El dólar blue subió este viernes hasta los $469 en la punta vendedora mostrando cierta estabilidad en las últimas tres ruedas, mientras los tipos de cambio financieros operaron dispares.
La divisa paralela parecería que inicia una etapa con cierta estabilidad, luego de tres semanas de fuertes subas y alta volatilidad.
El dólar blue subió este viernes hasta los $469 en la punta vendedora mostrando cierta estabilidad en las últimas tres ruedas, mientras los tipos de cambio financieros operaron dispares.
La divisa paralela, que arrancó la semana subiendo hasta los $474, perdió tras el feriado del lunes cinco pesos, y tras sufrir dos bajas consecutivas, parecería que inicia una etapa con cierta estabilidad, luego de tres semanas de fuertes subas y alta volatilidad.
La divisa paralela se mantuvo con poca volatilidad en la semana después que entraron a regir las nuevas medidas que limitan las operaciones con dólares financieros de los agentes de Bolsa. El dólar paralelo sube $469 para la venta y en $464 en la compra y la brecha con el oficial se ubica en el 107,3%.
El mes pasado la divisa marginal alcanzó los $500 en forma intradiaria, aunque finalizó abril en $469, igual que el cierre de este viernes, en medio de las intervenciones del Banco Central (BCRA) y la decisión de subir la tasa de interés.
El BCRA terminó la rueda con compras por US$ 2 millones y en la semana la autoridad monetaria acumuló ventas por US$ 274 millones. El sector agroexportador ingreso divisas por US$ 111 millones, totalizando en la semana US$ 418 millones y en los 19 días que lleva el Programa de Incremento Exportador acumula un monto de US$ 2.031 millones.
La reducción de los subsidios energéticos en 2023 se ubicaría por encima de las proyecciones incluidas en el programa con el Fondo Monetario Internacional (FMI), lo cual sería un auxilio sustantivo para lograr un déficit fiscal que conforme a las autoridades del organismo con quienes se negocia una readecuación de las metas.
Así se desprende de declaraciones a la prensa del subsecretario de Energía Eléctrica, Santiago Yanotti, quien apuntó que una mayor quita de subvenciones a la prevista permitiría bajar ese gasto en torno al 1% del PBI en lugar del 1,5% estimado al momento de confeccionar los programas.
Se sabe que el gasto en subsidios es uno de las objeciones más importante que el FMI le realiza al gobierno argentino y es donde está el foco de atención para encarrilar las cuentas públicas.
Yanotti aclaró que sobre este tema no hay metas pautadas en el acuerdo con el FMI, pero sí hay proyecciones de cómo funcionarían los recortes previstos y su impacto en el déficit anual.
Argentina y el FMI están renegociando el acuerdo vigente y el organismo mantiene exigencias en cuanto a quita de ayuda estatal en los servicios públicos y en la aceleración de la devaluación del dólar oficial.
Esta semana entró en vigencia la resolución por la cual se eliminaron los subsidios para los usuarios de Nivel 1 y además se habilitaron ajustes de la porción de generación para los de Nivel 2. En este caso sentirán un aumento en sus facturas en caso que superen los 400 kwh de consumo.
En 2022 los subsidios energéticos implicaron un gasto de 1,9% del PBI, que se redujo a 1,5% para 2023. Ahora ese porcentaje quiere llevarse a la zona de 1% para conformar los pedidos del organismo y al mismo tiempo sincerar el precio que pagan los usuarios.
Para mantener los subsidios energéticos los usuarios deben inscribirse en el RASE y fijar los parámetros de ingresos para la categoría que crean corresponder.
Dejanos tu comentario
Los comentarios realizados son de exclusiva responsabilidad de sus autores y las consecuencias derivadas de ellos pueden ser pasibles de las sanciones legales que correspondan. Evitar comentarios ofensivos o que no respondan al tema abordado en la información.