Emiliano Martínez volvió a ser la gran figura del Aston Villa, conjunto que selló su clasificación a las semifinales de la Conference League tras vencer al Lille de Francia.
Olivier Létang, mandatario del conjunto francés, apuntó con dureza contra “el Dibu” luego del triunfo del Aston Villa por penales en los cuartos de final.
Emiliano Martínez volvió a ser la gran figura del Aston Villa, conjunto que selló su clasificación a las semifinales de la Conference League tras vencer al Lille de Francia.
La actuación del arquero argentino, que detuvo dos penales en la definición desde los doce pasos, fue clave para avanzar de base, donde chocarán ante Olympiakos de Grecia. Sin embargo, el principal foco de atención quedó concentrado en la actitud del Dibu.
Durante una entrevista en zona mixta, el presidente de la institución gala, Olivier Létang, criticó duramente las celebraciones del portero.
Tras contener el primer disparo de la serie al argelino Nabil Bentaleb festejó de cara a los simpatizantes del conjunto local realizando el gesto de silencio. Luego, al desviar el disparo del francés Benjamin André, que decretó la victoria de los Villanos, festejó con un provocativo baile.
"No quiero hablar de ello. Creo que perdemos mucho tiempo hablando de este chico cuya actitud no es la de un deportista de muy, muy alto nivel, en mi opinión. Porque en el deporte de alto nivel, en la derrota o en la victoria, hay que mantener la calma y la elegancia. Así que no me apetece seguir hablando. Prefiero que nos concentremos en nosotros mismos y destaquemos todos los aspectos positivos, porque los hay", lanzó sin rodeos el mandatario de la institución de Alta Francia.
Vale remarcar que Martínez fue fuertemente hostigado durante todo el cotejo en el Decathlon Arena - Stade Pierre-Mauro.
El fastidio contra el guardameta albiceleste proviene de su triunfo ante Francia en la final del Mundial de Qatar 2022, donde fue nuevamente figura en la tanda de penales.
"Creo que, como todo el mundo, el portero del Aston Villa ya había recibido una tarjeta amarilla. Recibió una segunda, así que pensamos que podía ser expulsado. Y fue entonces cuando los árbitros nos explicaron que, cuando se tira un penalti, se ponen todos los contadores a cero y, por tanto, no había tarjeta roja porque sí", añadió el dirigente al ser consultado sobre la razón por la que el arquero no fue expulsado del encuentro.
El guardián de los tres palos de la selección argentina también se refirió al clima hostil que vivió durante todo el juego. "Me motiva la afición cuando me tiran cosas a la espalda. Toda mi vida me han tirado cosas a la espalda y siempre me levanto, ya sabes. Me da energía para rendir", dijo en declaraciones que replicó la cuenta oficial del club.
También se refirió a las dos amarillas que recibió: "Tengo mala reputación con hacer tiempo, porque el otro arquero hizo exactamente lo mismo que yo y a mí me amonestan después de los 30 minutos. Estábamos perdiendo el partido así que no entiendo qué hizo el árbitro. Después no había pelota en el penal y fui a pedir una pelota al alcanzapelotas y fui amonestado. Entonces no entiendo las reglas".
"Se siente bien. Amo este club, jugar una semifinal acá es algo increíble. Mi carrera sigue yendo para arriba y necesitás celebrar las pequeñas victorias. Después de 42 años jugar una semifinal de competiciones europeas es extraordinario. Creo que los hinchas deberían alentarnos el domingo ante Bournemouth, que vamos a estar cansados, así que necesitamos el apoyo local para tener un impulso y llegar hasta el final", advirtió el marplatense, solicitando el aliento de su afición de cara al próximo compromiso de los dirigidos por Unai Emery en la Premier League, donde luchan por finalizar en puestos que clasifican a la próxima Champions League.
A falta de cinco jornadas, los Villanos aparecen con 63 puntos en la cuarta posición, última plaza que brinda un pasaje al máximo certamen europeo. Sin embargo, no pueden relajarse, ya que a solo tres unidades y con un juego menos se encuentra el Tottenham.