La carrera del All-Star NASCAR terminó de la peor manera: una brutal pelea entre dos equipos tras el accidente de sus pilotos, que involucró incluso a los mecánicos de ambas escuderías.
El tenso cruce entre Kyle Busch y Ricky Stenhouse Jr, terminó en escándalo tras la competencia de las estrellas de este fin de semana, en el North Wilkesboro Speedway. A la pelea se sumaron los equipos de los pilotos involucrados.
La carrera del All-Star NASCAR terminó de la peor manera: una brutal pelea entre dos equipos tras el accidente de sus pilotos, que involucró incluso a los mecánicos de ambas escuderías.
Al igual que en todas las ligas americanas, el All-Star es un fin de semana que no cuenta para el campeonato y se espera que sea un espectáculo para los aficionados. Sin embargo, las tensiones acumuladas a lo largo de toda la temporada de la NASCAR pasaron factura.
El óvalo North Wilkesboro Speedway celebró por segundo año consecutivo el All-Star de la NASCAR, donde los mejores 20 pilotos luchaban por alcanzar el premio de un millón de dólares.
Un incidente al principio de la carrera, cuando apenas se había completado la primera vuelta, entre Ricky Stenhouse Jr y Kyle Busch, provocó una guerra en la pista que posteriormente se extendió hasta el final de la carrera, involucrando a mecánicos y operarios de ambos equipos.
Durante la primera vuelta de la carrera, Busch rozó el muro exterior del óvalo. El piloto, creyendo que la maniobra había sido culpa de Stenhouse, tomó la ley por su mano y golpeó al coche 47, lo que provocó que quedara fuera de la carrera en las primeras de cambio.
Indignado por lo ocurrido, Stenhouse buscó llevar el incidente ocurrido en la pista fuera de ella. Al término de la carrera, se acercó a donde estaba Kyle Busch y comenzó a recriminarle la maniobra. La tensión creció tanto que ambos terminaron a puñetazos frente a las cámaras.
La pelea fue aumentando en intensidad y los mecánicos y operarios de ambos equipos también se vieron involucrados en la disputa. Al final, todo quedó en ese momento de tensión, pero la NASCAR tomará medidas tras lo sucedido.
A pesar de este episodio, en el All-Star de la NASCAR, Joey Logano se coronó como campeón y ganador del premio de un millón de dólares en una carrera muy competida. Denny Hamlin no le puso las cosas fáciles y quedó segundo por tan solo 0,6 segundos.
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