Las reservas internacionales del Banco Central volvieron a ubicarse por debajo de los US$ 43.000 millones, dado que se realizó el pago al Club de París.
Las reservas internacionales del Banco Central volvieron a ubicarse por debajo de los US$ 43.000 millones.
Las reservas internacionales del Banco Central volvieron a ubicarse por debajo de los US$ 43.000 millones, dado que se realizó el pago al Club de París.
Según información oficial, el martes finalizaron en un total de US$ 42.837 millones.
Se trata del primer pago parcial anunciado por el ministro de Economía, Martín Guzmán, quien logró un entendimiento mediante el que acordó extender los plazos hasta el 31 de marzo de 2022, al evitar caer en default.
A cambio, la Argentina acordó abonar US$ 430 millones en cuotas hasta esa fecha, muy por debajo de los US$ 2.400 millones que debía desembolsar inicialmente.
"En el período de 8 meses, en lugar de hacerse frente a los aproximadamente U$ S 2.400 millones programados, se hará un conjunto de pagos que sumarán alrededor de US$ 430 millones.
Implica un alivio financiero para la Argentina de 2.000 millones de dólares", había señalado el funcionario nacional.
Guzmán había explicado que esos US$ 430 millones no iban a ser "un anticipo de pagos, pero sí proporcionales a cuenta del capital".
El primer desembolso estaba pautado para fines de julio y el resto, el próximo año, ya que Guzmán consideró que pagar el monto total estipulado antes de la renegociación "hubiese sido un golpe a las reservas internacionales y generado más inestabilidad cambiaria y macroeconómica en general".
Mientras tanto, la Argentina continúa en negociaciones con el Fondo Monetario Internacional (FMI) para refinanciar el stock de deuda de casi 45.000 millones de dólares en un contexto en el que espera la llegada de los Derechos Especiales de Giro (DEG).
En el inicio de semana, las reservas se habían ubicado en US$ 42.837 millones, por lo que la baja es de US$ 190 millones.
Hace tan solo unos días atrás habían alcanzado ubicarse por encima de los US$ 43.000 millones por primera vez en casi un año.
Así sucedió en un contexto en el que la autoridad monetaria pudo durante el último período terminar con saldos favorables en sus intervenciones diarias frente a un buen nivel de oferta genuina por parte del sector privado.
En ese escenario, impactó el aumento de los precios internacionales de las commodities, en especial la soja y el maíz, que además de permitirle a Economía una mayor recaudación por derechos de exportación, cambió el perfil del BCRA de vendedor a comprador de divisas en el mercado mayorista, según destacan analistas.
Sin embargo, este martes cortó con la racha de compras, dado que tuvo que vender unos US$ 70 millones ante un repunte en la demanda.