Miércoles 21.9.2022
/Última actualización 20:07
Lo que se avistaba durante la organización del Mundial de Francia 1938 se hizo realidad. La premonición de Jules Rimet, presidente de la FIFA acerca de la Segunda Guerra Mundial sucedió y la competencia futbolística no se disputó por 12 años. Se saltearon las ediciones de 1942 y 1946. En 1950, el mundo ya se encontraba en condiciones de una nueva cita mundialista, no así, los países europeos para organizarla. En ese contexto, Brasil logró ser la sede del Mundial de 1950.
34 selecciones se anotaron para las eliminatorias pero por diversos motivos comenzaron a darse de baja. 13 países llegaron al Mundial y se dividieron en 4 grupos. Grupo A y B contaron con 4 selecciones, el C con 3 integrantes y en el D sólo quedaron Uruguay y Bolivia. Por la baja cantidad de participantes se decidió que el ganador de cada fase de grupo acceda a una fase final donde los 4 clasificados se enfrentaron todos contra todos.
- Grupo A: Brasil*, Yugoslavia, Suiza y México
- Grupo B: Inglaterra, España*, Chile y Estados Unidos
- Grupo C: Italia, Suecia* y Paraguay
- Grupo D: Bolivia y Uruguay*
El Maracanazo
Con los 4 clasificados a fase final; Brasil, Uruguay, España y Suecia, comenzó a disputarse la liguilla de todos contra todos. Era el primer Mundial donde no se disputaba una final pero por casualidad o causalidad, Uruguay y Brasil fue el último partido de la fase final y ambos llegaron con chances de ser campeón. El marco, contexto y hasta el empate en el marcador favorecía a los locales que ya se creían campeones desde el inicio del torneo.
El conjunto de Brasil llegó a ese partido invicto y como si fuera poco, en la fase final venció a Suecia 7 a 1 y a España 6 a 1. Pero, en la final se vio sorprendido por una selección que ya sabía lo que era ser campeón del mundo.
El momento del segundo gol de Uruguay. De fondo el Maracaná repleto, en el piso el arquero de Brasil.Los libros de la historia hablan de alrededor de 200.000 espectadores en el Maracaná aquél 16 de julio de 1950. Todos esperaban el primer campeonato mundial del local. Todos, hasta el presidente de la FIFA que tenía preparado un discurso en portugués para honrar a los campeones. Sin embargo y a pesar de empezar ganando 1 a 0, Brasil cayó por 2 a 1 en un partido que quedó grabado como uno de los más emblemáticos de la historia de los mundiales.
El primer tiempo terminó 0 a 0 pero como el empate favorecía a Brasil, el clima era de fiesta en el Maracaná. En el comienzo del segundo tiempo Friaca marcó el 1 a 0 para el local y la fiesta era inminente. Sin embargo, a los 21 Schiffino empató el encuentro y a los 34 Edgardo Ghiggia puso el 2 a 1 final a favor de Uruguay. Así se gestó el mítico “Maracanazo”. Al finalizar el partido, todo lo que se hizo y también lo que no se hizo pese a estar previsto - ceremonia de coronación - quedó marcado por la derrota de Brasil.
Brasil había jugado el partido decisivo con camiseta blanca y tras el “fracaso” en su propio Mundial, la Confederación Brasileña de Deportes decidió que la selección debía prescindir de su tradicional equipación, blanca y azul, al estar asociada con aquella derrota. Para elegir la nueva se lanzó un concurso y el ganador fue un joven que propuso camiseta amarilla con cuello verde, pantalón azul con franja blanca, y medias blancas y azules. Sin embargo, el uniforme blanco se volvió a usar en algunas ocasiones como por ejemplo, el partido inaugural de la Copa América 2019 donde Brasil venció a Bolivia 3 a 0.
Repercusiones años más tardes
Jules Rimet, presidente de la FIFA en el mundial de 1950: Todo estaba previsto, excepto el triunfo de Uruguay. Al término del partido, yo debía entregar la copa al capitán del equipo campeón. Una vistosa guardia de honor se formaría desde el túnel hasta el centro del campo de juego, donde estaría esperándome el capitán del equipo vencedor. Preparé mi discurso y me fui a los vestuarios pocos minutos antes de finalizar el partido cuando aún estaban empatados. Pero cuando caminaba por los pasillos, de momento, se interrumpió el griterío infernal. A la salida del túnel, un silencio desolador dominaba el estadio. Ni guardia de honor, ni himno nacional, ni discurso, ni entrega solemne. Me encontré solo, con la copa en mis brazos y sin saber qué hacer. En el tumulto terminé por descubrir al capitán uruguayo, Obdulio Varela, y casi a escondidas le entregué la estatuilla de oro, estrechándole la mano y me retiré sin poder decirle una sola palabra de felicitación para su equipo.
Edgardo Ghiggia, autor del segundo gol de Uruguay: "Solo tres personas fuimos capaces de silenciar el Maracaná; el Papa Juan Pablo II, Frank Sinatra y yo"
Alcides Edgardo Ghiggia recibió en la historia grandes reconocimientos por el gol en aquél partido. Falleció en 2015.La tragedia de Torino, grandes bajas para Italia
Italia era el campeón de los últimos dos mundiales (Italia 1934 y Francia 1938) e iba a defender el título en Brasil. Sin embargo, el 4 de mayo de 1949, casi un año antes del comienzo del mundial, el avión que trasladaba al plantel del Torino de Italia se accidentó y murieron 31 personas, incluídos 18 jugadores del plantel. El Torino era considerado el mejor equipo de Italia y había ganado 5 campeonatos consecutivos. La Selección de Italia, tenía en su 11 titular, 10 jugadores pertenecientes al club. Tras la tragedia, el seleccionado viajó en barco al mundial de Brasil y sin sus grandes figuras que habían fallecido en el choque.
El avión del equipo de Torino se estrelló contra el muro de contención en la parte posterior de la Basílica de Superga.La cantidad de goles por partido seguía siendo alta en aquél entonces. Había pasado en los mundiales anteriores y sucedió en este. Se marcaron 88 goles en 22 partidos, un promedio de 4 goles por encuentro.