Miércoles 19.10.2022
/Última actualización 20:39
Ganó cuando tenía que ganar. Goleó cuando era su única salvación. Sufrió de más en la final. Fue campeón por primera vez en la historia. La Selección Argentina se quedó con el Mundial 1978 organizado en el país bajo un gobierno de facto tras el Golpe de Estado de 1976. Sin embargo, pese a varias versiones que hablan de un supuesto arreglo, el conjunto dirigido por Cesar Luis Menotti hizo los méritos deportivos para alzar el trofeo.
Corría el segundo tiempo de la final entre Argentina y Holanda. Ya en el segundo tiempo, cuando el reloj marcaba 45 minutos y algunos segundos, Rensenbrink anticipó a Fillol y silenció al Monumental. El sueño argentino parecía diluirse pero apareció “la suerte del campeón”. La pelota picó y dio contra el palo. Hubiese sido el 2 a 1 que sentenciaba la historia a favor de “La Naranja Mecánica”. Sin embargo, el partido fue a tiempo suplementario y la historia terminó como todos sabemos: Kempes figura y la Copa del Mundo se quedaba en el país.
Previo a ese partido, Argentina ya había demostrado que quería y tenía con qué ganar el Mundial. Comenzó su camino ante Hungría con un flojo rendimiento pero una justa victoria por 2 a 1, luego venció a Francia por el mismo resultado y en la última jornada del grupo cayó ante Italia logrando así el segundo puesto y el pasaje a la segunda fase.
En esta instancia cayó al grupo B con Brasil, Perú y Polonia. Todo parecía color de rosas en el comienzo de la segunda fase. La victoria por 2 a 0 ante los europeos le daban tranquilidad a la Selección para enfrentar a Brasil. Sin embargo, el empate en 0 en el “Clásico de las Américas” y la victoria “brazuca” por 3 a 1 contra Polonia, obligaban a Argentina a ganarle por 4 goles a Perú para acceder a la final. Y, como dice el principio de esta nota, “goleó cuando era su única salvación”.
El 21 de junio de 1978 en el Gigante de Arroyito, estadio de Rosario Central, Argentina venció por 6 a 0 a Perú en un partido enmarcado por sospechas nunca comprobadas que pretendieron mancillar un verdadero logro futbolístico del seleccionado local. Así, la Selección Argentina accedió a su segunda final en una Copa del Mundo. El 25 de junio en el Monumental, vencería a Holanda por 3 a 1 y se consagraría campeón por primera vez en la historia.
La ausencia de Cruyff
El mito popular dice que Cruyff, estrella del Mundial 1974, se ausentó en el torneo organizado en Argentina en señal de protesta por la dictadura militar. Lo cierto, contado por él mismo, es que decidió no jugar porque no estaba al nivel que ameritaba.
“La verdad es que no fui al Mundial de la Argentina porque yo ya había decidido terminar con mi carrera deportiva y para jugar un mundial hay que estar, pongamos, 200% motivado. Si no, no sale bien. No es cierto que mi ausencia fue en método de protesta contra la dictadura”, le contó el jugador holandés a José Ignacio Lladós en el libro “El circo de los pueblos”.
Holanda al igual que otras selecciones europeas también pensó en hacer un boicot al Mundial en Argentina pero no fue así.
El dramático Mundial de Leopoldo Luque
El 6 de junio de 1978 Argentina debía enfrentar a Francia por el segundo partido de la fase de grupos. Aquel día, el santafesino Leopoldo Luque fue goleador, héroe y figura. Durante la mañana en el viaje desde la provincia de Santa Fe hacia el Monumental su hermano se accidentó y falleció. El jugador de la selección se enteró de la noticia recién al otro día.
En el partido, Luque tuvo una actuación brillante. Generó el penal que Passarella cambió por gol para el 1 a 0 argentino y marcó el segundo tanto que le dio la victoria y la clasificación a segunda fase al combinado nacional.
Por si fuera poco, sobre el final se le salió el codo de lugar. Francia atacaba y Argentina ya había hecho los dos cambios. Luque fue a la zona de vestuarios, le acomodaron el codo, le vendaron el brazo y volvió a la cancha. “Me mandaron para el vestuario pero hice dos pasos para la derecha, me acordé de mi familia, y cambié de rumbo e ingresé al campo, porque el Flaco ya había hecho los dos cambios y no podíamos quedarnos con 10”, contó el atacante acerca de esa situación.
Así terminó Luque la final del Mundial de 1978.Al otro día, cuando Luque se enteró del fallecimiento de su hermano decidió irse de la concentración para estar con su familia. En un principio sin intenciones de volver a jugar en aquel Mundial pero casi como un suplicio, los jugadores argentinos salieron a la cancha el 10 de junio para el partido contra Italia con una bandera que decía “Leopoldo te esperamos”.
El jugador santafesino volvió al plantel tras el partido con Polonia: jugó en el empate ante Brasil, marcó dos goles en la goleada a Perú y fue titular en la final ante Holanda. A causa de coronavirus, el 15 de febrero de 2021 falleció en Mendoza uno de los privilegiados santafesinos que fueron campeones del mundo.
El Mundial y sus sorpresas
Por primera vez se anotaban más de 100 equipos en las Eliminatorias mundialistas. Solo 14 lograron llegar al Mundial. Los dos restantes eran Argentina (anfitrión) y Alemania (último campeón). En esa cacería por la clasificación, quedaron afuera sorpresivamente Inglaterra, Checoslovaquia y Unión Soviética. Ganar la Copa del Mundo ya comenzaba a ser una verdadera travesía.
Fue el último Mundial que contó con sólo 16 participantes y se respetó el formato usado en 1974: 4 grupos de 4 equipos donde avanzaban los dos primeros de cada uno y eran divididos en otras dos zonas de 4. Los primeros de cada bombo jugaban la final.
Brasil tuvo una gran participación en el Mundial de 1978. Lo curioso es que, aún sin perder ningún partido no logró clasificarse a la final del mundial.
Francia jugó un partido con la camiseta de Kimberley de Mar del Plata. La transmisión televisiva en blanco y negro no dejaba distinguir las camisetas entre Francia y Hungría por lo cual, la selección de Michele Platini tuvo que usar la indumentaria del club marplatense.
El “Matador”, Mario Alberto Kempes fue el máximo artillero del torneo en 1978. Con solo 6 tantos logró ser goleador de aquel Mundial pero todos tuvieron un valor más que especial. Le hizo 2 a Polonia para comenzar ganando en la segunda fase, 2 a Perú la noche que Argentina necesitaba golear y 2 a Holanda nada más y nada menos que en la final.
El goleador del torneo, Mario Alberto Kempes y su socio Leopoldo Luque.El abrazo del alma
La imagen recorrió el mundo y continúa siendo icónica. Una vez consumada la victoria Argentina en la final, con los carteles mostrando la leyenda “Argentina campeón”, un hincha ingresó al estadio y se arrodilló junto a Filliol y Tarantini.
La imagen que refleja el "Abrazo del Alma"Víctor Dell'Aquila, el hincha protagonista de esa imagen había perdido sus brazos en un accidente a los 12 años de edad. Aquel 25 de junio se unió al abrazo de los jugadores argentinos arrodillado junto a ellos y apoyando las mangas de su camiseta.
El Mundial se jugó en 6 estadios argentinos. El Monumental y el Amalfitani en Buenos Aires, el estadio Ciudad de Mendoza, el Chateau Carreras de Córdoba, el Gigante de Arroyito de Rosario y el Estadio Mundialista de Mar del Plata.
El plantel argentino
Los números en las camisetas fueron repartidos por orden alfabético.
Arqueros: 5 Ubaldo Fillol - 3 Héctor Baley - 13 Ricardo La Volpe
Defensores: 7 Luis Galván - 11 Daniel Pedro Killer - 15 Jorge Olguín - 18 Rubén Pagnanini - 19 Daniel Passarella - 20 Alberto Tarantini - 17 Miguel Oviedo
Mediocampistas: 8 Rubén Galván - 1 Norberto Alonso - 2 Osvaldo Ardiles - 6 Américo Gallego - 12 Omar Larrosa - 21 Daniel Valencia - 22 Julio Villa
Delanteros: 4 Daniel Bertoni - 10 Mario Alberto Kempes - 14 Leopoldo Jacinto Luque - 16 Oscar Alberto Ortiz - 9 René Houseman.