Un inesperado momento vivió Julián Álvarez en la previa de los festejos por Nochebuena en su pueblo natal, Calchín en la provincia de Córdoba.
Un inesperado momento vivió Julián Álvarez en la previa de los festejos por Nochebuena en su pueblo natal, Calchín en la provincia de Córdoba.
El goleador de la Selección Argentina y reciente campeón del mundo fue interceptado el sábado por un grupo de chicos que le imploraron por sacarse una foto o para recibir un autógrafo suyo.
Más allá de la buena predisposición de “La Araña”, lo que se llevó todas las miradas fue la reacción que Emilia Ferrero, novia del futbolista, tuvo ante al conjunto de pequeños que no escondían su felicidad por estar cerca de su ídolo.
“Un celular y que saque todas las fotos”, advirtió la pareja del jugador de 22 años ya desde un principio.
En ese momento, algunos niños pedían que Julián les choque los cinco y que les firme la camiseta, a la vez que otros lo aplaudían.
Luego de que dos pequeños volviesen a insistir con obtener la firma del ex-River Plate, Ferrero lanzó un segundo aviso final: “Chicos, una fotito más y listo. Nos tenemos que ir”.
Viralizado el video, en las redes sociales (principalmente Twitter) seguidores de Álvarez expresaron su enojo y se mostraron en desacuerdo con la actitud de Ferrero.
Entre otras cosas, la calificaron de “atrevida”, pidieron que sea “más humilde” y hasta le recomendaron a la promesa del Manchester City “cambiar de pareja”.
“Deja que los pibitos consigan una foto con su ídolo. Rájenla”; “Le arruinó la vida de unos pequeños inocentes”; y “generó el rechazo de la comunidad tuitera” fueron algunas de las frases o publicaciones que mayor trascendencia obtuvieron dentro de la plataforma social.