Lunes 17.7.2023
/Última actualización 21:24
Una polémica foto de Dusan Vlahovic desencadenó en una aterradora amenaza con trasfondo político de los barras del PSG al propio futbolista serbio, ya que no quieren que se mude a la Ligue 1 tras la salida de Lionel Messi y la incertidumbre por el futuro de Kylian Mbappé.
"En París te cortaremos los tres dedos", reza la bandera blanca que desplegaron algunos fanáticos en las inmediaciones del Parque de los Príncipes, justo cuando Vlahovic, también en la mira de Chelsea, tenía casi todo acordado para salir de Juventus en una operación valuada en 80 millones de euros, aproximadamente.
La foto del jugador Dusan Vlahovic desencadenó en una aterradora amenaza con trasfondo político.Para explicar el significado de la frase hay que remontarse a los tres dedos que mostró, al igual que Dusan Tadic y Filip Kostic, durante los festejos de la Selección de Serbia tras la victoria por 3-0 ante Eslovenia, en el marco de la última doble fecha FIFA.
En la tradición serbia y ortodoxa, el número tres es muy importante. Y se utilizan tres dedos al firmar la cruz en la ortodoxia, que simboliza la Trinidad.
Aquel día, los tres futbolistas tenían puesta una remera que reconocía a Kosovo como parte de Serbia en un gesto que haría alusión a la supremacía del país europeo, así como también su vinculación a un saludo utilizado por la guerrilla de unificación de dicho territorio.
El conflicto político entre Serbia y Kosovo:
Kosovo, oficialmente conocido como República de Kosovo, es un Estado con reconocimiento limitado sin salida al mar que se declaró independiente de Serbia el 17 de febrero de 2008, ubicado en la península balcánica, en el sureste de Europa.
Las partes están enemistadas hace décadas con trágicas consecuencias, como la guerra de 1998-1999, la cual dejó más de 10.000 muertos y dejó a más de un millón de personas sin hogar.
Belgrado, la capital de Serbia, se negó a reconocer la declaración de independencia de Kosovo sin tener el control formal allí. Algo que Francia sí reconoce abiertamente, al igual que otros 100 países, como Estados Unidos.
El último estallido puso en el centro de la escena a la policía de Kosovo, que arrestó al menos a ocho serbios sospechosos de participar en los violentos enfrentamientos que se produjeron en mayo con las tropas de la OTAN, dejando decenas de heridos en todos los bandos.