Luego de haber sido condenado a 2 años y 1 mes de prisión en suspenso por ejercer violencia de género y amenazas coactivas sobre Daniela Cortes, Sebastián Villa se presentó en Ezeize, donde Boca tiene su predio deportivo, pero no entró junto a sus compañeros.
El volante colombiano llegó cerca de las 9, saludó a los demás futbolistas del plantel en un pasillo y se reunió con miembros del Consejo de Fútbol por dos horas. Se esperaba que el jugador se cambie y se una a la práctica de Jorge Almirón, pero no ocurrió.
Mirá tambiénSebastián Villa fue condenado a dos años de prisión pero no irá a la cárcel La decisión de la Comisión Directiva le impide ser convocado para participar de los partidos pero no seguir trabajando, entrenándose con el equipo y cobrar su sueldo, de acuerdo a los derechos laborales. Pero para sorpresa de todos cerca de las 11.30 empezó a saludar para irse.
"No hay clima, no hay atmósfera de nada", expresaron desde adentro del equipo. "Esto pegó, pegó, para este equipo, te guste o no, era fundamental. Pero se hizo lo que se tenía que hacer, da vergüenza todo esto", agregaron.
Mirá tambiénOficial: Sebastián Villa no volverá a jugar en Boca tras ser condenado por violencia de géneroSe espera que en los próximos días boca decida qué será del futuro de Sebastián Villa, quien se podría ir a préstamo si consigue algún club que quiera contratar a un jugador condenado por violencia de género. Por el momento, todo indica que volvería a Colombia, tras de pedir la próxima semana un permiso a la Justicia (no fue solicitado aún, pero suele ser otorgado en estos casos)
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