Se calculan en más de 30.000 los concurrentes al Autódromo para presenciar la más popular de las categorías nacionales, una movida que entre hotelería, gastronomía, supermercados y expendio de combustible le aportarán un extra de ventas de varias decenas de millones de pesos.
La expectativa por esta presentación era superlativa porque se trata de la primera con público y sin restricciones pos pandemia, y tal como se presagió superó todos los pronóstico. Tan es así que desde hace varios días se vieron desde el acceso al imponente predio del Autódromo hileras de varias cuadras de vehículos para ingresar en busca de las mejores ubicaciones alrededor de la pista
Motorhomes, colectivos, traffics con público de distintas partes del país llegaron a la Perla del Oeste para vivir una nueva fecha del TC durante todo el fin de semana y la fiesta empezó a vivirse desde poco después del mediodía del viernes cuando una vez que ingresaron los equipos se dio paso a miles y miles de fanáticos que no perdieron tiempo en montar el acampe para esperar y no perderse ni un giro de sus coches y pilotos favoritos.
Paralelamente, la hotelería de la ciudad comenzó a saturarse hasta ocuparse plenamente, como también casas particulares y otras formas de hospedaje que fueron apareciendo ante el desborde de la demanda.
Para la tarde todos los visitantes ya estaban instalados y salieron lanzados en busca de provisiones para que no falte nada en las dos jornadas magníficas por venir y una masa impresionante comenzó a darle otra fisonomía a la ciudad provocando un movimiento afiebrado en algunos rubros. A la noche estuvo de parabienes, como hace bastante no ocurría, toda la actividad gastronómica
“Nos preparamos con todas las ganas porque el turismo es un gran motor de las economías regionales y cada huésped o turista que viene y nos visita gasta su dinero en la ciudad y por supuesto a nosotros nos embellece, nos engalana y seguimos generando empleo”, le dijo a El Litoral Silvina Imperiale, titular de la Cámara de Propietarios de Hoteles, Restaurantes, Bares, Confiterías y afines de Rafaela (Caphrebar).
“Históricamente éste ha sido ‘el’ acontecimientos de la ciudad, en los últimos años un poquito eclipsado por el Sueño Celeste (torneo infanto-juvenil que organiza el club Atlético de Rafaela y recibe cada año cerca de 4.000 deportistas, a los que se suman responsables de delegaciones, directivos y familiares), pero para nosotros el Turismo de Carretera siempre es ‘la fiesta de la ciudad’. En este marco, como era de esperar, la ocupación hotelera es plena y también lo es la para-hotelera y nos estuvimos preparando para darles a todos la mejor atención”.
“Haciendo una estimación -continuó- se puede hablar que la cantidad de camas en la ciudad está alrededor de las 1.000 camas, tal vez un poco más, pero no mucho. Tal vez para un suceso de esta magnitud parecen pocas, pero para transitar el resto del año son suficientes. Esta capacidad instalada es la justa, la correcta para una ciudad de nuestras proporciones. La semana que viene vas a conseguir camas en el hotel que quieras y al costo que te convenga sin problemas, pero para estos días todo lo disponible estuvo reservado desde hace varios meses”.
Respecto de la gastronomía, la empresaria contó: “como anécdota, anoche había largas filas en locales hasta para comprar una pizza”. Del mismo modo este medio pudo comprobar que en los restaurantes más exclusivos para viernes y sábado todos los turnos para mediodía y noche estaban sin posibilidades de atención. Tal como ocurrió en los locales de comida para llevar en los bares/comedores del microcentro también había esperas para poder sentarse”
Un relevamiento realizado por este medio en los hoteles rafaelinos, cuya tarifa están entre los 5.000 y 15.000 pesos la noche por habitación single, indica que el consumo por día (se le agrega gastronomía) se ubica en un gasto aproximado a los 12.000 pesos por persona y por día
De esta cifra se deduce que sólo por concepto de hotelería el movimiento del Turismo Carretera le reportará a la ciudad unos 12 millones de pesos, cifra que se toma como referencia para proyectar la inyección de dinero que aportará la competencia de Turismo Carretera por que se trata del piso de los excedentes que tendrán los otros rubros que más operaciones realizan ante este tipo de propuestas
La odisea del supermercado
La gran mayoría de las 30 mil personas que llega para presenciar la carrera pernocta en el amplísimo predio del Autódromo durante un día y medio y recurre a proveerse de productos para consumo y de primera necesidad a los grandes espacios comerciales de la ciudad, transformándolos en un pandemonium cualquier intento de compra de los ciudadanos.
Tal es lo que se apreció en la tarde del viernes y en la mañana del sábado con supermercados abarrotados de gente y con todas las línea de cajas trabajando a destajo permanentemente, algo que se repetiría en la tarde de este sábado
De acuerdo a la consulta formulada en estos días las compras se llegan a triplicar y el importe promedio de los tickets es algo superior. Si bien al cierre de esta nota no estaban aún cerrado los ”números” se lo ubica cercano a los $ 15.000
Las estaciones de servicio de toda la ciudad también se vieron saturadas en las últimas horas debido a que todos quieren abastecerse para luego poder disfrutar del espectáculo y una vez terminado emprender el regreso a casa sin demoras. Como consecuencia de ello se observaron interminables colas de vehículos en cada una de las bocas de expendio de combustible.
Quienes la tuvieron, y la tienen, más complicada son los que se trasladaron en vehículos impulsados por gas oil porque a la escasez que ya se registraba se le agregó una considerable demanda y desde la noche del viernes empezó a faltar casi por completo. En la mañana de este sábado ya no quedaba nada en los depósitos subterráneos. Fue así que muchos tuvieron que peregrinar para conseguirlo y otros comenzaron a trasladarse a localidades vecinas para conseguirlo.
El resto de rubros minoristas, ajenos a los mencionados, no sufren alteraciones y el presidente de Paseo del Centro (nuclea a los comerciantes del microcentro de la ciudad), Gabriel Faber, apuntó que “es muy poco lo que nos suma, aunque siempre algo más se vende”.
“De todas maneras, no se puede negar que la ciudad recibe un beneficio importante porque los rubros que te mencioné trabajan muchísimo y eso es plata que queda acá y después empieza a circular”, sostuvo Faber.