El Litoral / Télam
En un gran encuentro, Sol de Mayo eliminó a Rosario Central de la Copa Argentina. El partido terminó empatado 2 a 2 y los de Río Negro ganaron por penales.
El Litoral / Télam
Sol de Mayo, de Río Negro dio anoche el "batacazo" y eliminó a Rosario Central por penales (5 a 4), luego de empatar en dos goles, en un emotivo partido por los 32 avos de final de la Copa Argentina jugado en el estadio de Colón, en la ciudad de Santa Fe.
Sol de Mayo ganaba con goles de Alberto Reyes y Lucas Malacarne, uno en cada tiempo, pero Central lo empató en una ráfaga de dos minutos con tantos de Claudio Riaño en el complemento.
Sol de Mayo sorprendió a los juveniles de Central en el primer tiempo con un juego tan simple como efectivo, que consistió en una presión alta para recuperar rápido la pelota y ganar casi todos los rebotes y tratar de tocar y buscar por los costados.
Los jugadores "albicelestes" estaban motivados y llegaban antes a las divididas, al extremo que fueron los únicos que generaron un puñado de llegadas claras, entre las que sobresalió un buen contraataque a la salida de un córner, que el experimentado Diego Galván (36 años, ex River Plate y Estudiantes de La Plata) tiró afuera de derecha, cerca del poste izquierdo, a los 18 minutos.
El equipo alternativo de Central pareció sentir la presión de jugar en lugar de los titulares con una práctica y media encima y con el debut del técnico Paulo Ferrari, al punto que no generó una sola llegada clara en el primer tiempo.
Sol de Mayo abusó de las faltas, como el primer marcador central Juan Iurino, que casi no ganó sin infracción, favorecido por el arbitraje permisivo de Héctor Paletta.
Hasta que a los 43 minutos Sol de Mayo volvió a ganar una dividida por la derecha y apareció solo Fernando Valdebenito (hijo de Adán, el entrenador del equipo y además presidente del club) por la izquierda para cruzar un centro al área que Reyes empujó, también libre de marcas, y la pelota entró junto al segundo palo.
Central mejoró en el complemento con los cambios de Washington Camacho por Andrés Lioi y, sobre todo, de Germán Herrera por Jarlan Barrera.
Sin embargo, Sol de Mayo volvió a sorprender a los 12 minutos con un tiro libre de Gastón García desde la derecha que Lucas Malacarne cabeceó solo y la clavó junto al poste izquierdo.
Sin embargo Central jugó mejor con la pelota y logró empatarlo con fútbol y garra en apenas dos minutos: a los 17 Pablo Becker lanzó un tiro libre desde la derecha, Herrera la bajó de cabeza y Riaño la empujó de zurda al gol.
Y a los 19 minutos Nahuel Molina lanzó un buen centro desde la derecha, Matías Palavecino la paró en el área y le hicieron un penal que Paletta no cobró y la pelota le cayó otra vez a Herrera, quien esperó la salida del arquero y se la tocó a Riaño, quien no tuvo más que empujarla de derecha al arco vacío.
El resto del partido fue más peleado que jugado, con un permisivo arbitraje de Paletta que alentó el juego por momentos mal intencionado de Sol de Mayo, mientras Central dispuso de la pelota pero casi no llegó con peligro, salvo el último córner que no alcanzaron a cabecear Herrrera y Giménez, libres de marcas.
En los penales Gastón García la tiró afuera, Herrera -la figura de la cancha- estrelló el suyo en el travesaño y Pablo Becker lo desvió. Todos los demás ejecutantes convirtieron y Sol de Mayo hizo historia y ganó por 5 a 4 a Central, el último campeón de la Copa Argentina.
Sol de Mayo está último al cabo de cuatro fechas en la zona 1 de la segunda fase del torneo Federal A, pero la alegría que vivió su gente esta noche compensa ese mal presente en la competencia cotidiana de esta institución fundada el 2 de agosto de 1920.