"Maradona no tiene ningún compromiso neurológico. La recuperación es buenísima. 'Vos quedaste como un campeón', me dijo. Ahora está bajo un control de terapia intensiva y la familia lo está cuidando", explicó Luque a todos los medios de prensa convocados en el acceso a la Clínica Olivos.
"Nosotros hoy no nos planteamos el Covid-19 como un condicionante para definir el alta. Acá es el día a día y de verlo hoy a la mañana a lo que observamos ahora, es una gran alegría comprobar lo bien que está", destacó.
Luque, quien llegó a la clínica a bordo de una moto y allí fue rodeado por un buen número de hinchas de Gimnasia y Esgrima que viajaron por la mañana desde La Plata "para hacerle el aguante a nuestro entrenador", según dijeron.
"Diego está cursando un posoperatorio y esto es estadístico, porque la medicina no es una ciencia exacta. Las 24 o 48 horas posteriores a una intervención quirúrgica son esas en las que surgen las complicaciones, pero eso no sucedió y por eso estamos tan contentos", completó su descontracturado informe Luque, quien, acto seguido, siguió sacándose fotografías con los hinchas "triperos", para los que se convirtió en un nuevo ídolo allende las canchas por haber operado y curado al "otro", a Maradona .
El "10" estuvo acompañado desde temprano por Maxi, cuñado del abogado Matías Morla y ayudante personal de Diego, y por uno de sus sobrinos, Johnny, que es el otro asistente con quien el actual técnico de Gimnasia vive en la casa del country Campos de Roca, cerca de La Plata, dentro del partido vecino de Coronel Brandsen.
Al mediodía llegó a la Clínica Olivos una de sus hijas, Giannina Dinorah, que entró por la puerta de la calle Arenales al 1500, donde dejan ingresar a familiares directos.
En autos cubiertos por banderas e imágenes del técnico, unos 250 hinchas del 'Lobo' se movilizaron hasta la puerta de la clínica donde está internado Maradona. La caravana de autos que llegó desde La Plata y de filiales de la zona sur de Buenos Aires y de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires alteró aún más la tranquilidad en la zona.
Los hinchas pegaron banderas y carteles para el actual técnico de Gimnasia y cantaron "Diego, el Lobo no te abandona". Los familiares de los pacientes que están internados en la Clínica Olivos mostraron su malestar por no poder estacionar ni entrar tranquilos al lugar, ya que parte de la calle quedó cortada. Incluso, algunos vecinos, y les arrojaron huevos a los camarógrafos y periodistas que estaban desde la mañana en el lugar.