El 5 de marzo de 1932 se inauguró oficialmente el Luna Park, un estadio que de inmediato se convirtió en una referencia ineludible de la ciudad de Buenos Aires y en el escenario ideal para los grandes acontecimientos del boxeo argentino. El “Luna” nació por una iniciativa de los empresarios Ismael Pace y José “Pepe” Lectoure. Sin embargo, en sus primeros tiempos no se realizaban combates de boxeo, sino que se ofrecían las famosas representaciones de teatro al aire libre. Al principio estaba ubicado en el centro donde ahora está el Obelisco porteño.
El sueño de Pace y “Pepe” Lectoure era muy caro pero no imposible. Fue entonces que el primero hipotecó todos los bienes de su madre y también las alhajas, mientras que su socio aportó hasta el último peso ahorrado para cristalizar el emprendimiento. En febrero de 1932, cuando prácticamente el estadio estaba concretado, se organizaron grandes bailes de carnaval para recaudar los primeros pesos para solventar semejante obra.
Hasta que el 5 de marzo se concretó el sueño y el Luna Park fue presentado en sociedad, con la pelea entre los medianos argentinos Amílcar Cafferata y Jack Canavessi.
Tenés que leerLos campeones mundiales santafesinos y el Luna ParkFue en el Luna Park donde en 1938 se llevó a cabo un acto Nazi y en 1982 recibió al Papa Juan Pablo II; donde en 1936 se lo despidió a Carlos Gardel y en 1976 a “Ringo” Bonavena; donde en 1944 el entonces secretario de Trabajo y Previsión, Coronel Juan Domingo Perón (48 años), conoció a Eva Duarte (24), en un festival a beneficio de las víctimas del terremoto de San Juan y al año siguiente albergó al Partido Comunista argentino en el primer acto público tras tres décadas de prohibición.
Fue en el Luna Park donde en 1949 desembarcó por primera vez el Holiday on Hice, el espectáculo sobre hielo más impactante del planeta que varias veces repitió su llegada; y en el que en 1960, en plena Guerra Fría entre el mundo capitalista y el socialista, tres compañías de circo de países del este europeo mostraron sus extraordinarias rutinas: el Circo de Moscú, el Circo de Hungría y el Circo de Berlín.
Fue en el Luna Park donde en 1975, Cahrly García y Nito Mestre reunieron a 30.000 personas en dos noches para presentar el mítico show Adiós Suí Géneris; y en donde en 1981, también en dos veladas de casi 20.000 espectadores cada una, se presentó “La Voz”, Frank Sinatra.
Pero volviendo al deporte, fue en el Luna Park donde en 1950 se realizó el primer campeonato mundial de básquetbol, en el que Argentina se consagró campeón, siendo sede nuevamente en 1990. También recibió a los mundiales de vóleibol de 1982 y 2002. También fue escenario de festejos, como por ejemplo el del mejor jugador de fútbol de la historia, cuando en 1989, después de años de convivencia, Diego Maradona y Claudia Villafañe oficializaron su relación casándose y armando una fiesta como pocas.
Pero quien sin dudas le ha dado prestigio al Luna fue Juan Carlos Lectoure, quien falleció el 2 de marzo de 2002, tres días antes de que el mítico estadio cumpliera 70 años. El boxeo lo catapultó a “Tito” cuando de su mano se coronaron campeones mundiales Horacio Accavallo, Nicolino Locche, Carlos Monzón, Miguel Ángel Castellini, Sergio Víctor Palma, Santos Benigno Laciar, Gustavo Ballas y Pedro Décima.
De todos modos, en 1987 Lectoure tomó una drástica decisión: cerrar las puertas del Luna al boxeo para transformarlo en un gran teatro en el cual brillaron espectáculos musicales de primer nivel, y como siempre, se presentaron cantantes y grupos musicales de prestigio nacional e internacional.
Luego de la muerte de Lectoure, el Luna continuó siendo sede de espectáculos y presentaciones de figuras de primer orden, pero además, Esteban Livera, sobrino de Tito, se hizo cargo de la administración del estadio y con él el boxeo recuperó a su “Catedral”. Desde que Livera “regentea” al Luna Park, se llevaron a cabo varias veladas boxísticas en las cuales se han disputado muchos títulos mundiales, con boxeadores argentinos como principales protagonistas.
No hay dudas, todo pasó por el Luna Park, convirtiéndose en el centro cultural y deportivo más importante de nuestro país y uno de los más reconocidos a nivel mundial. Los más relevantes acontecimientos de los últimos 70 años pueden contarse repasando la historia de esta sala: actos religiosos, políticos, artísticos, deportivos y sociales forjaron su trayectoria.