El Mundial de Qatar comenzará el 20 de noviembre (restan solo 22 días), pero todavía hay hechos que amenazan con cambiar drásticamente la escena. Según el portal Infobae, el informe que pidió en las últimas horas la FIFA a la Federación Tunecina de Fútbol (FTF) encendió todas las alarmas: ¿hay posibilidades de que prohíban que la selección nacional de ese país dispute el certamen más importante de la disciplina?
El hecho que mantiene en vilo al mundo del fútbol se inició semanas atrás por el cortocircuito entre la federación local presidida por Wadii El Jary desde 2012 y el ministro de Juventud y Deportes de Túnez, Kamel Deguiche. Unas declaraciones del funcionario gubernamental fueron interpretadas como una posible intromisión del poder político en la estructura del fútbol, algo que la FIFA prohíbe por estatuto.
“Nos ha llamado la atención que las autoridades estatales parecen querer interferir en los asuntos y la gestión de la FTF, en particular al considerar la disolución de la Oficina Federal de la FTF. A este respecto, nos gustaría recordar que las asociaciones miembro de la FIFA están obligadas estatutariamente a gestionar sus asuntos de forma independiente y sin influencias indebidas de terceros (cf. art. 14, párr. 1 lit. 0 y art. 19 de los Estatutos de la FIFA)”, indica la carta de la FIFA a la FTF que publicaron distintos medios locales.
El documento, que lleva la firma del Director de la División de Asociaciones Miembro, Kenny Jean-Marie, encendió las alarmas en Túnez y también en los otros países que comparten grupo con este país. “En primer lugar, la falta de menos de un mes para el inicio de la Copa del Mundo, que pone en peligro la participación de nuestra selección en este encuentro, pero también pone en peligro la participación de nuestros clubes en las competiciones africanas”, informó el diario local La Presse.
Si bien suena difícil que tres semanas del Mundial se excluya a una selección participante, el mail que llegó a las oficinas tunecinas habla de los castigos pautados en los reglamentos: “El incumplimiento de estas obligaciones puede dar lugar a las sanciones previstas en los Estatutos de la FIFA, incluida la suspensión de la asociación en cuestión, incluso si la influencia de un tercero no es atribuible a la asociación miembro (cf. art. 14 § 3 de los Estatutos de la FIFA). En vista de lo anterior y con el fin de evaluar plenamente la situación, le rogamos que nos facilite la posición de la FTF y más detalles de la situación mencionada antes del viernes 28 de octubre de 2022″.
Las Águilas de Cártago tienen pautado su debut para el martes 22 de noviembre en la primera fecha del Grupo D frente a Dinamarca. Esa zona, que también la componen Francia y Australia, también será determinante para los integrantes del Grupo C (Argentina, Polonia, México y Arabia Saudita), ya que los dos primeros se cruzarán en octavos de final contra los líderes de esa zona.
El medio francés RMC aclaró que los directivos de Túnez tienen unos días más para resolver la situación, aunque plantearon las posibilidades del hipotético –y complejo– escenario de una descalificación: “Pero si los dirigentes del fútbol tunecino no consiguen calmar las cosas con su gobierno y apaciguar así a la FIFA, el riesgo de ver a las Águilas de Cártago excluidas del Mundial de 2022 es real”.