Luego de un fin de semana con derrotas para los equipos de vanguardia, Racing supo sufrir frente a Huracán, y celebró con mucha euforia la victoria por 1 a 0 que lo dejó a un punto de los líderes de la Superliga, pasada la decimotercera fecha.
Luego de un fin de semana con derrotas para los equipos de vanguardia, Racing supo sufrir frente a Huracán, y celebró con mucha euforia la victoria por 1 a 0 que lo dejó a un punto de los líderes de la Superliga, pasada la decimotercera fecha.
Es que Huracán lo tuvo contra las cuerdas, porque sufrió la anulación de un gol legítimo por parte del árbitro Fernando Rapallini -por una supuesta infracción de Lucas Barrios- y contó con una inmejorable situación previa al tanto de Racing que tapó el arquero Gabriel Arias.
Y a los 30 minutos del complemento, tras una atajada bárbara de Antony Silva sobre un cabezazo de Darío Cvitanich, el otro delantero que había mandado a la cancha Eduardo Coudet, Nicolás Reniero, empujó de cabeza para hacer explotar el "Cilindro" de Avellaneda.
Así, Reniero, que venía de anotar en la igualdad frente a Patronato, le dio una victoria clave a Racing, que descontó y quedó como escolta, a un punto de los líderes Argentinos y Lanús, y alcanzando la línea de River y Boca.
El "Globo", por su parte, tuvo una aplicación táctica envidiable durante 75 minutos, pero luego se descontroló y sufrió las expulsiones de Carlos Araujo y Lucas Merolla, en un tumulto en el que también estuvieron involucrados Cvitanich y Reniero, antes de ver consumada su segunda derrota en fila.
Con información de NA