(Enviado Especial a Doha, Qatar)
El santafesino contó lo que sintió cuando entró con la Copa del Mundo para dejarla en el atril antes de que se la den a Messi. Dijo que “Infantino se la pasó filmando a la hinchada argentina, estaban todos impactados”.
(Enviado Especial a Doha, Qatar)
“Disfruté mucho este momento, no le puedo pedir más nada al fútbol”. Así de directa fue la primera frase que soltó Nery Pumpido cuando habló de ese momento tan especia que vivió el domingo en Lusail, ingresando junto al Checho Batista con la Copa del Mundo para depositarla en el atrio, la que luego fue retirada por Lionel Messi para desatar la alegría incontrolable de los campeones del mundo. Y a Nery, ese momento mágico, impensado, inesperado y colosal para él, se suma a lo que vivió el 25 de noviembre, en pleno Mundial, cuando se produjo el homenaje de la Conmebol a Maradona e Infantino dijo: “Cuando Nery me invitó a venir a este homenaje, dudé un segundo y medio en decirle que sí”. Y pensar que Argentina había perdido el primer partido ante Arabia Saudita, en ese momento, y las dudas pesaban sobre un plantel que se repuso e hizo caso a la frase de su capitán: “No vamos a dejar tirados a los argentinos”.
-¿Qué se vivió en el vestuario, Nery?
-El festejo fue diez puntos, yo tengo relación con los jugadores, en la cancha saludé a Scaloni y al Dibu, Messi estaba contentísimo, intercambiamos palabras, me dijo que quería volverse enseguida a Argentina para festejar y algunos no sabían que la Conmebol le entregó 10 millones de dólares a la Afa, que se suman a los 42 millones de la Fifa.
-Me sorprendió la forma en que Alejandro Domínguez se “embanderó” con Argentina cuando quedó eliminado Brasil…
-¡Por eso peleó tanto para hacer la Copa América del año pasado, todavía en pandemia!!... Fue fundamental la Copa América de Brasil para este logro. Recuerdo que Alejandro Domínguez me dijo que íbamos a perder plata, pero él quería que se jugara el torneo porque veía que era clave para esto. Sudamérica no era campeón desde hacía 20 años y él quería que las selecciones lleguen bien preparadas al Mundial.
-¿Te gustó la final?
-¡Me encantó…! Para nosotros fue sufrida… ¿Sabés qué pasa?, hay muchas cosas que se dicen que no son reales. Nos metieron en la cabeza que el fútbol de hoy es como lo juegan los europeos y fijáte cómo se jugó la final, dos equipos verticales y no con ese toquecito intrascendente… La final fue extraordinaria, con virtudes y errores fue una de las mejores finales que se vieron. Los que no eran franceses o argentinos deben haber disfrutado del partido. Los dos equipos no se limitaron a tener la pelota en forma intrascendente. Tuvieron un fútbol que no es el que decían que imperaba en el mundo entero.
-¿Qué pasó en esos dos minutos de desconcierto?
-Fue asombroso lo de Francia en el primer tiempo... ¡Rarísimo!... Era para hacerles un gol más y chau... Jorge Valdano me decía en el palco que veía muy raro que ganemos una final sin sufrir. Y al final sufrimos… Fue importante el ingreso de Di María. Desde el minuto de juego nos dimos cuenta de que se iba a jugar el partido por ese lado y fue un acierto de Scaloni.
-¿Y la tapada final del Dibu Martínez?
-Los grandes arqueros aparecen en los momentos clave y así es Dibu Martínez. Quizás no tuvo continuidad o volumen de atajadas, pero fue muy importante para que Argentina pudiera ganar algunos partidos.
-¿Te lo imaginaste a Maradona en la cancha?
-Con los muchachos nos preguntábamos qué habría pasado si Diego estaba en el estadio y seguro que estaba revoleando una camiseta en la tribuna. Pero estoy seguro de que en algún lado estaba, seguro que estaba…. El partido tuvo de todo, fue espectacular.
-¿Te fijaste la cantidad de hinchas argentinos que no eran argentinos?
-Lo de la gente fue extraordinario... Yo estaba en el palco oficial y los dirigentes, con Infantino a la cabeza, se quedaban en la tribuna filmando a la hinchada nuestra. Ellos se dieron cuenta de que el espectáculo estaba afuera y con nuestra hinchada. Y esto impulsa el Mundial de 2030… Con este entusiasmo y esta gente, va a ser un Mundial extraordinario.
-¿Quién apuntás como figura de la final?
-Viéndolo en la cancha, lo de MacAllister fue extraordinario. No sólo por lo que manejó, sino porque él se mostraba para que se la den cuando Messi no podía entrar en juego… Fue la revelación del equipo y el jugador que me asombró. Fue el jugador más regular que tuvo Argentina.
-¿Y Julián Álvarez?, ¿y Enzo Fernández?
-Hay por lo menos ocho jugadores que son de Scaloni… Para mí el técnico es un artífice muy grande de esta victoria. Una cosa es ser técnico de selección y otra cosa es ser técnico de equipo… Y no me digan que manejaba un Fiat 600 y le tiraron la selección… Scaloni no corrió en Fiat 600, corrió en Ferrari. Es mentira eso de que no tenía experiencia porque estuvo ocho años en la selección… No sos técnico en la selección, sos seleccionador.
-¿Qué fue lo mejor que hizo?
-Fue el más vivo para manejar el grupo, hizo el recambio, hizo todo lo que había que hacer y eso demuestra que tenía experiencia… Martino, Bauza, Sampaoli tenían experiencia y les fue mal… Muchos se equivocaron en lo que decían de Scaloni. Yo estuve diez años en la selección y lo digo porque sé cómo hay que manejarse. Y Scaloni sabe manejarse. Algunos querían trabajar tácticamente dos o tres días y no se puede porque no hay tiempo. Scaloni estuvo ocho años en la selección y supo lo que hacía… Rotó jugadores, puso algunos que no conocía nadie y uno de los grandes méritos que tuvo el equipo es el entrenador. Ramón Díaz debutó en River y ganó todo, a Gallardo le pasó casi lo mismo porque había dirigido un solo equipo… Scaloni fue de lo mejor que tuvo este proceso.
-¿Y Tapia?
-¿Chiqui?... Chiqui fue otro de los artífices y lo primero que hice fue ir a abrazarlo en el campo de juego... A Tapia hay que hacerle otro monumento. Este se la jugó a muerte con la selección y ganó más que Grondona, le tapó la boca a más de uno, lo subestimaron y es más inteligente que varios que tienen que aprender. Tuvo contras de todos lados… ¡Hasta del Gobierno!... Y de los dos, el de Macri y el de ahora. Y sin embargo, siguió al frente.
-Volvamos a lo que viviste el domingo…
-Mirá, este Mundial lo voy a recordar de por vida por todos los momentos vividos. En lo particular, fue extraordinario. Entrar con la copa del mundo es algo que nunca en la vida lo había pensado. Tenía unos nervios bárbaros cuando Alejandro Domínguez me lo comunicó, algo que hizo en el mismo estadio... ¡Mirá el teléfono!... Estalla de llamados y mensajes porque me vio todo el mundo.
-¿Qué enseñanza futbolera nos dejó?
-Que nos meten mucho fútbol europeo, análisis de fútbol europeo, todo fútbol europeo… Y se terminaron muchas cosas con este Mundial… ¡Basta muchachos, basta de copiar!... Pensemos en lo nuestro, hagamos la nuestra. Los cuatro equipos que llegaron a la semifinal no son de tenencia de pelota. Los de tenencia están todos descansando y de vacaciones, sobre todo España. En Sudamérica nos llenaron de técnicos españoles y así estamos… El otro día, Mauro Silva me decía que fue a un partido, creo que de Bélgica… Y me contó que se dormía… No vio un uno contra uno por los laterales nunca. Hace mucho tiempo que vengo viendo esto y tenemos que llegarle a los instructores para que no le saquen la gambeta a los chicos. Quieren que todos jueguen a dos toques. Hoy es todo para atrás, nadie gambetea, nadie juega uno contra uno. Por eso me alegra el partido que vimos… Y más tratándose de una final.