el personal de Migraciones del Aeropuerto Internacional Tullamarine debido a un problema con su visado.
Agentes de la Fuerza Fronteriza de Australia (ABF) lo escoltaron hasta una oficina de la estación aérea, donde fue interrogado durante horas sin acceso a su teléfono celular, según denunciaron desde su entorno.
El incidente se convirtió en un escándalo diplomático cuando el presidente serbio Aleksandar Vucic acusó a las autoridades australianas de "maltrato" y de ejercer una "caza política".
El primer ministro australiano Scott Morrison aclaró que Djokovic no aportó evidencia de tener la vacunación completa ni justificación para estar eximido de ella.
"Las reglas son las reglas, especialmente cuando se trata de nuestras fronteras. Nadie está por encima de las reglas", advirtió.
Desde el jueves, grupos de aficionados se congregan en el Park Hotel de Melbourne para pedir la liberación del tenista. El establecimiento, usado como centro de cuarentena durante el año pasado, también alberga detenidos que fueron trasladados desde las islas de Manus y Naur.
Djokovic, de 34 años, acudió a Australia después de anunciar que había conseguido un permiso sanitario para jugar el Abierto en busca de su décimo título y de batir el récord de 20 Grand Slams, que ahora comparte con el suizo Roger Federer y el español Rafael Nadal.