Las reservas del Banco Central se fortalecerán desde este lunes con USD 4.355 millones que el FMI enviará en formato de Derechos Especiales de Giro (DEG).
Las reservas del Banco Central se fortalecerán desde este lunes con USD 4.355 millones que el FMI enviará en formato de Derechos Especiales de Giro (DEG).
Gran parte de ese monto será destinado a afrontar dos vencimientos con el organismo multilateral por un total de USD 3.600 millones en lo que resta del año.
De esa forma, los pagos al Fondo no representarán un golpe para las reservas del BCRA, en momentos en que existen presiones del mercado sobre el dólar.
Los pagos con el Fondo vencerán el 22 de septiembre y 22 de diciembre próximo, por USD 1.800 millones cada uno.
La dirección del Fondo Monetario propuso como medida para atenuar el impacto de la pandemia una ampliación de capital y que ese dinero sea destinado a sus países miembros en proporción a sus cuotas, en formato de DEG.
En total se emitirán USD 650.000 millones, y a la Argentina le tocarán USD 4.355 millones, equivalente a la cuota del 0,67% que el país tiene en el organismo.
El FMI hizo esta misma operación en 2009, cuando también giró DEG a sus países miembros en medio de la crisis de Lehman Brothers.
Los DEG se pueden considerar activos de reserva internacional pero no son una moneda.
Su cotización se determina sobre la base del dólar estadounidense, el euro, el renminbi chino, el yen y la libra esterlina.
La Argentina pretende acceder a una mayor cantidad de estos derechos especiales, especialmente si están en poder de países que no los utilicen, como Rusia.
Se calcula que unos USD 400.000 millones irán a países que no los usen.
México apoya la postura de la Argentina que fue elevada y planteada en el G-20.
El país busca acordar con el organismo un préstamo a diez años para refinanciar el pago de una deuda por unos USD 45.000 millones.
El objetivo del Gobierno es llegar a ese acuerdo hacia marzo del 2022, cuando también vencerá una postergación de pagos con el Club de París.
La pretensión es que por los próximos dos años la Argentina no se vea obligada a realizar desembolsos, con el fin de destinar todos los recursos posibles a la recuperación económica tras el impacto de la pandemia.
Con información de NA