Superliga Europea: de qué se trata y por qué provocó tanto rechazo en el mundo del fútbol
Una nueva competición impulsada por los más poderosos clubes del continente sacude el panorama futbolístico.
Superliga Europea: de qué se trata y por qué provocó tanto rechazo en el mundo del fútbol
Miércoles 21.4.2021
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Última actualización 20:00
Los clubes más poderosos de Europa habían anunciado que en agosto comenzaría a disputarse la Superliga, un certamen creado a espaldas de la UEFA y de la FIFA y que lo jugarían 20 clubes al año, de los cuales 15 serían fijos. Desde el instante en que se emitió el comunicado, las repercusiones negativas se agolparon a tal punto que varios equipos decidieron bajarse del certamen. Primero fueron los seis equipos de la Premier y este miércoles se anunciaron las retiradas de Atlético de Madrid e Inter de Milán. De momento solo quedan Real Madrid, Barcelona y AC Milan. Tres de doce.
¿Qué es la Superliga europea?
La Superliga es una nueva competición europea establecida (y gobernada) por un total de 12 clubes, de entre los más ricos de diferentes países: los seis 'grandes' de la Premier League, los tres 'grandes' de LaLiga española y tres de los históricos italianos. En el comunicado en el que se anuncia el nacimiento de la Superliga se detalla que además de estos 12 equipos podrían sumarse otros tres, convirtiéndose así en los clubes fundadores. El objetivo de este proyecto, por ahora frustrado, era la creación de un torneo relativamente cerrado en el que "los mejores clubes y jugadores puedan competir entre ellos de manera más frecuente".
¿Cómo se articulará la competición?
Los 20 equipos que la disputen cada año quedarán divididos en dos grupos de 10, con partidos a ida y vuelta. Los tres primeros de cada grupo pasarán al sistema de eliminatorias a ida y vuelta a partir de cuartos de final. Los cuartos y los quintos jugarían una eliminatoria para completar los ocho equipos de cuartos. En total, se disputarán 197 partidos.
¿Cuánto ganarán los clubes de la Superliga?
De inicio, los integrantes de la Superliga se repartirán 3.525 millones de euros procedentes de diversos inversores. El reparto, si finalmente son 15 los fundadores (12 más los tres invitados) sería así: 350 millones de euros para seis clubes, 225 para cuatro, 112′5 para dos y 100 para tres clubes, repartido de acuerdo a un sistema interno no sujeto a la clasificación de cada año.
Además, se estima que se ingresarán 4.000 millones de euros por derechos de televisión. Un 65% de esos 4.000 millones sería para los fundadores; un 20% se adjudicaría por méritos deportivos en la competición y un 15% por distribución comercial. Así pues, los 20 clubes ingresarían, como mínimo, unos 60 millones por participar. El ganador recibiría algo más de 250 millones de euros, más del doble de lo que recauda el ganador de la actual Champions League.
¿Quiénes lideran el proyecto?
Florentino Pérez, presidente del Real Madrid, será el presidente de la Superliga. Los vicepresidentes serán Andrea Agnelli, presidente de la Juventus, y Joel Glazer, propietario del Manchester United.
¿Cuál es la posición la UEFA y de las federaciones nacionales?
La UEFA, en un duro comunicado emitido al oficializarse la noticia, calificó de “cínico” el proyecto de la Superliga y avisó de las consecuencias para los clubes y jugadores implicados: “Los clubes afectados no podrán participar en ninguna otra competición a nivel nacional, europeo o mundial, y sus jugadores podrían verse privados de la oportunidad de representar a sus selecciones nacionales”, señalaba la nota.
“La UEFA, la FA (la federación inglesa), la Real Federación Española de Fútbol, la FIGC (federación italiana), la Premier League, LaLiga, Lega Serie A, pero también la FIFA y todas nuestras federaciones miembro, seguiremos unidos en nuestros esfuerzos para detener este cínico proyecto, un modelo que se basa en el interés propio de unos pocos clubes en un momento en el que la sociedad necesita más que nunca la solidaridad”, añadía el comunicado, que suscriben las diferentes ligas y federaciones afectadas.
También la FIFA mostró su rechazo a la creación de la Superliga europea, una competición “separatista y cerrada” que no respeta los principios de “solidaridad, inclusión, integridad y redistribución económica”, y ha pedido a todas las partes implicadas que mantengan “un diálogo tranquilo, constructivo y equilibrado” por “el bien del fútbol”.
El anuncio sobre el nuevo certamen no provocó solamente revuelos entre los clubes y las entidades , sino que ocasionó comentarios negativos por parte de los aficionados en las redes sociales.