El de hockey, el título que faltaba en las vitrinas de Duendes
Las chicas de Duendes lograron el campeonato máximo de la AHL a fines de 2021. Un título que quedará en la historia para las verdinegras. La palabra de dos referentes del plantel.
El hockey sobre césped de Duendes saldó una vieja deuda el 18 de diciembre pasado. Consiguió el título de la Asociación de Hockey del Litoral (AHL) al vencer en la final a Provincial. Un campeonato que las verdinegras habían visto festejar a muchas otras y nunca antes a ellas de manera oficial. En 1967, habían triunfado en un certamen del cual no quedaron registros.
Jaqueline Bauducco y Agustina Bouza, dos de las más grandes del grupo, hablaron con El Litoral sobre este logro obtenido en 2021. Bauducco comentó: “Con algunas de las chicas, las más grandes, fue un sueño que recorrimos muchos años para lograr. Después se sumaron las más pequeñas, a las cuales les llevo entre 12 y 15 años. Me queda una satisfacción enorme. Este iba a ser mi último año y me había propuesto conseguir lo que veníamos buscando hacía muchos años y siempre nos quedábamos ahí. En la entradita”. Por su parte, la ex leona dijo: “Fue un año muy especial porque logramos el campeonato que lo veníamos deseando y trabajando hace muchísimos años. Hace 10 años que veníamos esforzándonos y proyectando. Un proceso muy largo y de mucho crecimiento que también nos trajo crisis, discusiones a veces en el equipo, cambios de entrenadores, jugadoras que dejaban, perdiendo semifinales, finales”. “Este año realmente se dio todo absolutamente perfecto -agregó Bouza-. Fuimos primeras todo el año, el primer campeonato, después el Top 8 y después logramos ganar la súper final. Fue el año que más disfrute en lo deportivo. La pandemia sigue y eso es algo durísimo, pero a nosotras nos fue muy bien. Los dos últimos años de pandemia nos entrenamos un montón y ahí hicimos un salto de calidad muy grande en el equipo”.
Sobre las razones para que el club de barrio Las Delicias finalmente grite “campeonas” en el certamen regional, Jaqueline dijo: “Nosotros arrancamos el proceso con José Luis Oro como entrenador. Nos hizo levantar el nivel, cambiar nuestra forma de juego. Ahí empezó nuestro camino. Estuvimos muchos años con José y en 2020 cambió el cuerpo técnico, que quizás era el eslabón que nos faltaba para terminar de lograr ese objetivo (el entrenador principal pasó a ser Franco Romani). Se hizo obligatorio el hacer gimnasio. Yo, en tantos años que tengo de hockey, nunca me había entrenado como estos últimos dos años”.
Agustina arrancó mal 2021, pero logró terminarlo de la mejor forma: “Sufro problemas de tiroides. En enero me encontré con la imposibilidad de empezar porque la taquicardia no me permitía correr y me incorporé en marzo. En abril, nos volvieron a restringir el deporte. Estuve un mes y medio y ahí cortaron. Volvimos a empezar a fines de junio. Gracias a Dios tomé la decisión de seguir y no me equivoqué”.
Duendes Rugby Club se caracterizó en los últimos años por ser protagonista a nivel nacional en rugby masculino. El deporte de las chicas, el hockey, seguía sin poder festejar. “En lo personal era una mochila bastante pesada -confesó Bauducco-. Sentí un alivio enorme cuando se nos dio al fin el título. Ellos son sumamente exitosos. A nosotras nos hace muy feliz eso. Y también intentamos imitar. Los veíamos a ellos todos los días en el gimnasio. Ellos no aflojan nunca. O por ahí nosotras teníamos otra estructura que creo que fue el clic final que hicimos para poder conseguirlo. Eso nos ayudó mucho a llegar a ser campeonas”. Sobre este tema, Bouza aseguró: “En Duendes, siempre nos pasó eso. El rugby fue muy exitoso. Y nosotros la verdad que no. Nos costaba un montón. En el ’67, hubo un campeonato (ganado). Ahí jugó mi mamá. Nosotros siempre la cargábamos que era incomprobable porque habían pasado muchísimos años. Ahora se nos dio a nosotros en 2021. Todo esfuerzo trae su recompensa”.
La calidad como jugadora de Agustina Bouza pesó en las instancias finales, como marcó Jaqueline: “Yo le quemé el cerebro. La quería conmigo adentro de la cancha. Al final decidió arrancar. Es una jugadora que siempre fue una referente. Ella jugó un papel fundamental porque realmente es muy distinta a la mayoría de las jugadoras de Rosario. Creo que es única. A nosotros nos daba esa seguridad de saber que si ella agarraba la bocha o le pegaba a los cortos, la iba a meter. Te daba una tranquilidad tener una jugadora así adentro de la cancha”.
La ex leona aún no decidió si comenzará con la primera la pretemporada a fin de mes: “Lo estoy pensando. Empieza el 29 de enero. Tengo ganas de seguir. Por otro lado, pienso en mi familia. Hizo un esfuerzo muy grande. Uno trabaja todo el día, después a la noche va a entrenar. Lo voy a ver muy poco a mi hijo Alfonso que en marzo cumple 2 años. Es un esfuerzo grande desde lo físico, lo mental. Es una decisión muy difícil. Para mí el hockey es muy importante. Es una manera de vivir”. Si abandona el primer equipo, la idea de Bouza es jugar en cuarta división donde la exigencia es mucho menor. “No sería dejar de golpe”, comentó Agustina.
Repetir en 2022 es la premisa en el club de Las Delicias aunque será una tarea difícil. “La idea es obviamente repetir -dijo Bauducco-. Mantenerse no es nada fácil. Este equipo tiene unas ganas que nunca había sentido en ningún otro plantel de los que me tocó formar”.