Hilario Bravi: "En la A, hay equipos que son de la B, premiados por levantar la mano"
Fue jugador y técnico de Unión. Vivió aquella "apretada" en La Tatenguita del 93 y cuenta: "Los hinchas de Colón me llamaban para amenazarme de muerte si ponía suplentes y los de Unión hacían lo mismo si ponía a los titulares".
Hilario Bravi: "En la A, hay equipos que son de la B, premiados por levantar la mano"
Este año se cumplen los 50 de un acontecimiento muy especial para Unión. Es que el 14 de diciembre de 1974 se dio el ascenso a Primera con el famoso "Campanazo" y el gol de Hilario Bravi, ante Estudiantes de Buenos Aires, que dio paso al inicio de un camino virtuoso como nunca antes se había dado en el club, porque cuando ascendió en 1966, sólo se mantuvo en Primera en el 67. Y cuando volvió en el 68, estuvo 69 y 70, cuando aquél descenso desembocó en una decisión que muchos se lamentan y consideran equivocada, que fue la desafiliación de AFA para intentar, a través del Regional, la vuelta a la A para jugar el Nacional, algo que quedó inconcluso en el 71 y 72. Unión volvió a afiliarse en el 73 y tras aquél año en el que no se pudo conseguir el ascenso, se formó un buen equipo en el 74. Carmelo Faraone fue el hombre que guió el camino a la máxima categoría con un equipo en el que, entre otros, estaban la Polaca Burtovoy, Silguero, Horacio Daniel Rojas, Batocletti, Elio Barro, el Patón Rossi, Carlos Mazzoni, Alcides Merlo, el Gringo Sacconi, César Toyé, el Negro Fredes, Ramón Zanabria, el Rana Juárez, Benito Valencia, el Huevo Garello, Leopoldo Jacinto Luque e Hilario Bravi, quien el sábado se llegó hasta Santa Fe para acompañar a su amigo el Patón Tomás Vicente Rossi, invitado por la dirigencia de Unión para ver al equipo en la victoria ante San Lorenzo.
"Mi hermano de la vida, el Toti Iglesias, me dice que sigo 'robando' con eso del campanazo de Bravi, como la palomita de Poy o el gol del Chango Cárdenas en el Centenario de Montevideo... Me mandaron la imagen de ese gol hace poco, en blanco y negro. Le gano por adentro a Batain y le pego con tres dedos... ¡¡¡Debe haber sido la única vez que le pegué con tres dedos!!!! Landaburu, que luego se fue a River, me 'gasta' cada vez que me encuentra y me dice: 'Hilario, ¡¡¡cómo te salvé!!!...". Así comienza la charla con Bravi, que luego de jugar en Unión y de dejar el fútbol tras haber participado en otros equipos, se dedicó a la dirección técnica y le tocó dirigir a Unión en aquél convulsionado 1993, cuando ese partido con Banfield en Santa Fe provocó disturbios en La Tatenguita y amenazas para que el equipo no gane, ya que una victoria o un empate le habría permitido, a Colón, llegar a Primera.
-¿Pensabas que te ibas, en el 75, cuando llegó el Toto Lorenzo?
-Nosotros empezamos la pretemporada bastante temprano... Me conozco de memoria el Parque Garay porque íbamos a correr ahí... Y recuerdo que decían que iba a llegar un micro cargado de jugadores. Nuevo o diez días antes, llega el Toto con un montón de figuras. Tuve la suerte de meter un par de goles con Rafaela y Patronato en los amistosos de preparación y me quedé... Hubo muchos que se tuvieron que ir, pero lo que se decía era que el único que se quedaba era Leopoldo... ¡El Toto era el técnico que había salido subcampeón de la Champions League...! Es como si ahora viniera a Unión o a un equipo recién ascendido, el técnico del Borussia Dortumund... Una locura.
-¿Qué te dejó el Toto Lorenzo?
-Antes de él, jugaba a la pelota... Con él, empecé a jugar al fútbol... Mirá, yo tenía dos ídolos en el fútbol, el Loco Gatti y Pinino Más... Con el Loco jugué en Unión y luego tuve la suerte de jugar con Pinino...
-¿Qué recuerdos te sigue trayendo aquello que pasó en La Tatenguita y ese famoso partido con Banfield?
-Duele por la forma que se dio... No se entrenaba tranquilo, el club estaba muy convulsionado y las amenazas en La Tatenguita fueron muy traumáticas... Llamaban hinchas de Colón para decirme que si ponía los suplentes me mataban y los hinchas de Unión me llamaban para decirme que si ponía los titulares me mataban... Una locura... A mi apenas me pegaron esa tarde, pero Varisco, Llane, la pasaron mal... ¡Había cuatro escopetas recortadas...! Y a Dante Fernández lo trajeron de los pelos y gatillándole en la cabeza...
La cobertura de El Litoral, hace 50 años. En la foto de arriba se observa el momento del estallido en Campana con el gol de Bravi y el festejo del autor. Crédito: Archivo El Litoral.
-Hilario Bravi director técnico, ¿está terminado?
-Totalmente... Hoy estoy disfrutando, veo fútbol de Inglaterra, soy 'Guardiolista' a muerte y veo algunos partidos del fútbol argentino... Sólo algunos porque me aburre... Hay equipos en la A que son equipos del Nacional B que están premiados por levantar la mano.
-¿Siguen habiendo "agachadas" en el fútbol y cosas confusas...?
-Cada vez más y lo peor es que hay un alto grado de impunidad... Lo peor es que ahora te amenazan... Mirá, me consta que hay árbitros que llaman pidiendo más partidos y que si no hacen bien los deberes, son castigados... Pasa lo mismo con los dirigentes, viajan a Qatar, a la Copa América a cambio de levantar la mano. Y hay otros que lo hacen, a lo de levantar la mano, para no perjudicar a sus clubes.
-¿Es más fuerte Tapia que lo que era Grondona?
-Por lo que veo, por lo que me cuentan, sin ninguna duda que el poder de Tapia es mayor... Es devolución de favores y es miedo también... Fijate el caso Tévez, que no estaba recibido y en una semana la Afa le dio el carnet. Y después Toviggino se lo reprocha en el famoso caso de Dóvalo, cuando Tevez habló de él y salió Toviggino a "recordarle" cómo le dieron la autorización para que dirija.
-Nombraste a Toviggino...
-Es un hombre fuerte, fue él quien tuvo la virtud de juntar a las partes después de la vergüenza del 38 a 38...
-¿Estuviste cerca del poder alguna vez, cuando te tocó dirigir a algún club con esas características?
-Sí, estuve en clubes que estaban cercanos... Y eso que no agarré una buena época porque al técnico anterior lo habían beneficiado y conmigo no tanto... Vos te das cuenta cuando los árbitros te dicen: "Yo no puede meter los goles...", como dejando entrever que algún beneficio ya te dio... Mirá, para tener éxito hay que armar un buen equipo y manejarse bien en calle Viamonte... Es así... Y el que no lo entienda, se equivoca.
-Vos participaste del proceso de Tinelli en Badajoz. ¿Por qué no puede entrar a San Lorenzo luego de todo lo que hizo?
-Mi ahijado, el hijo del Toti Iglesias, lo sigue a todos lados a San Lorenzo y siempre anda por ahí... El mayor castigo para Tinelli es que no puede llevar a Lolo, su hijo, a la cancha de San Lorenzo... No puede pasar ni por la avenida... En Badajoz llevamos buenos jugadores, yo participé de ese proceso y creíamos que con la técnica de los argentinos alcanzaba y la verdad es que no nos fue bien. Y él tuvo un problema con los sponsor.
-¿Es más fácil encontrar clubes que reciban "prebendas" en la Primera Nacional que en Primera?
_... ¡Seguí el Federal..!. ¡Es terrible...! Pero en Primera te lo hacen igual, van a la VAR o no van... ¿Para qué voy a hablar?... Mirá, a mi me mandan videos de partidos del Federal que son tremendos... Dóvalo, Ceballos... No me hagas hablar porque puedo decir cualquier cosa.
-¿Tenés alguna anécdota que recuerdes de tu paso por Santa Fe?
-Yo vivía con Coscia, Baley, el chaqueño Mazo... ¡Ibamos al bowling juntos...! Teníamos una gran amistad con esos muchachos... Vivíamos en calle Avellaneda, a cuatro cuadras de la estación de trenes... Ahí tomábamos el 2 para ir a entrenar... ¡Y éramos de Primera....! Hoy eso es impensado, ¿no?... Hay chicos con 12 partidos en Primera y tienen autos de alta gama... Ese es un tema para tratar largo y tendido.
-Lo que habrá sido compartir el plantel con Heber Mastrángelo...
(Risas) -¡Un fenómeno!... La mejor es que vino el Turco Abdala, que era de Rufino y muy amigo del Heber. Había trascendido que se quería ir a Rufino a cazar y le dijo al doctor Pegasano que lo enyese... Si, si, como te acabo de decir... ¡Lo enyesó!... Y terminé jugando yo ese partido... Increíble.
Hilario Bravi pasó de los mejores a los peores momentos en Unión. El club ascendió con un gol suyo, vivió un año espléndido e inolvidable como fue el 75 y luego, como entrenador, una de las peores situaciones con aquella agresión en La Tatenguita al plantel antes de la última fecha de aquél torneo de ascenso. Unión fue una parte grande de su vida. Y este año, el recuerdo de ese grupo de jugadores -de los cuáles algunos ya no están- cumple nada menos que 50 años.