Con pasión se vivió el partido en la mesa de El Litoral
Los especialistas del diario El Litoral se dieron cita en Sumatra para compartir el encuentro entre Argentina y Países Bajos. El entrenador Edgardo Cervilla, junto a los ex jugadores Eduardo Azoge y Carlos Mercado, opinaron sobre el partido.
En Sumatra, los futboleros disfrutaron el triunfo de Argentina. Edgardo Cervilla, Eduardo Azoge y Carlos Mercado. Créditos: Manuel Fabatia
El tradicional calor santafesino acompañó durante la tarde del viernes a todos los fanáticos que en cada rincón de la ciudad cordial se dieron cita para volver a ver a la selección nacional. El día pedía algo bien fresco y un buen lugar para presenciar el encuentro, y es por eso que El Litoral eligió Sumatra, en la esquina de Boulevard y Francia, para poder disfrutar de la cita mundialista.
A medida que pasaban los minutos, la ansiedad ganaba terreno, y la charla rondaba entre el partido de la Albiceleste y la sorpresiva eliminación de Brasil en manos de Croacia. Los primeros instantes del partido se fundían en medio de los nervios de la gente.
Con los goles de Nahuel Molina y Lionel Messi, el público en el lugar pudo ganar calma y tranquilidad. El descuento de Países Bajos volvió a traer nerviosismo, mientras que el agónico empate fue lapidario. No obstante, Argentina levantó en el tiempo suplementario y con ella la gente volvió a entusiasmarse.
Grandes festejos. Francia y Boulevard, un lugar preparado para disfrutar del fútbol. Créditos: Manuel Fabatia
A la hora de los penales, la referencia ineludible era el partido de semifinales en Brasil 2014, donde Sergio Romero se convirtió en héroe. En esta ocasión, las manos salvadoras de Emiliano Martínez, y el pie mágico de Lautaro le dieron a la Argentina la clasificación una vez más a una semifinal de una Copa del Mundo.
Edgardo Cervilla lo sufrió y luego lo disfrutó
-Qué manera de sufrir sobre el final...
-Si, estas son las vicisitudes que tiene el fútbol, y más a este nivel, con esta jerarquía, en este tipo de campeonatos mundiales donde por momentos tocas la gloria con las manos y en otros momentos estás en el fondo del infierno. Es la dinámica que tiene realmente el fútbol y lo que lo hace el deporte más lindo del mundo.
-¿Cómo te imaginabas que iba a ser este partido?
-Para mi era un partido duro desde el inicio, porque era el primer rival en serio que íbamos a enfrentar, por la jerarquía de los rivales anteriores que hemos tenido y enfrentado. Holanda viene con un recambio generacional importante, con un gran plantel a futuro. A pesar de que al principio estuvo cerrado, después Argentina lo pudo abrir. Fíjate los detalles que definen la jerarquía, que en el minuto 90 te empatan el partido, te obligan a ir al alargue y definirlo por penales. Sin dudas fue un partido duro, como se preveía que fuera.
-¿Qué te pareció el planteo de Lionel Scaloni?
-El planteo no fue malo, fue práctico, fue bueno, lo que pasa es que después perdió frescura en ataque tal vez los últimos diez minutos cuando Argentina tenía que sostener la pelota, el juego, y Holanda salió a quemar las naves porque se quedaba afuera del Mundial. Ahí nosotros perdimos un poco de control, y con una pelota aérea al área y una pelota detenida nos empatan el partido. Pero es el Mundial, y la prueba fehaciente de eso es el partido anterior entre Brasil y Croacia.
-¿Podemos decir que Argentina fue de mayor a menor en el partido y Países Bajos al revés?
-Si, porque son partidos donde van prevaleciendo de acuerdo a los momentos y la jerarquía que se impone en cada momento. Sin lugar a dudas es difícil encontrar un partido, en esta instancia tan definitoria, en donde se marque netamente la supremacía de un equipo sobre otro a lo largo de los 90 minutos. Creo que fue un partido digno de cuartos de final, con todos los condimentos que debe tener. Nos tocó sufrir a nosotros porque somos argentinos, obviamente que nos hubiera gustado cerrarlo antes, pero así son los partidos del Mundial.
-¿Cómo ves al equipo de cara a la semifinal contra Croacia?
-Croacia es un rival duro, pero que te va a dejar jugar más al fútbol que lo que te deja jugar Holanda hoy en día. Va a ser un partido abierto contra un rival de cuidado y de fuste. No es casualidad que Croacia los últimos años también haya llegado a semifinales; pero la expectativa es total, porque ya estamos entre los cuatro mejores del mundo y sin lugar a dudas que vamos a poner toda la fe, el ímpetu y las ganas para que Argentina se consagre y llegue a la final del mundo.
El público colmó las calles de la ciudad de Santa Fe y los festejos se prolongaron hasta altas horas de la madrugada. Créditos: Manuel Fabatia
-¿En lo personal preferías a Croacia o a Brasil?
-Los dos son rivales complicados, por una cuestión de rivalidad y porque somos argentinos obviamente prefería a Brasil. El problema es que Croacia con los partidos que viene sacando cargó nafta súper, se torna en un rival complicado desde el punto de vista de la emoción. Pero Argentina también es semifinalista, son grandes equipos donde un detalle va a definir la semi.
Carlos Mercado, para el infarto
-Se sufrió hasta el final...
-Si, son partidos infartantes. Tenemos que tener en cuenta que esto es el primer mundo del fútbol. Se encuentran jugadores que en cualquier momento te definen un partido, sacan algo de la galera. Los más grandes o los más cotizados tal vez no están en toda la tarde, y aparecen en un segundo y provocan todo esto.
-Parecía que el partido estaba asegurado cuando Argentina ganaba 2 a 0 y tal vez no esperábamos este desenlace.
-Lo que pasa es que, a diferencia del boxeo por ejemplo, si un boxeador es mejor te castiga y podes caer o abandonar. En este caso no, se sigue y son como bocanadas de aire. Es como en el primer partido: en dos jugadas te lo da vuelta el equipo rival, pero en el primer tiempo deberíamos haber ido ganando 5 a 0. Pero bueno, se dio todo así.
-¿Qué te pareció la Selección?
-Me gusta que Argentina va de menor a mayor. Eso es importante, porque España ganó el primer partido 7 a 0, y le faltó solamente un gol el otro día y perdió por penales. Scaloni conoce, hace mucho que está trabajando y es un hombre de selección. Tiene nivel, lo está demostrando y se lo ha ganado. Uno lo ve como hincha y se me escapan un montón de cosas. El técnico, viéndolo de otra forma, totalmente frío, podría hacer algunas críticas, pero son mínimas creería.
-¿Qué opinás de lo que mostró hoy Países Bajos?
-Son rivales siempre difíciles, equipos que tienen escuela. Holanda no es protagonista desde ahora, sino que hace añares que viene, puede tener bajones, pero si analizas las ligas de todo el mundo siempre tienen jugadores, y son las primeras figuras.
-¿Cómo ves a Argentina ahora contra Croacia?
-Bueno, ahora depende un poco del estado de ánimo, porque el buen fútbol lo tiene. Esperemos que Messi saque aire y pulmones de donde sea y nos dé las satisfacciones que le ha dado al mundo del fútbol hasta el día de hoy.
-Fue un poco sorpresiva la eliminación de Brasil.
-Eso no estaba en los planes de nadie, Brasil tiene una delantera fantástica como para hacer cuatro o cinco goles por partido. Pero no por nada este es el deporte favorito. El fútbol es algo increíble y estas son las sorpresas que tiene.
Eduardo Azoge, tranquilo y confiado
-¿Qué te pareció el planteo de Scaloni?
-Argentina tenía que dar la talla en la mitad de la cancha. Ahí iba a plantear la guerra Van Gaal. Países Bajos no marcaba bien las proyecciones de Molina y Acuña, el partido fue un ajedrez y la gambeta fue el factor desencadenante de los ataques. En el primer tiempo Argentina buscaba desbordar por afuera y el desequilibrio de Messi, que electrizó con dos arranques implacables a los centrales holandeses. Argentina tuvo paciencia para encontrar el gol, y Holanda no tuvo ideas.
-Sin embargo en el segundo tiempo costó más.
-Scaloni cambió peligrosamente toda la defensa. Acertó Van Gaal con el doble 9 y extremos a perfil invertido. Hay que darle mucho mérito a un equipo que en la última chance que tuvo hizo lo que hizo. Un golazo de pizarrón no solo por el diseño, sino por el carácter y el contexto. Por otra parte, el partido de Julián Álvarez desde lo táctico es para hacer un tutorial y mostrarle a los pibes de inferiores que un delantero no vive solamente del gol. Hizo todo para el equipo.
-Para destacar también la levantada de Países Bajos sobre el final.
-Wout Whegorst, que ingresó como suplente en el segundo tiempo, se convirtió en el héroe del partido, al convertir los dos goles de su equipo, Países Bajos. Fue un alargue muy caliente, luego de los inexplicables diez minutos de descuento que dio el árbitro Mateu Lahoz.
-¿Cómo viste el suplementario y los penales?
-Argentina tenía todo para desmoronarse en el suplementario. El partido estaba bajo control por resultado y dominio. Había realizado un gran desgaste físico. El 2-2 fue un piñón de Monzón. El desafío para Argentina era futbolístico y mental. Tenía que enterrar la imagen de la última jugada y sentirse un equipo. Di María le dio otro vértigo al ataque, fue un extraordinario suplementario de la selección argentina, que se acordó muy tarde de que se puede jugar. No tuvo suerte pero fue valiente cuando las papas quemaron. En los penales apareció el Dibu a lo Goycochea.
-¿Qué opinas de Croacia, el próximo rival?
-Croacia juega mundiales desde 1998 y ya se puede decir que es un país copero. El martes será una maleza difícil de atravesar. Hoy dio un golpe que sacó de eje a la tierra. La esencia de países como Croacia es no rendirse nunca. Está en su ADN.