Jueves 15.7.2021
/Última actualización 6:05
Cómo no destacar que Noel Barrionuevo disfrutará en Tokio nada menos que de sus cuartos Juegos Olímpicos, hecho que la transforma en la integrante del Seleccionado Argentino de Hockey con mayor experiencia en la materia. En la previa de otro gran desafío, la experimentada defensora salteña habló sobre sus inicios y también sobre lo que imagina encontrar en la capital nipona.
Pasaron 13 años desde su debut olímpico y casi 15 desde que vistió por primera vez la camiseta de Las Leonas. Bejing 2008 fue para "Noe" el primer contacto con la historia del olimpismo. Allí, con 24 años, se colgó su primera medalla: la de bronce, después de que Argentina se impusiera ante Alemania por 3 a 1 y fuera justamente ella la encargada de sellar la victoria con un gol de corner corto, a siete minutos del final.
* "En mi primer JJ.OO. era todo nuevo; recuerdo que era muy curiosa y quería saber todo. Le preguntaba a las más grandes que se hacía; fue una experiencia inolvidable", recuerda emocionada. Luego llegaría Londres 2012 y una nueva medalla olímpica, la de plata. Si bien en Río de Janeiro 2016 Argentina no tuvo una buena performance, en Tokio buscará revancha.
* "Estoy muy contenta, con muchas sensaciones lindas y disfrutando. Van a ser mis últimos Juegos, así que estoy disfrutándolo mucho. Lo vivo diferente, ya sé lo que es una Villa Olímpica; intento transmitirle a las más chicas tranquilidad y que disfruten cada momento", agregó.
En un año de mucha incertidumbre producto de la pandemia de Covid-19 que obligó a posponer los Juegos un año, Barrionuevo asegura que ve muy bien al equipo: "Estamos muy bien y eso es lo más importante para llegar bien a estos torneos. Nos preparamos bastante. Fue una preparación muy dura por la pandemia, con poco roce internacional, pero pudiendo realizar varias concentraciones. Vamos a llegar de la mejor manera y con mucha actitud".
En cuanto al debut ante Nueva Zelanda, previsto para el 25 de julio (00.15 de nuestro país), confesó: "Me lo imagino con mucha ansiedad y nerviosismo. Los primeros partidos siempre son difíciles y el debut siempre cuesta, pero después uno ya se va soltando y sintiéndose más cómoda".