El día acompañó lo que fue una gran fiesta del rugby. En Fisherton, se disputó la final de la edición 24 (son 25 años, pero en 2020 no hubo competencia por la pandemia) del Torneo Regional del Litoral.
Los de Fisherton derrotaron a CRAI por 26 a 18, tras un partido intenso y parejo.
El día acompañó lo que fue una gran fiesta del rugby. En Fisherton, se disputó la final de la edición 24 (son 25 años, pero en 2020 no hubo competencia por la pandemia) del Torneo Regional del Litoral.
Los protagonistas dentro de la cancha, estuvieron a la altura de las circunstancias, pero no caben dudas que lo que se vivió desde unas horas antes afuera, con los hinchas, fue impresionante.
El color, el calor y el aliento de “Jocketos” y “Gitanos” fue incesante. Siendo, en ese partido, la banda visitante, con “la del Sol” a la cabeza, los que jamás dejaron de alentar a su equipo.
Volviendo a los principales protagonistas, los jugadores, devolvieron una final de gran nivel entre el 1 y el 2 de la etapa regular. Fue para Jockey, por 26 a 18. El elenco rosarino se consagró por tercera vez en la historia del TRL.
Intensos. Así fue el primer par de minutos de la final. y en ese contexto, poco antes de los cinco, CRAI fue el primero en sumar de a cinco gracias a una fórmula (tal como nunca nos vamos a cansar de decir) “vieja”, pero, siempre que esté aceitada, efectiva. Line, obtención, empuje coordinado del maul y try de Simino. Los de la Autopista, arrancaban con el pie derecho.
Sobre los 10 minutos, había algo bien claro: un equipo era el que estaba decidido a poner todos sus sentidos, juego y cabeza en ganar el partido. Ese equipo era CRAI. Y lo confirmó con un nuevo ensayo. Gran “bomba” arriba de Ale Molinas que Jockey no pudo desactivar, y Franco Radín aprovechó ese pequeño “descontrol” y apoyó el segundo ensayo de su equipo.
El descuento de Jockey llegó. Fue por intermedio de un penal de Baronio, luego que Jockey pase por primera vez a jugar en campo rival.
Pero CRAI no le daba margen al equipo local. En la jugada siguiente, los de celeste y blanco “devolvieron gentilezas” a su rival por la misma vía.
El partido no daba respiro. Ataque profundo del Jockey, con Binner, el capitán, como abanderado cortando la defensa y asistiendo a Ferrario quien no tuvo inconvenientes para correr y apoyar casi debajo de los palos.
Después de ese permanente ida y vuelta en el juego y en los puntos, el partido entró en un “bache” en cuanto al rendimiento de los protagonistas. Seguramente, también exhaustos por ese intenso desgaste inicial.
Por este motivo es que el marcador no se modificó. 15 a 10 en favor de CRAI. Pero el partido prometía mucho más.
CRAI tuvo un comienzo ideal en el complemento, donde la presión al riva fue la clave. Así fue como, al minuto, Beltramino sumó su segundo penal y puso a su equipo arriba por 8.
Más allá del buen inicio “Gitano”, enfrente estaba Jockey. Y jamás a un equipo así hay que darlo por vencido. Eso ocurrió un par de minutos después. Jockey tuvo una buena obtención en el line, abrió la pelota y Dogliani entró al ingoal sin mayores inconvenientes.
Para colmo de males para CRAI, penal en contra luego de la conversión de Baronio por un tumulto. Y el apertura que jugó la primera mitad del año en Dogos, desde mitad de cancha, puso el 20 a 18 parcial. En poco tiempo, el local daba vuelta un partido cada vez más parejo.
Un nuevo penal de Baronio estiraba la ventaja de los “jocketos” a cinco. A falta de diez minutos, Jockey empezó a jugar “su partido”. Contando, muchas veces, con la “colaboración” de errores no forzados de su rival. Errores que otra vez posicionaron a los locales en ataque, generaron una nueva infracción y Baronio que empezaba a hacer valer su puntería.
De a poco, Jockey empezó a sentirse cada vez más cerca de conseguir su tercer título en el TRL, tras las consagraciones de 2001 y 2017.
Los últimos minutos fueron de “inteligencia táctica” pura. Sin desesperarse, y sabiendo jugar ese último segmento del partido.
CRAI quedó muy cerca. La “bronca” durará un tiempo. No debe ser mucho porque se viene el Torneo del Interior en breve y hay que “cambiar el chip” rápido.
Hay algo cierto y que todo CRAI debe tener en claro que se resume con una frase hecha, muy usada, pero que no pierde vigencia: “el árbol no debe tapar el bosque”.
Luego de una temporada difícil y sufrida en 2023, este año los de la Autopista tuvieron un rendimiento casi ideal. Dominando de punta a punta en la etapa regular y llegando donde querían: la final. no se logró el objetivo, es cierto. Pero deben tener en claro que dejaron todo y un poco más por conquistarlo.
El deporte, siempre da revancha…
Jockey: Guido Cella, Alejo Pereyra Tauzy y Kyan Collins (Bellotti); Ignacio Gallo y Agustín Cansino; Manuel Santi, Emiliano Ferrari y Sebastián Binner (c); Alejo Sugasti y Juan Baronio; Ignacio Vergara Oroño, Ignacio Dogliani, Manuel Lluch y Guido Pedregoza; Joaquín Fanjul.
Ingresaron: Orsi, Bellotti, Carloni, Baraldi, Cansino, Lovell, Vergara, Alvarado
CRAI: José Canuto (Capitán) (Garibay), Luciano Simino (Abraham) y Joaquín Lerche (Berón); Mariano Torres (Ferreyra) y José Dogliani (Labath); Tomás Schinner (Piermarini), Manuel Bernstein y José Gálvez; Justo González Viezcas (Alberto) y Alejandro Molinas; Franco Radín, Justo Barcojo, Juan Cruz Fleitas y Mateo Fauda; Facundo Beltramino.
Tantos de Jockey: tries de Ferrario y Pedregoza; dos conversiones y tres penales de Baronio
Tantos de CRAI: tries de Simino, Radín; una conversión y tres penales de Beltramino
Árbitro: Damián Schneider
Asistentes: Longobardi y Vega.
4 y 5: Prats y Masetti.
TMO: Mauro Rivera.
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