El ministro de Salud bonaerense, Daniel Gollán, reconoció este lunes que si las medidas restrictivas para detener la segunda ola de coronavirus son más "drásticas", también deberían incluir la suspensión del fútbol.
"Si la idea es hacer algo drástico, tiene que ser algo drástico para todos, incluso para el fútbol" dijo Daniel Gollán, ministro de Salud de la provincia de Buenos Aires.
El ministro de Salud bonaerense, Daniel Gollán, reconoció este lunes que si las medidas restrictivas para detener la segunda ola de coronavirus son más "drásticas", también deberían incluir la suspensión del fútbol.
En medio de los brotes constantes en los planteles de los clubes de la Liga Profesional y el ascenso, Gollán admitió que la drasticidad debería implicar a todas las actividades.
"Si empezamos con las excepciones todo el mundo empieza a decir ‘ah, no hay clases, pero hay fútbol’. Si bien es una actividad que tiene protocolos, si la idea es hacer algo drástico, tiene que ser algo drástico para todos, incluso para el fútbol", explicó el Ministro, en declaraciones televisivas.
Por el momento, el fútbol mantiene su competencia con los protocolos aprobados oportunamente por el Ministerio de Salud, aunque tuvo que adaptar sus horarios al último DNU presidencial que restringió la circulación en horario nocturno en la región del AMBA.
Por eso, AFA y la Liga Profesional no permiten que los encuentros se inicien posterior a las 18:00 en ese territorio, restructurando sus programaciones, con excepción de la Copa Libertadores y Sudamericana, tras un acuerdo con la Conmebol.
Lo cierto es que, día a día, los casos de coronavirus en los planteles de fútbol se replican y promueve brotes que afectan no solo a los futbolistas, sino también a sus familias, lo que preocupa ante la escalada de los números de la pandemia.
Con información de NA