Comenzó el mundial de rugby para Los Pumas. Este sábado, en el estadio Velodrome de la ciudad de Marsella, los conducidos por Michael Cheika tuvieron su estreno ante Inglaterra.
George Ford marcó todos los puntos de su equipo que jugó casi todo el partido con uno menos por la temprana expulsión de Curry. El seleccionado argentino estuvo desorientado, sin ideas claras. El 22 de septiembre, el rival será Samoa.
Comenzó el mundial de rugby para Los Pumas. Este sábado, en el estadio Velodrome de la ciudad de Marsella, los conducidos por Michael Cheika tuvieron su estreno ante Inglaterra.
Claro está, que no fue el esperado. No por el resultado (27 a 10 para la Rosa), sino la forma. Este sábado por la noche (aquí en Francia) se vio a un seleccionado argentino totalmente perdido, sin ideas, con una conducción casi nula, tanto dentro como fuera de la cancha por parte de los entrenadores que no pudieron encontrar las soluciones a los inconvenientes.
De lo ocurrido, en la cancha, fueron testigos 63.118 espectadores.
La primera alarma para Los Pumas, ocurrió casi ni bien iniciado el partido. Choque de cabezas entre Tom Curry (se fue amonestado) y Juan Cruz Mallía, que tuvo que ser reemplazado temporariamente por Matías Moroni, debido a un importante corte en una de sus cejas.
El, según Cheika, reemplazo para Santiago Carreras, afuera. Lo “positivo” para Argentina: penal y gol de Boffelli.
Pero, ese temor que planteábamos desde estas líneas, no tardó en llegar. Un par de jugadas después, amarilla para Santiago Carreras con Mallía todavía recuperándose.
Mientras tanto, los asistentes del TMO, analizaban la jugada entre Curry y el fullback argentino. Conclusión: roja para el tercera línea inglés.
Antes de los 20 minutos iniciales, Inglaterra continuaba con la mala racha que incluyó, en sus últimas presentaciones,
Por la infracción de Carreras, Ford facturó de a tres. El empate hablaba a las claras de la paridad del partido. Y que ninguno arriesgaba de más. Había que aprovechar cada oportunidad para sumar.
Y una de ellas muy desaprovechada por Los Pumas. Line a cinco metros, algo de “avance”, e infracción para Argentina. La lógica, por cómo venía el partido, era volver a apostar al line y el empuje del maul, o bien sumar tres puntos (era un lugar muy accesible de la cancha para un pateador como Boffelli). Pero no. Montoya decidió que hicieran una jugada preparada, que terminó con una “pesca” inglesa y un momento clave de Argentina que no se aprovechó como debía.
En los últimos minutos del final del primer tiempo, drop de Ford, ni bien Inglaterra pasó la mitad de cancha. Un par de jugadas después, aprovechando “su momento”, el 10 inglés volvió a sumar por la misma vía, ante el desconcierto Puma que era notorio. Carreras quiso “copiarlo”, pero no le salió.
Y Ford que seguía “floreándose”. Un nuevo drop (el tercero) del apertura, ponía el marcador 12 a 3 en favor del equipo de la Rosa.
Ah, por si alguien se había olvidado: Los Pumas, desde antes de los 20 minutos, jugaban con uno más por la expulsión de Curry.
Cheika “movió el banco” para la segunda etapa. Ingresó Guido Petti en reemplazo de Matías Alemanno.
Y este complemento, no tuvo un inicio auspicioso para Los Pumas. Inglaterra se posicionó rápido en campo argentino, infracción y Ford que sumaba una vez más de a tres. Ahora, de penal. El apertura inglés, justificaba cada vez más, el por qué debían elegirllo como “Man of the Match”.
El desconcierto argentino, era total. No había reacción. Y Ford que seguía sumando. Lleago el cuarto de hora de la segunda etapa, Inglaterra sacaba ventaja de 15 puntos. Sí, siempre con 14 jugadores en cancha.
No había caso. A Los Pumas no se les caía una idea. Otro penal de Ford estiraba el margen a 21 a 3. Por ese entonces (20 minutos del segundo tiempo), parecía “partido liquidado”. Pero sobre todo porque del lado argentino escaseaba la conducción táctica dentro de la cancha y los cambios no fueron lo que seguramente imaginó el staff técnico.
Mientras tanto, Ford seguía sumando… Los minutos se cosumían y la diferencia se ampliaba cada vez más: 24 a 3 primero, 27 a 3 más tarde.
Fue 27 a 10 el resultado final, debido a un try de Rodrigo Bruni convertido por Boffelli que solo decoró el resultado.
El próximo partido de Los Pumas es el 22 de septiembre, ante Samoa. Hay tiempo, sí. Pero debe haber mucho trabajo y autocrítica también. Porque lo de este sábado, dejó mucho que desear para un equipo que llegó a esta competencia con el objetivo de “ganar el mundial”, dicho esto por varios de sus referentes, incluido su entrenador.
Síntesis