Mientras el serbio Novak Djokovic continúa su puesta a punto para el primer Grand Slam de la temporada, las autoridades del Gobierno de Australia investigaban una posible mentira en su declaración de ingreso al país, el miércoles pasado.
Mientras el serbio Novak Djokovic continúa su puesta a punto para el primer Grand Slam de la temporada, las autoridades del Gobierno de Australia investigaban una posible mentira en su declaración de ingreso al país, el miércoles pasado.
Así lo informó el diario "The Sydney Morning Herald", que detalló que, en la Aduana, afirmó que no realizó ningún viaje a otro país 14 días antes de su ingreso a Australia.
En el documento, Djokovic marcó la casilla "no" en la parte donde le preguntaban si había realizado algún viaje en los 14 días previos de su visita al país oceánico.
En su entrevista con el agente de aduanas, el serbio confirmó que la declaración fue completada por un agente de la federación de tenis de Australia, organizadores del Abierto.
Según las fotos publicadas en sus redes, el tenista pasó la Navidad en Belgrado, desde allí se trasladó a España, donde abordó un avión hacía la ciudad australiana, pero ese vuelo tuvo trasbordo en Dubai.
Las leyes fronterizas del país oceánico consideran que es un delito grave una declaración falsa y eso puede conllevar una pena máxima de hasta doce meses de cárcel.
Djokovic estuvo retenido cinco días en un hotel de refugiados de Melbourne y liberado tras la decisión de la Justicia de validar su exención sanitaria pese a no estar vacunado contra el coronavirus, por haber contraído la enfermedad el pasado 16 de diciembre.
"Permanezco enfocado en competir en el Australian Open. Vine aquí para jugar en uno de los torneos más importantes que tenemos frente a aficionados maravillosos", expresó "Nole" en una publicación en sus redes sociales.