Jueves 18.11.2021
/Última actualización 17:11
Rayito. Así le dicen a Lucas Yori, un esperancino de 9 años que encontró en el karting una gran pasión que parece será para siempre. Lucas es 3era.generación de una familia muy vinculada al automovilismo. Su abuelo y su papá fueron pilotos; y de hecho es a su padre, Adrián Yori a quien le dicen "Rayo".
En las redes sociales, se viralizó un video de un niño ganando una carrera de karting. En él también se observa el trayecto recorrido y la llegada, que generó muchísima emoción porque su padre sale corriendo a abrazar al niño y felicitarlo en medio de una profunda emoción y alegría del chico. El protagonista del video es Lucas Yori.
Las imágenes fueron compartidas por Rugido de Motores.
"En realidad ese abrazo que se ve en el video, esa felicidad que sintieron ellos y nosotros, fue porque Lucas compite gracias a un enorme esfuerzo a pulmón de toda la familia. Él no tiene, como otros chicos que corren, una persona que le acomode el chasis, un motorista propio… Todo lo que necesita el Karting de Lucas lo hace Adrián, su papá, con los conocimientos que adquirió mientras fue corredor. Por eso la emoción, por todo el esfuerzo que hicieron juntos para poder participar de la carrera. Y justo salió primero, así que imaginate que explotábamos de felicidad", cuenta Tamara Tossone, la mamá de Lucas.
Archivo El Litoral.Foto: Archivo El Litoral.
Nació una pasión en cuarentena
El encierro de meses que hubo el año pasado permitió a muchas personas descubrir su hobby. Y en Lucas Yori despertó un interés hasta ahora desconocido: el de los karting.
En diálogo con ¡MIRÁ! contó que su papá, también en el marco de la pandemia, tomó la decisión de dejar de correr. Bastó que Lucas viera los dos kartings de su padre estacionados en un rincón para decirle "Papi, quiero correr". Y bajo la aprobación de ambos padres, le armó uno y de a poco empezó a nacer Rayito.
Archivo El Litoral. Herencia del abuelo. No hay dudas de que Lucas heredó la pasión por el automovilismo de su abuelo (en la foto), quien también fue piloto.Herencia del abuelo. No hay dudas de que Lucas heredó la pasión por el automovilismo de su abuelo (en la foto), quien también fue piloto.Foto: Archivo El Litoral.
"Para correr uso unas botas y un traje especial, casco, cuellera, chaleco de protección y guantes. Compito en la categoría 110 Escuela, que va desde los 6 a los 12 años. El karting no tiene caja de velocidad y lleva un motor 110", manifiesta.
¿A qué velocidad puede ir un karting? Ante esa pregunta, el padre de Lucas, Adrián Yori, explicó que eso depende del trazado que tenga cada circuito. Los circuitos donde ellos corren son de tierra y un karting puede llegar alcanzar los 100 km por hora en línea recta", dijo.
En plena carrera a Lucas no se lo puede distinguir si no fuera por el número de su Karting . Usa el 48. Y la razón, cuanta él, es porque con ese número corre en la Fórmula 1 el genial Jimmie Johnson, uno de sus ídolos junto a Max Verstappen.
Archivo El Litoral.Foto: Archivo El Litoral.
Consultado sobre la previa de una carrera, el esperancino que va a tercer grado refirió que busca concentrarse. "Mientras estoy esperando la largada, voy repasando en mi cabeza el circuito, las curvas y las maniobras que tengo que hacer. Obviamente siento nervios y ansiedad, pero lo disfruto".
Hasta el momento, en muy poco tiempo, Lucas corrió en 5 circuitos: Colonia Belgrano, San Justo, San Carlos, Humboldt y Esperanza, su ciudad natal. En San Justo hizo podio logrando el primer puesto de su categoría y en Esperanza un tercer puesto. Próximamente Lucas tiene previsto correr en Santa Clara. Y siempre sabiendo que lo más importante no es competir ni subir al podio sino correr con responsabilidad y disfrutar.